El Club de Campo frena más de 2,5 millones de inversión en la reforma de ‘los hoyos Ballesteros’

Las mejoras en el Club de Campo de Madrid deberán esperar. La entidad tenía previsto invertir más de dos millones y medio de euros el próximo 2021 para seguir actualizando una de las mejores instalaciones de golf, hockey e hípica del país, pero la caída de ingresos derivada de la pandemia ha puesto el pause en estos proyectos.

“Queremos reformar los nueve hoyos del campo de Severiano Ballesteros, nos hace mucha ilusión”, asegura Jesús Barrera, director de deportes del Club de Campo Villa de Madrid desde enero de este año. De hecho, la entidad contemplaba invertir más de dos millones de euros en esta reforma ya anunciada, pero Barrera reconoce que “con el Covid será difícil poderla hacer en 2021”.

La remodelación fue adjudicada mediante concurso público en octubre del año pasado a Olazábal Design, empresa de diseño de campos de golf del jugador profesional José María Olazábal.

Otra de las grandes inversiones contempladas para el próximo año era la construcción del tercer campo de Hockey Hierba del club, así como la infraestructura colindante, como, por ejemplo, el aparcamiento para los socios. Sólo el campo supone una inversión de más de 100.000 euros. “Queremos albergar competiciones europeas de todas las categorías, por eso queremos apostar por la construcción de un nuevo campo”, explica Barrera.

El Club de Campo cerrará el ejercicio con un beneficio de alrededor de 370.000 euros

Por último, la entidad también se planteaba la construcción de nuevos campos de croquet, que suponen inversiones de unos 100.000 euros, asegura el director de deportes. De hecho, durante el confinamiento el Club de Campo construyó su primera instalación de este deporte.

La mayoría de estas inversiones se verán aplazadas al 2022, pues el club ha notado una importante caída de ingresos como consecuencia derivada del coronavirus. Aun así, el Club de Campo Villa de Madrid conseguirá cerrar el ejercicio 2020 en números negros, aunque menos de la mitad de lo previsto. En su presupuesto para este año, la entidad contemplaba un beneficio de 737.674 euros, por lo que, a falta del último mes del año, la entidad cerrará con un beneficio por debajo de los 370.000 euros.

En cuanto a facturación, la entidad tenía presupuestados unos ingresos de 24,7 millones de euros, de los cuales el 70% proceden de las cuotas de los 34.000 socios que tiene la entidad en la actualidad. “Las cuotas se mantuvieron durante el confinamiento, lo que no pudimos cobrar son las cuotas de uso que son otra gran fuente de ingresos”, explica Barrera. Durante el confinamiento se dejaron de ingresar un millón de euros sólo en concepto de dichas cuotas.

La entidad cerrará 2020 con un beneficio inferior a los 370.000 euros, lejos de los 737.000 euros previstos

Por otro lado, el Club de Campo también tuvo que realizar ajustes salariales. Si bien es cierto que los empleados de la entidad encargados del mantenimiento siguieron trabajando, algo que vino muy bien para el césped de los campos de golf que pudieron tomarse un descanso según el director de deportes, los jugadores sí que tuvieron que aceptar reducciones salariales.

“Teníamos un informe que nos decía que había que recortar entre un 20% y un 30% los salarios y al final hemos estado muy lejos de esas cifras”, afirma Barrera. Todavía ahora la entidad sigue intentando ajustar algunos gastos, como el de los viajes de los primeros equipos que, mientras antes siempre contaban con pernoctación, ahora ya no.

Como retos de futuro, el director de deportes del Club de campo apunta hacia una mejora de las instalaciones, pues recuerda que “siempre volcamos nuestros beneficios a la entidad”. Además, señala la cantera como el puntal de futuro del club: “si no miramos a la promoción cometeremos un error; si sólo apostamos por los adultos en setenta años no quedaremos sin socios, hay que apostar por las escuelas por la cantera para que estos jóvenes sigan siempre vinculados al Club de Campo Villa de Madrid”.