Roland Garros se retrasa una semana por el coronavirus

Un año más, Roland Garros cambia de fecha por el coronavirus. El torneo, que debía empezar el 23 de mayo, verá retrasado el inicio de su cuadro principal una semana, hasta el 30 de mayo, debido a las restricciones impuestas por la evolución del coronavirus en Francia, según han confirmado la ATP y la WTA a través de un comunicado.

“El tenis ha requerido un enfoque ágil del calendario durante los últimos doce meses para manejar los desafíos de la pandemia, y este sigue siendo el caso”, detallan en la nota de prensa conjunta.

La decisión de retrasar el inicio de Roland Garros una semana es consecuencia de las nuevas medidas impuestas en Francia la semana pasada para frenar la pandemia del Covid-19, con una incidencia de 756 casos por 100.000 habitantes en catorce días y cuarto país de todo el mundo que más casos reportó la semana pasada. De esta manera, la organización “gana tiempo” para que los aficionados puedan presenciar el torneo en directo, un aspecto clave para la viabilidad económica de Roland Garros.

Roland Garros retrasa su inicio hasta el 30 de mayo con la intención de ganar tiempo para que haya público en las gradas

“Este aplazamiento nos permitirá un poco más de tiempo para mejorar la situación de salud y nos permitirá optimizar nuestras posibilidades de recibir espectadores a Roland Garros, en este estadio transformado que ahora abarca más de 12 hectáreas”, destaca Gilles Moretton, presidente de la Federación Francesa de Tenis (FFT). “La presencia del público es esencial para el torneo, el primer evento deportivo internacional de la primavera”, sentencia.

“Tanto la ATP como la WTA están trabajando en consulta con todas las partes afectadas por el aplazamiento para optimizar el calendario para jugadores, torneos y seguidores, en el período previo y posterior a Roland Garros”, señalan ambas organizaciones.

La pasada edición del torneo retrasó su inicio cuatro meses, para acabar disputándose del 27 de septiembre al 11 de octubre, siendo el único de los tres Grand Slams que faltaban por disputarse que acogió público en sus gradas. Un total de 5.000 espectadores estuvieron presentes en las pistas principales del torneo parisino, la Philippe Chatrier y la Suzanne Lenglen.