Equipamiento
La Generalitat de Catalunya asume la gestión de Boí Taüll tras la renuncia de la concesionaria
Promocions Turístiques de la Vall tenía la concesión de la explotación de las instalaciones hasta abril de 2019. Su salida obliga al Gobierno catalán a asumir la gestión e invertir 1,3 millones en su puesta a punto para la temporada de invierno.
28 nov 2018 - 09:39
Cataluña recupera la explotación de las pistas de esquí Boí Taüll. Las instalaciones, que son propiedad de la Generalitat desde 2014, estarán operadas directamente por el Gobierno catalán después de que la adjudicataria Promocions Turístiques de la Vall renunciara a la explotación de las mismas. La sociedad tenía la concesión hasta el 30 de abril de 2019, pero su salida ha obligado a la Generalitat a mover ficha.
La compañía ha decidido renunciar por los problemas económicos que sufre su matriz, Nozar, que está en concurso de acreedores. A partir de esta temporada, las empresas públicas Actius de Muntanya y Avançsa realizarán las actuaciones necesarias para asegurar la aperturas de la estación de esquí ubicara den Lleida. El Gobierno catalán ha aprobado una inyección de 1,3 millones de euros para realizar las mejoras necesarias.
La consellera de Presidencia y portavoz del Ejecutivo, Elsa Artadi, ha asegurado que el ejecutivo es consciente de la relevancia de esta estación para el territorio por los puestos de trabajo y la actividad económica que genera. En la actualidad, el complejo genera 65 empleos directos. Ahora, la intención del Gobierno autonómico es trabajar para sacar a concurso una nueva licitación y establecer un plan de futuro que garantice la rentabilidad de la instalación de una estación que tiene las cotas más altas de esquí del Pirineo.