Entorno
Díaz-Giménez (Iese): “El populismo tiene un relato y sólo lo puedes frenar con otro mejor”
El experto en economía considera que el Brexit puede beneficiar a otras ciudades europeas como Dublín, Frankfurt o París, donde se pueden activar nuevas inversiones.
30 sep 2019 - 04:52
Javier Díaz-Giménez es profesor ordinario de economía de la escuela de negocios Iese. El experto ha sido asesor del Ministerio de Industria español y también de la Oficina Económica del Presidente. Díaz-Giménez opina que “la relación entre Reino Unido y Europa ha sido históricamente complicada y con reticencias” y que el Brexit es una consecuencia, no una causa. ¿La lección del Brexit? “No se te ocurra jamás convocar un referéndum en una democracia participativa”, exclama.
Pregunta: El Brexit ha abierto una puerta a dar marcha atrás a muchas cosas, reactivando entre ellas el proteccionismo ¿Se trata de un punto de inflexión?
Respuesta: No hay que entender el Brexit como una causa, sino como una consecuencia. La relación entre Reino Unido y Europa ha sido históricamente complicada y con reticencias. El proyecto europeo al final es el de Francia y Alemania, que son los dueños del euro.
P.: ¿Qué cambiará en el mundo después del Brexit?
R.: Fuera de Reino Unido hay un espacio más grande que el propio Reino Unido. Transcurridos varios meses, Europa y Reino Unido se sentarán y negociarán un acuerdo comercial que tendrá que definirse. El Brexit puede ser una bendición encubierta porque los países que estén planteándose una réplica van a ver las ventajas o no de estar en la Unión Europea. Por su parte, la respuesta de la Unión Europea puede acelerar el proceso integrador.
P.: ¿La globalización se puede revertir?
R.: Sí. De hecho, la Segunda Guerra Mundial revertió la primera oleada de globalización. Si los conflictos bélicos o comerciales se agravan entonces se puede revertir. Obviamente, cuánto más se integran las cadenas de valor, los costes son más elevados.
P.: ¿El modelo de Unión Europea está ante una situación crítica?
R.: La Unión Europea es la decisión de Francia y de Alemania de asociarse. Siempre ha habido una Europa del Norte que jamás va a poder ser independiente de Alemania desde un punto de vista económico. España, por su parte, va de la mano de Francia. Reino Unido nunca no ha estado completamente integrado en el proyecto europeo. En el medio plazo no alcanzo a imaginar que Reino Unido no vaya a tener una estrecha relación comercial con Europa.
“La respuesta de la Unión Europea puede acelerar el proceso integrador entre los estados miembro”
P.: ¿Puede haber efecto contagio en otros países?
R.: Todo depende de cómo le vaya a Reino Unido, nadie lo sabe.
P.: Trump, Bolsonaro, el Brexit… ¿Es todo culpa del desencanto por la crisis?
R.: Hay que separar lo que son tendencias de lo que son fluctuaciones. Lo que nos va a llevar de hoy a 2030 es una combinación de ambas. Es importante el cambio de liderazgo en el planeta, que China esté adelantando a Estados Unidos o que Asia adelante a América del Norte y a Europa es tendencial. Alrededor de todo eso hay perturbaciones, como la Guerra del Golfo o la crisis económica de 2008. Lo que ha generado el descontento, que se ha manifestado en Trump, Bolsonaro, el Brexit o Le Pen, es la consecuencia de la globalización y las tecnologías. Un caldo de cultivo idóneo para los populismos si se potencia con las redes. La lección del Brexit es no se te ocurra jamás convocar un referéndum en una democracia representativa.
P.: ¿Qué impacto tiene el Brexit en el escenario geopolítico? ¿Se puede abrir un nuevo bloque?
R.: Si tuviera que montar un bloque lo haría con Estados Unidos o con China. Reino Unido va a negociar en una posición de extrema debilidad con cualquiera. ¿Va a revivir la Commonwealth? No hay que olvidar que son las antiguas colonias de Reino Unido.
P.: La Ocde alerta de que Reino Unido podría entrar en recesión en 2020 si se produce un Brexit sin acuerdo. ¿Cómo va a impactar económicamente y qué sectores van a ser los más afectados en Reino Unido?
R.: La posibilidad de que haya una contracción del Producto Interior Bruto (PIB) es real, pero importa mucho más cuál será la tasa de crecimiento a medio plazo. La afectación dependerá de lo que hagan Reino Unido y Europa al día siguiente de la activación del Brexit.
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para esquivar el Brexit
P.: ¿Qué impacto económico tiene el Brexit para la Unión Europea?
R.: Siempre va a haber unos costes de ajuste. En Calais, por ejemplo, van a haber ahora más pernoctaciones. Hay una especie de tremendismo en el corto plazo y falta de perspectiva histórica en muchas de las discusiones. Reino Unido se va a marginalizar más. No veo que vaya a suceder una tragedia griega.
P.: ¿Qué economías pueden verse beneficiadas con el Brexit?
R.: Dublín, Frankfurt o París pueden ser las ciudades donde se hagan nuevas inversiones. Aunque es cierto que no se cierra la city de un día para otro, muchos inversores van a poner a Reino Unido en modo espera.
P.: Si usted tuviera que invertir hoy, ¿dónde lo haría? ¿Europa, Estados Unidos, China u otros países?
R.: Dublín, aunque invertiría en una cartera diversificada. No hay que olvidar que Europa está cada vez más marginada en el concierto global. El crecimiento del planeta va a seguir estando en Asia.
P.: ¿Qué medidas debería tomar Europa para que no se produzca un segundo Brexit?
R.: Europa es mejorable y quizás ha llegado el momento de plantear una reformulación. O vamos hacia una confederación, avanzando en el proyecto de integración, nos quedamos como estamos o nos quedamos pasmados viendo si alguien saca los pies del tiesto.
P.: ¿Se están tomando medidas para frenar el populismo?
R.: No hay manera de frenarlo. El populismo tiene un relato y sólo lo puedes frenar con otro relato que ofrezca una alternativa mejor.