Benfica, Porto y Sporting pierden 64,4 millones hasta marzo por la falta de traspasos

El Sevilla FC ha demostrado contar con un modelo deportivo y empresarial de éxito, que le ha permitido conformar plantillas con la que levantar trofeos al tiempo que también le proveían de los recursos necesarios mediante traspasos cada verano. Es un sistema que, con menos visibilidad internacional, también llevan años trabajando en Portugal, donde ahora se revela cuál es su talón de Aquiles. Porto FC, Benfica y Sporting Club han revelado pérdidas agregadas de 64,4 millones de euros en los primeros nueve meses de la temporada 2015-2016, esencialmente por los menores ingresos derivados de la venta de jugadores.

El caso más preocupante es el del Porto, que entre julio y marzo ha quintuplicado sus números rojos, hasta los 38 millones de euros. Su situación, además, se ha visto agravada por la prematura eliminación en Champions League, que ha provocado que los pagos de la Uefa caigan a la mitad y el negocio ordinario baje de 70,8 millones a 57,1 millones: televisión (14,2 millones), patrocinios (10,7 millones), día de partido (11,6 millones) y merchandising (3,9 millones). Ello supone que prácticamente todo la actividad recurrente se destina al pago de salarios, que han supuesto 53,5 millones en este período, y que no llega para cubrir los 29,3 millones de gastos operativos.

Y de poco sirve el negocio por traspasos como el de  Alex Sandro al Juventus o Imbula al Stoke City para compensar este déficit. De los 61,4 millones que se obtuvieron por este tipo de operaciones, el club sólo se ha quedado netos 7 millones, ya que el resto ha ido a parar a la aplicación de deterioros acelerados por sus traspasos y el pago de otros costes relacionados con sus salidas, como comisiones a intermediarios o a terceros que tenían algún derecho económico. Por si fuera poco, el club arrastra unos costes financieros de 12 millones, fruto de una deuda bruta que sube a 270 millones.

El siguiente caso, con un patrón muy similar, es el del Sporting Club, que ha pasado de un beneficio neto de 22,1 millones en los primeros nueves meses de la 2014-2015 a unos números rojos de 17,1 millones de euros en el mismo período del curso que próximamente acaba. En su caso, no obstante, el fuerte vuelco en la cuenta de resultados se debe una provisión de 14,39 millones por la sentencia del Tribunal Arbitral del Deporte (TAS, por sus siglas en francés) que le obliga a indemnizar a Doyen por el traspaso de Marcos Rojo al Manchester  United.

El consejo de administración también lo atribuye a la decisión de no vender a algunos de sus jugadores y retenerlos en plantilla, lo que ha derivado en una caída de los ingresos por traspasos en este período, al pasar de 16,1 millones a 1,56 millones de euros.De hecho, el negocio ordinario ha subido un 24%, hasta los 54,7 millones de euros, gracias a una mejora en varias líneas de negocio, como la de los derechos de televisión (18,8 millones), la venta de entradas (10,36 millones) y también de productos oficiales (2,89 millones). Los patrocinios suponen 7,55 millones.

El Benfica sigue muy por encima de sus rivales a nivel de generación de recursos, ya que sus ventas suben un 22,7% en los tres primeros trimestres, hasta 95,39 millones. Sin embargo, el negocio de compraventa de jugadores ha pasado de generar una plusvalía de 32,14 millones a un deterioro de 7,98 millones. Además, comos sus dos competidores, también arrastra unas cargas financieras (en su caso, 13,4 millones) que elevan los números rojos a 9,35 millones, frente a un resultado positivo de 13,97 millones hasta marzo de 2015.

En las oficinas del Estádio da Luz esta situación no preocupa en exceso, ya que en el último trimestre se anotarán las plusvalías del traspaso de Renato Sanches al Bayern de Múnich y esperan que eso les permita cerrar en beneficios. Además, destacan que han lograd cobrar el doble de la Uefa (30 millones) gracias a que alcanzaron los cuartos de la Champions League. A ello se le suma la mejora en patrocinios (14,3 millones), un estancamiento en televisión (24,7 millones) y un ligero avance en entradas (15 millones).