Alberto García (Fneid): “El objetivo es minimizar y controlar los daños, que asumimos que los va a haber”

La industria de los gimnasios es una de las que ha tenido que frenar en seco su actividad por la emergencia sanitaria derivada de la pandemia del coronavirus. El gerente de la patronal Fneid, Alberto García, hace balance del impacto que puede tener la parálisis en el negocio de las gestoras de centros deportivos. “Nadie sabe cómo va a evolucionar, pero estos quince días con todas las instalaciones cerradas se prolongarán con total seguridad”, se lamenta. Aun así, asegura que “el sector va a salir reforzado porque nos hemos unido muchísimo” y apunta a que se aprovechará la ocasión para reivindicar, de nuevo, una bajada del IVA del 21% al 10%.

La patronal ha solicitado la exención a la totalidad de empresas del sector del 100% del pago de la Seguridad Social de sus trabajadores, independiente del número de empleados con los que cuente cada empresa; el aplazamiento del pago del IVA e impuesto de sociedades, y la reducción del IVA al 10%. También se solicitan líneas de crédito con condiciones extraordinarias y la adopción de medidas que eviten la obligación del empresario de abonar el alquiler del local cuando en él se desarrolle una actividad empresarial afectada por el Real Decreto y esté obligado a permanecer cerrado. También se ha pedido la moratoria para la devolución de los préstamos a las entidades financieras y la moratoria en las obligaciones de pago de gastos de los servicios fijos como la luz y el gas.

Pregunta: La presentación de EREs temporales y congelación de proyectos marcan la agenda. ¿Teme que las consecuencias económicas para el deporte sean peores que las de la crisis económica?

Respuesta: Depende de lo que dure. Las consecuencias van a ser devastadoras y, como mínimo, van a estar al nivel de la crisis de 2008. Nadie sabe cómo va a evolucionar, pero estos quince días con todas las instalaciones cerradas se prolongarán con total seguridad. Además, nuestro sector tiene la peculiaridad de que el verano es un mal momento para volver, y es cuando se espera que se regresa a la normalidad. 

R: El sector está aún en construcción. ¿Hay operadores que pueden ver comprometida su viabilidad futura?

R: Seguramente sí. Sin analizar casos concretos, en un sector como el fitness que está en proceso de maduración y con gente muy joven dirigiendo empresas, va a ver situaciones muy delicadas. Todo el sector está a cero, y tenemos la coyuntura de que en esta industria los alquileres suponen buena parte del presupuesto. Son contratos que se van a seguir pagando, al igual que los recibos de luz, gas o agua, así como el pago de préstamos con inversores y entidades financieras. 

R: Más allá de la flexibilización de los Ertes, ¿qué otras medidas creen que serían necesarias para que las empresas puedan mitigar el impacto de esta crisis?

R: Estamos solicitando que no tengamos la obligación de abonar los alquileres de estos locales que estén cerrados por el Real Decreto. El empresario no puede asumirlo y hay que buscar fórmulas para pagarlo más adelante o para que lo asuma el Estado. Es una partida que hace daño, porque supone parte de nuestro presupuesto de ingresos. En cuanto a los Ertes, las empresas con menos de 50 trabajadores no tienen que asumir ningún coste de Seguridad Social, pero aquellas que tienen más empleados están exentas hasta el 75%, así que pedimos que, en este sector, cuya actividad está a cero, la exención sea del 100% para todas las empresas independientemente del número de trabajadores que tenga. Reclamamos también la moratoria de las obligaciones de pago de servicios fijos, de impuestos y la rebaja del IVA. Es una reivindicación que hacemos para tener más clientes, no para tener más margen. Es un impuesto que grava al practicante. 

R: Una de las reivindicaciones son las líneas de crédito. ¿Qué les preocupa?

R: Nos preocupa también el acceso a las líneas de crédito del ICO, el saber cómo se va a acceder y si de verdad van a estar para todos los sectores. Son líneas fundamentales, pero tienen que serlo para todos los empresarios de todos los sectores. 

R: ¿Cree que el sector del fitness esta hoy preparado para superar esta crisis?

R: Las crisis son complicadas en cualquier momento. Habrá empresas que desaparezcan, mientras que otras que tendrán más pulmón. Desde fneid intentamos obtener el mayor número de ayudas en diversas vías y por volumen de esas ayudas para que esta situación no acabe con los empresarios. El objetivo es minimizar y controlar los daños, que asumimos que los va a haber.

R: ¿Teme que la confianza del consumidor tarde mucho más tiempo en recuperarse de lo que dicte el estado de alarma?

R: La gente va a estar deseando dejar esto atrás; ya está deseando volver a sus rutinas, porque el ser humano es un ser social. Ahora entrenarán desde casa porque no queda otra, pero al final volverán y recuperarán su rutina. No tiene nada que ver hacer deporte en casa con hacerlo en el gimnasio. Lo que me preocupa es volver en un momento del verano que es un momento complicado para nuestro sector.

R: ¿Cree que la industria saldrá reforzada de esta situación?

R: El sector va a salir reforzado porque nos hemos unido muchísimo, hemos compartido información entre asociados y con otras asociaciones vinculadas a la actividad física. Creo que eso al sector le va a fortalecer. En este impase de no actividad vamos a analizar qué tipo de modelo podemos tener con los trabajadores y asociados para intentar que en cuanto nos permitan abrir, una vez controlada la situación