LaLiga Santander ‘in cash’: los clubes tenían 805 millones antes del peor año de su historia

Ningún club de LaLiga Santander figura entre los diez con mayor capacidad de inversión por parte de sus propietarios. Dicho de otra manera: los equipos de Primera saben que dependen únicamente de su capacidad de generar caja en el momento más delicado que ha atravesado la industria del fútbol en los últimos 75 años. Su posición de tesorería era de 805 millones de euros al término de 2018-2019, el mejor dato histórico, según los datos recopilados por Palco23, pero la duda es: ¿bastaría para soportar un golpe como el del coronavirus?

Fuentes financieras consideran que, por el momento, todo apunta a que deberían aguantar con recursos propios y aprovechando las herramientas creadas por el Gobierno, como las bonificaciones en los expedientes de regulación temporal de empleo (Erte). “Realmente el agujero actual son dos jornadas de matchday; el problema estará hacía junio”, señalan desde un banco, en referencia al mes en el que se producen el grueso de pago de nóminas junto a julio y donde la falta de caja podría golpear duramente a los equipos más débiles financieramente.

“Hasta ahora concentrábamos toda nuestra energía en elevar las cifras de ingresos brutos y beneficios; […] creo que ahora todos reconocen que lo más importante es la liquidez y hoy el cash lo es todo”, advertía este fin de semana en El País Karl-Heinz Rummenigge, presidente ejecutivo del Bayern de Múnich. Y ahí la clasificación del fútbol español es muy diferente a la que ofrecen los resultados sobre el césped, con equipos de menor tamaño evidenciando una posición más robusta.

Rummenigge: “Creo que ahora todos reconocen que lo más importante es la liquidez y hoy el cash lo es todo”

El veterano dirigente alemán no deja de condensar a su manera la expresión revenue is vanity, profit is sanity, but cash is King (ingresos es vanidad, beneficio es salud, pero la caja es el rey). “Y no todos en la industria tienen efectivo para lidiar con una situación semejante porque esto no era predecible”, remachaba el exfutbolista, que en su club ha logrado acordar un ajuste de sueldos temporal y ha renunciado a parte de los ingresos por televisión para ayudar a los equipos más pequeños de la Bundesliga.

El Bayern es de los que más dinero tiene en caja de toda Europa, con 220,8 millones de euros, junto al Arsenal (261,5 millones de euros) y el Manchester United (273,5 millones de euros), según el estudio Football Finance de Soccerex. Y ese es el cojín que no todos tienen los grandes de Europa. 

Es una concesión que el FC Barcelona difícilmente podría realizar, pues en el último año y medioha incrementado de forma importante su endeudamientopara cubrir tensiones de tesorería que ya se producían antes del estallido de la crisis del coronavirus. Al término de 2018-2019 disponía de 160,67 millones de euros en caja, un importe que rápidamente desaparece, pues el grueso de la ficha del curso se paga en julio. 

El trono es para el Real Madrid, con 185,53 millones de euros de tesorería a 30 de junio de 2019, que se complementaba con líneas de crédito sin usar por 285 millones de euros. Estas operaciones se firmaron en paralelo a la firma de la financiación para las obras del Santiago Bernabéu, con condiciones previas a la crisis, por lo que dejan aún en mejor posición al conjunto presidido por Florentino Pérez, uno de los que se resiste a tocar el salario a ninguno de sus trabajadores.

El Athletic Club se sitúa en tercera posición, con una ventaja de la que pocos disponen. Los vizcaínos ya no es que dispusieran de 145,27 millones de euros en caja al término de 2018-2019, clave en la gestión de los flujos de tesorería, sino que contablemente tiene provisiones por 122 millones de euros para liberarsi en algún momento los ingresos ordinarios no bastan para cubrir todos los gastos.

Es un escenario que podría producirse en 2019-2020, pues la previsión de LaLiga es que los clubes pierdan entre 156 millones y 957 millones en ingresos. Incluso en el caso que se complete la temporada con un calendario más ajustado en verano, la patronal tiene asumido que sus afiliados habrán perdido ingresos por televisión, taquilla y patrocinios.

Los futbolistas se quejaban este fin de semana que se les exija a ellos asumir el grueso del ajuste, hasta el punto de cuestionar que “la bien saneada economía predicada desde la patronal, en relación con los clubes, no ha supuesto un colchón para una situación temporal de dos meses”. El problema es que no tenían en cuenta que esa generación de caja no sólo se destina al día a día, sino a financiar proyectos a medio y largo plazo.

La caja del CD Leganés está invertida en bolsa, lo que podría provocarle importantes minusvalías en 2019-2020

El último Informe Económico-Financiero del Fútbol Profesional, de 2018, señala que “LaLiga ha sido capaz de autofinanciar completamente su inversión productiva, tanto en capex de jugadores (634,1 millones de euros) como en infraestructuras (1.082,5 millones)”. “Incluso se ha generado un remanente para afrontar el servicio de la deuda (pago de gastos financieros y devolución de principal por importe de 372,3 millones”, añade el documento, referente a 2017-2018.

De hecho, el problema para muchos clubes no es tanto el poder o no aguantar a pulmón estos meses de incertidumbre, sino a qué deberán renunciar a causa de ello. Los equipos de LaLiga Santander y LaLiga SmartBank tenían programadas inversiones por más de 1.200 millones de euros en estadios y ciudades deportivas, que ahora podrían verse demoradas ante el roto imprevisto que se producirá.

Por ejemplo, la Real Sociedad inició el curso en mínimos de tesorería porque trató de reducir a mínimos su apalancamiento durante el proceso de remodelación del actual Reale Arena, si bien contaba con importantes líneas de crédito que le asegurarían sortear sin problemas esta situación.

En una posición muy distinta queda el CD Leganés, que decidió invertir en bolsa más de 20 millones de euros en bolsa para intentar sacar partido a los excedentes que ha logrado desde su ascenso a LaLiga Santander. El problema es que hoy esa cartera de acciones ha sufrido un importante correctivo por la crisis sanitaria, y el club podría verse obligado a echar mano de esos activos