Qatar busca la guinda deportiva con el Mundial de Baloncesto 2019

Qatar se ha convertido en uno de los países que más presencia ha ganado en el mundo a base de eventos deportivos y, en muchos casos, no exentos de polémica. Después de adjudicarse acontecimientos de gran impacto como el Mundial de Fútbol 2022 y el Mundial de Atletismo de 2019, el emirato del Golfo Pérsico ha presentado su candidatura para el campeonato de baloncesto de 2019 o 2023.

El país deberá competir con China, Turquía, Filipinas y Alemania, que podría organizar la cita en alianza con Francia. En contra de esta última candidatura juega el hecho de que el último Mundial de Baloncesto se haya celebrado en España, con un importante impacto económico que ha justificado su celebración.

En contra de Qatar juega la polémica que ha rodeado a sus últimas conquistas de organización de eventos deportivos. El pago de sobornos o la inclusión de prebendas económicas de última hora han sido la tónica de sus últimas adjudicaciones. La Fifa ha dejado en manos de la Fiscalía suiza la investigación sobre la concesión del Mundial de 2022, después de un informe interno que pone en duda la regularidad del proceso. En el caso del campeonato de atletismo, la delegación española criticó duramente a la federación internacional por aceptar la inclusión de última hora de un paquete de patrocinio fuera de mercado.

En total, Qatar albergará en la próxima década una decena de torneos internacionales. Hace una semana acogió el Mundial de Natación en piscina corta y el año que viene albergará la copa del mundo de balonmano. En la lista también figuran los mundiales de bolos, boxeo, ciclismo en pista y gimnasia rítmica.