Entorno

De Extremadura a País Vasco: el atlas de la riqueza en España

En España, alrededor de un cuarto de la población cuenta con una renta alta y otro cuarto, con una renta baja. Entre territorios, sin embargo, las diferencias se acentúan, protagonizadas por los polos del norte y sur del país.

De Extremadura a País Vasco: el atlas de la riqueza en España
De Extremadura a País Vasco: el atlas de la riqueza en España
Tanto la riqueza como la pobreza se acumulan en los municipios con mayor número de habitantes.

Celia Oliveras Castillo

30 oct 2024 - 05:00

Con más de 500.000 kilómetros cuadrados y casi 50 millones de habitantes, la riqueza no se distribuye de manera homogénea en España. Si las rentas altas predominan en el norte del país, en comunidades como País Vasco, o los polos industriales tradicionales, como Cataluña, los hogares con rentas bajas afloran en el sur del territorio, lideradas por Extremadura o Andalucía. ¿Cómo es el atlas de la riqueza en España?

 

Según los datos publicados ayer por el Instituto Nacional de Estadística, la única comunidad autónoma con un más de la mitad de las personas con renta alta es País Vasco, con un 61,4% de la población con una renta neta anual alta en 2022. En el territorio, además, apenas un 1,5% de la población cuenta con una renta baja.

 

En Madrid, epicentro del país, un 46% de la población cuenta con una renta alta, mientras el porcentaje de personas con renta baja se eleva hasta el 14,1%. Sucede algo similar en Cataluña, un polo industrial y empresarial tradicional en España, donde el porcentaje de habitantes con renta alta alcanza el 39,6%, mientras que el de habitantes con renta baja se sitúa en el 10,2%.

 

 

 

 

La Comunidad Foral de Navarra, que se sitúa como la tercera con mayor porcentaje de habitantes con una renta neta alta en 2022, 39,7% de la población, se asemeja más a su territorio vecino, País Vasco, y la cantidad de habitantes con renta baja se sitúa en un ligero 2,2%.

 

En el lado opuesto del país, se concentran de manera paralela las comunidades autónomas con un mayor porcentaje de habitantes con rentas bajas y, paralelamente, las que menos rentas altas acumulan. En Extremadura, donde un 60,4% de su población cuenta con una renta baja, el mayor en todo el territorio, apenas un 7,5% de los habitantes cerró el año con una renta considerada alta.

 

La región de Murcia ocupa la segunda posición, con un 58,7% de la población con renta baja en 2022. Paralelamente, el porcentaje de habitantes que cuenta con una renta alta en el territorio apenas alcanza el 9,8%. Andalucía ocupa la tercera posición con mayor porcentaje de población con una renta baja, hasta un 57,8%, seguida de Castilla la Mancha, aunque ya por debajo del umbral de la mitad de la población, un 44,9%.

 

 

 

 

Estas diferencias entre comunidades no se trasladan, sin embargo, al conjunto nacional. En todo el territorio, la distribución de la renta sí está mejor repartida entre rangos: si un 25,1% de la población española cuenta con una renta alta, un 26,2% tiene una renta baja. En términos absolutos, del total de casi 50 millones de habitantes, 11,9 millones de estos cuentan con una renta alta, frente a los 12,4 millones que lo hacen con una de rango bajo.

 

Las rentas medias-bajas y medias-altas, por su parte, acumulan un 24,4% y 24,3%, respectivamente. En términos absolutos, se refleja en 11,6 millones de personas que cuentan con unos ingresos medios-bajos, y otras 11,5 millones de personas que lo hacen con una renta media-alta.

 

Tanto la riqueza como la pobreza, sin embargo, se acumulan en los municipios con mayor número de habitantes. En el caso de País Vasco, por un lado, del total de 1,3 millones de personas que cuentan con una renta alta, 797.918 habitantes se concentran en municipios con más de 20.000 habitantes. Paralelamente, de las 33.078 personas con renta baja en el territorio, hasta 31.560 personas viven en municipios de mayor tamaño.

 

De manera contraria, en Andalucía, alrededor de la mitad de la población con renta baja, 2,8 millones de personas sobre 4,9 millones de personas, se acumulan en los municipios con más de 200.000 habitantes. De las 832.824 personas que cuentan con una renta alta en la comunidad, casi la totalidad, 809.985 habitantes, viven en los territorios de mayor tamaño.