Joan Soteras, reelegido presidente de la Federación Catalana de Fútbol

Soteras sigue al mando de la FCF. Joan Soteras ha sido reelegido como presidente de la Federación Catalana de fútbol tras imponerse con 503 votos, el 58% de las 855 entidades participantes. Soteras, que asumió por primera vez el cargo en 2018 tras la dimisión de Andreu Subies, ya fue elegido en mayo de 2022, pero el Tribunal Català de l'Esport obligó a repetir las elecciones al considerar que existía nulidad de 175 votos.

Soteras se ha impuesto a Juanjo Isern, quien ha recibido 335 votos a favor, y a Pep Palacios, con tan sólo doce votos a favor. Un total de 1.220 miembros asambleístas que forman el censo estaban llamados a las urnas, aunque en los comicios han participado 873.

Ante su nuevo mandato, Soteras ha asegurado que “hemos ganado con diferencia y con esto demostramos que el fútbol catalán quiere que lo gobernemos nosotros”. Además, ha añadido que “debemos seguir quitando la corrupción que había dentro del fútbol catalán”.

Soteras, si cumple su mandato, estará al frente de la FCF ocho años

El directivo de Sabadell vuelve a ser nombrado presidente de la máxima representación del fútbol catalán. Soteras nació en 1948 y ha estado ligado al mundo del deporte desde hace décadas, ocupando la vicepresidencia de la Real Federación Española de Fútbol (Rfef) y la presidencia del Centre d’Esports Sabadell.

Según los últimos datos disponibles de la entidad en su portal de transparencia, la FCF cerró el ejercicio 2020 con un déficit de 1,4 millones de euros, a diferencia del ejercicio 2019, cuando alcanzó un superávit de 284.693 euros.

Los ingresos disminuyeron un 47%, al pasar de 26,8 millones de euros en 2019 a 14,2 millones de euros en 2020. El principal motivo de la disminución es la caída de alrededor de once millones de euros de los ingresos federativos.

La FCF contó con un presupuesto de 26,9 millones de euros para 2022. La partida presupuestaria para la que mayor importe anticipaba la entidad fue la de competiciones, que ascendía a 12,2 millones de euros, seguida por sueldos que se elevaba a 5,6 millones de euros.

Por su parte, los ingresos derivados de competiciones ascendían a 13,2 millones de euros, seguido por las subvenciones administrativas, a través de las que la FCF esperaba ingresar alrededor de 3,8 millones de euros.