Juan Roig mantiene su apuesta por el rugby y aúpa Les Abelles con otros 100.000 euros

Juan Roig sigue apostando por el rugby. La Fundación Trinidad Alfonso, presidida por Juan Roig, dueño de Mercadona, aportará 100.000 euros esta temporada a Les Abelles Rugby Club, lo que supondrá un 15% de su presupuesto. El equipo, que este año ha realizado una inversión de 50.000 euros en estructura del club, tendrá un presupuesto para la temporada de 650.000 euros y se ha marcado el objetivo de incrementarlo hasta 850.000 euros durante los próximos años.

La Fundación Trinidad Alfonso destina alrededor de 450.000 euros al rugby en la Comunidad Valenciana. Los equipos reciben una ayuda directa, en función de su categoría o de si tiene equipo femenino, fichas de cantera o viajes y desplazamientos. Además la entidad, tras el Covid-19, se ha aliado con la Federación Española de rugby (FER) para ofrecer ayudas a clubes y jugadores de la cantera. Por otro lado, la entidad ha impulsado este año la construcción de un campo de rugby en Picanya, gestionada por el exjugador César Sempere y que tuvo un coste de 400.000 euros.

La entidad de rugby, está haciendo inversiones en estructura para “tratar de mejorar la máquina de fabricar jugadores”, asegura Antonio Márquez, presidente del club que este año cumple su cincuenta anivesario. Esta inversión asciende a los 50.000 euros. Desde el club, se ha apostado por un staff mejor, reforzar la dirección técnica, la parte administrativa y parte de la organización como los departamentos de comunicación y de márketing.

En cuanto al presupuesto, el objetivo es mantener el del año pasado, que fue de 650.000 euros y se pudo cumplir sin pérdidas. “Somos cautelosos, nos lo hace ser la situación con los patrocinadores”, asegura Márquez. A pesar de seguir contando con uno de los menores presupuestos de la división, el club espera tener garantías de estar en un punto intermedio en dos o tres años y poder cumplir con un presupuesto de 800.000 euros. “El año pasado, aun contando con el presupuesto menor, no se nos dieron mal las cosas, nos salvamos sin promoción y fue un logro”, explica el presidente.

Los ingresos del club se dividen en un 35% de aportaciones de los socios en concepto de abonados o ticketing, 30% en concepto de aportaciones de la administración pública y el otro 35% de aportaciones del sector privado, entre ellos los 100.000 euros aportados por la Fundación Trinidad Alfonso.  

Juan Roig, mediante la Fundación Trinidad Alfonso, ha impulsado la construcción de un campo de rugby en Picanya

Les Abelles tiene como objetivo eliminar la dependencia del club a las subvenciones y trabajar en patrocinios para hacer un producto más atractivo intentando que las empresas privadas apoyen al deporte. “Queremos dejar de depender de las subvenciones públicas, las aportaciones son volátiles y no sabes de cuanto van a ser”, insiste Antonio Márquez.

Para cumplir con la meta de hacer el producto más atractivo para las empresas privadas habrá que aumentar presencia en los medios y ser más atractivo en ellos teniendo en cuenta el punto de partida que serán los partidos. Márquez insiste en ello y en que se pueden hacer “eventos excepcionales que generen mucha expectación”. El rugby tiene una imagen muy limpia a pesar de que el problema sigue siendo traer a la gente al campo. “Hasta hace poco asistían jugadores o gente del club que habían pasado por el club y, ahora, estamos consiguiendo que se acerquen más aficionados aunque no entiendan mucho sobre las reglas se lo pasan bien”, asegura el presidente. “Es muy importante traer a gente para generar esa corriente y ese polo de atracción”, sostiene.

Generar esta expectación también beneficiará al aumento de las audiencias. A pesar del salto con la retransmisión en LaLigaTVSports, desde el club se está trabajando para una mejor difusión de todos los contenidos que tendrán que ser un producto de mayor calidad que se parezca al que ofrecen otros deportes. Es por eso por lo que el sector del rugby tiene que seguir trabajando en ello aun conociendo la magnitud de los otros deportes. “Compites con deportes muy instaurados e implementados que tienen niveles de retrasmisión muy altos”, explica Márquez.

El rugby quiere competir con otros deportes para ganar magnitud en las retransmisiones

Para poner en valor al rugby también se tendrá que pasar por la profesionalización del deporte y refuerza empezando por profesionalizar la estructura de los clubes, sus plantillas y regular los contratos; la capacidad de los departamentos de comunicación y de márketing para generar engagement y atraer al público jugando con la ventaja de que el rugby “tiene una imagen muy positiva en la sociedad, significa compañerismo, esfuerzo y trabajo en equipo”, define el presidente.

El club de rugby Les Abelles cuenta con un total de cuarenta entrenadores o monitores y está dividido en varias secciones. La categoría más baja es la escuela, con un director, la sub6 y la sub12. La academia es la segunda con su director y las categorías sub14 y sub18. Y por último están los equipos, que son cinco, controlados por el director deportivo que está por encima de los entrenadores y es quien coordina el proyecto deportivo y técnico. Estos cinco equipos son senior, tres masculinos y dos femeninos y, cada uno cuenta con su propio equipo técnico y su staff, reforzado recientemente.

El club, que cumple este año sus cincuenta aniversarios quiere hacer actos en motivo de la celebración y reforzar la presencia del club en medios. Actualmente también cuenta con una sección de pádel donde compiten cuarenta jugadores y federados y también tiene un proyecto de rugby inclusivo con su sección y un encargado que coordina y gestiona sus trabajos.

Les Abelles cumple este año su cincuentenario

El club cuenta con más de 300 fichas en las categorías inferiores en su escuela que suponen un refuerzo para el primer equipo. “Somos una fábrica de jugadores que alimenta al primer equipo, no tenemos la necesidad de fichar a quince jugadores, tenemos a gente en sitios puntuales que aportan un recambio de calidad”, explica Márquez, que mantiene el objetivo de mejorar su “fábrica” de jugadores y dotarlos de los mayores recursos partiendo de mejorar la parte técnica y la formación de entrenadores.

La situación de la sección femenina en el club el año pasado se complicó a causa de la brevedad de la temporada como consecuencia de la pandemia, se perdió la categoría pero ahora la entidad propone proyectos más consolidados y asentados. “Le veo mucho futuro, se va mejorando mucho y, hay que pelear por los puestos altos a pesar de descender y la mala sensación que nos dejó hay que recuperar esas sensaciones”, explica Antonio Márquez.