Los actores de la Superliga: quién está a favor y quién en contra

El fútbol europeo se divide. Después de años de especulaciones acerca del nacimiento de una competición alternativa respecto a la Champions League donde sólo tengan cabida los más grandes, doce clubes se han desmarcado del resto. Como consecuencia, equipos, ligas, federaciones, organismos del fútbol mundial y hasta presidente de gobierno han adoptado distintas posturas respecto a la decisión, que no ha dejado indiferente a nadie.

El primer club en ser invitado y rechazar la propuesta ha sido el Borussia de Dortmund, que, a través de su director ejecutivo, ha confirmado esta misma mañana que el club alemán piensa incorporarse a la Superliga. No se ha hecho esperar tampoco la respuesta de algunos líderes de estado, como es el caso de Boris Johnson en Inglaterra y Emmanuel Macron en Francia. El primero ha mostrado su rechazo al proyecto porque este “amenaza la pirámide del fútbol europeo y acabaría con el sistema de meritocracia establecido desde hace muchos años”, mientras que el segundo ha querido acordarse de los aficionados del resto de equipos del país: la Superliga golpearía al sistema de la Premier League y preocuparía a los aficionados de todo el país”, comentaba Johnson.

En España, el presidente de LaLiga, Javier Tebas, ha arremetido contra los clubes que pretenden organizar una competición paralela, argumentando que “al fin van a salir del 'bar de las cinco de la mañana', de la 'clandestinidad', los gurús de la superliga de 'powerpoint'”. En un tono más distendido ha expresado su opinión el presidente del Consejo Superior de Deportes (CSD) José Manuel Franco, que ha abogado por dialogar con todas las partes implicadas para tener una opinión al respecto.

También se ha movido la Asociación de Clubes Europeos (ECA), que se sitúa del lado de la Uefa y la Fifa, tras la decisión de los doce clubes fundadores de la competición de abandonar el organismo, que presidía hasta ayer Andrea Agnelli, presidente de la Juventus. Según RMC Sport, el presidente de uno de los tres clubes que faltan por adherirse a la Superliga (en principio PSG, Bayern y Borussia de Dortmund), Nasser Al-Khelaifi, será el sustituto de Agnelli en la presidencia de la ECA.

Durante la tarde de ayer, mientras sobrevolaba la posibilidad de hacerse pública la decisión de los clubes impulsores de la Superliga de abandonar la Champions League, la Unión de Federaciones Europeas de Fútbol (Uefa) tomó cartas en el asunto y se posicionó en contra del torneo junto a las principales ligas y federaciones europeas, abogando por la supervivencia de los campeonatos nacionales e internacionales.

Para preservar el actual formato de las competiciones vigentes, las competiciones domésticas como LaLiga, la Serie A y la Premier League se han opuesto a la nueva competición, uniéndose para amparar al resto de clubes que no formen parte del nuevo evento europeo.

En el mismo sentido actuaron también las distintas federaciones del fútbol europeo como la Federación Española de Fútbol (Rfef), la Federación Italiana de Fútbol (Figc) y la Federación Inglesa de Fútbol (FA).

Para concienciar a los clubes que han llevado a cabo el movimiento de desligarse de Uefa y la Champions League, el propio organismo europeo avisó de las posibles medidas que llevaría a cabo, tanto legales, competitivas y económicas, pudiendo no llegar a disputar ninguna competición a nivel nacional dependiendo de los estatutos de cada una.

La Superliga, presidida por Florentino Pérez, tiene como equipos fundadores al FC Barcelona, al Real Madrid, al Atlético, al Manchester United, al Manchester City, al Chelsea, al Liverpool, al Tottenham, al Arsenal, al Milan, al Inter y a la Juventus de Turín, únicos clubes que de momento están a favor de la nueva competición.