El Barça echa el resto por las secciones: déficit récord de 52 millones en 2019-2020 por el ‘efecto Mirotic’

Hubo una época en que el FC Barcelona quiso que las secciones profesionales no costaran más de 30 millones de euros anuales, pero la necesidad de volver a reinar en Europa aprieta. El club ha decidido hacer la mayor inversión de su historia en el ámbito polideportivo, con una previsión de déficit de 52 millones de euros en 2019-2020, la cifra más alta de la historia y un aumento interanual del 13%. Y el efecto Mirotic tiene mucho que ver. Junto a unos ingresos de 13 millones, hacen que el gasto real de baloncesto, balonmano, fútbol sala y hockey patines asciendan a 65 millones.

La junta directiva de Josep Maria Bartomeu ha echado el resto por el baloncesto con el fichaje de Nikola Mirotic, Brandon Davies y Cory Higgins, que deben permitir al Barça volver a optar a la Euroliga y discutir el liderazgo del Real Madrid en ACB. Una inversión que supondrá aumentar el déficit de la sección de la canasta en un 17,8%, hasta 32,3 millones de euros. 

Es un importe superior incluso al registrado en los años en que se pagaron primas por ganar títulos importantes, dejando en entredicho el mensaje que se había lanzado de que la llegada de varios exNBA no impactaría en el presupuesto del equipo. Al contrario, pues los costes salariales del baloncesto pasarán de 25,6 millones de euros en 2018-2019 a una previsión de 33,26 millones.

Esta es la disciplina que más aumentará sus números rojos y la que más presupuesto consume, incluso por encima del Real Madrid, que prevé unas pérdidas de 27,9 millones este año en baloncesto. Ahora bien, el balonmano también aumentará su desfase entre ingresos y gastos, que alcanzará 8,6 millones de euros, un 12,4% más, por los 2,9 millones del hockey patines, un 7,4% más. En cuanto al fútbol sala, se prevé que sus pérdidas pasen de 4,3 millones a 5,7 millones de euros.

Una de las razones que explica el aumento de las pérdidas de las secciones es el aumento de los gastos de explotación generalizados, pero también la pérdida de ingresos que ha supuesto la no continuidad de Lassa como title sponsor. La compañía desembolsaba entre cuatro millones y seis millones de euros anuales, un vacío que sólo se ha cubierto parcialmente con Assistència Sanitària, que se ha hecho con la publicidad de la camiseta, pero ha liberado el nombre de los equipos.

De ahí que se contemple que los ingresos agregados de las secciones, incluidas las no profesionales, desciendan un 22% en 2019-2020, hasta 12,83 millones de euros. De este importe, prácticamente el 50% lo aporta el baloncesto, que contempla dos millones de euros por competiciones, 758.000 euros por abonados y 3,63 millones por televisión, además de 2,75 millones por el área comercial, la mitad que en 2018-2019.

En cuanto al balonmano, se contempla también una caída del 50%, hasta 1,17 millones de euros, de los que 534.000 euros son por comercial, 406.000 euros por televisión y 166.000 euros por competiciones; los abonados apenas supondrán 62.000 euros. En cuanto al hockey patines y el fútbol sala, conjuntamente generarán poco más de un millón de euros.

Pese a la realidad de estos números, que reflejan la dificultad de rentabilizar la actividad en disciplinas que no sean el fútbol, Bartomeu ha vuelto a defender esta apuesta polideportiva que forma parte de la idea “més que un club”. “Esperamos mucho de ellos”, ha asegurado Bartomeu a los socios compromisarios. Por inversión no será.