‘El Clásico’ de la ACB: pérdidas récord de 60 millones y negocio a la baja con una caída del 9%

Jamás aspirar a ganar la Euroliga les había salido tan caro a Real Madrid y Barça. En una temporada en que ambos han reforzado sus plantillas con las mayores estrellas de Europa, los dos clubes sumarán unas pérdidas de sesenta millones de euros en 2019-2020. Es una cifra sin precedentes que sólo pueden permitirse gracias a las ganancias que genera el fútbol, que año tras año compensa los números rojos de la canasta. Es más: sus ingresos agregados apuntan a 25 millones de euros, un casi un 9% menos que en 2018-2019.

El baloncesto blaugrana perderá más dinero que el blanco por el esfuerzo realizado en mejorar la plantilla, en la que invertirá 32,9 millones de euros, un 59,7% más que en 2018-2019. A las llegadas de Nikola Mirotic, Álex Abrines, Brandon Davies, Cory Higgins y Malcolm Delaney, se suman las renovaciones de Adam Hanga, Víctor Claver y Thomas Heurtel. Jamás el Barça ha invertido tanto en su plantilla como este año, ni siquiera cuando Juan Carlos Navarro jugaba en el primer equipo.

Es un gasto en la plantilla deportiva superior al del Real Madrid, que esta temporada destinará 30,3 millones de euros a este fin, un importe similar al de la temporada anterior. El impacto de la salida de Gutavo Ayón se diluye por las llegadas del ex NBA Jordan Mickey y el último MVP de la ACB, Nico Laprovittola, pero sobre todo la continuidad de los campeones del mundo Sergi Llull y Rudy Fernández, y la renovación de Walter Tavares.

Pese a que el Real Madrid mantendrá el gasto en su plantilla, prevé reducir sus pérdidas y situarlas por debajo de las de su eterno rival, con 27,9 millones de euros, un 3% menos que el año anterior. ¿El motivo? La capacidad de generación de negocio del club merengue está muy por encima que la del Barça, que prevé ingresar 9,1 millones de euros, un 23% menos; son casi seis millones menos que el Madrid, que facturará 15,88 millones de euros, una cantidad similar a la de la temporada pasada.

Está por cuál será la capacidad de generar ingresos del club catalán cuando estrene el nuevo Palau Blaugrana en 2022, pero en 2019-2020 prevé recaudar 2,79 millones de euros con la venta de abonos, entradas y cobros de ACB y Euroliga al margen de la televisión. Es la mitad de lo que facturará el Real Madrid, que juega en un WiZink Center con casi el doble de capacidad.

El Barça es consciente de la expectación que ha levantado entre la afición el nuevo proyecto, y ha decidido dejar de vender abonos, que en 2019-2020 están limitados a 4.300 pases. De este modo, deja un mayor número de asientos disponibles para la venta en taquilla, convencido de que podrá llenar con frecuencia el Palau, como lo hizo en el primer partido oficial que jugó en casa ante el Baskonia, con 6.578 asistentes.

El Real Madrid, por su parte, este año ha alcanzado los 8.000 abonos, la mejor cifra de los últimos años en el arranque de temporada. Su media de asistencia fue de 8.300 aficionados durante el año pasado, una temporada en la que pasó de ser el tercer equipo con más seguidores en las gradas a ocupar el cuarto lugar del ránking de la ACB.

En el plano comercial, el Real Madrid también superará al Barça en la temporada en que  Palladium y Assistència Sanitaria han firmado como principales patrocinadores de cada uno. Se estima que el negocio comercial merengue alcanzará 7,5 millones de euros, un 9,9% más, por los 2,79 millones de euros del Barcelona, la mitad que el año anterior, al perder el contrato con Lassa, que daba nombre a las secciones profesionales. A estas marcas se suman Betfair y Serveto como espónsors

Será en el apartado televisivo en el que el club presidido por Josep Maria Bartomeu prevé superar al de Florentino Pérez, con 3,6 millones y un 28,3% inteeanual, por los 2,2 millones que el Madrid espera obtener, apenas un 1,32% más. Está por ver si los clubes cumplen o superan previsiones, pues a partir de esta temporada entra en vigor el acuerdo televisivo de Dazn con la Euroliga.  Como resultado, el Real Madrid espera generar un volumen de ingresos similar al del año pasado, mientras que el Barça espera facturar 9,1 millones, un 23% menos que en 2018-2019.

Lo que está claro es que, pese a los esfuerzos de ambos clubes por generar más ingresos ordinarios, la aportación del fútbol es y continuará siendo providencial para que Barça y Madrid vuelvan a competir por todo en Europa. Su fuerte inversión no deja apenas margen de error para que el Clásico de la ACB reine también en el Viejo Continente, a la espera de que algún día llegue la sostenibilidad.