BeOne toma impulso en 2018: alcanza los 28,5 millones de facturación, un 7% más

“Ha sido un buen año; estamos en números máximos de facturación en la mayoría de los clubes”. Así define Roberto Ramos, cofundador y consejero delegado de Serviocio-BeOne, el momento que atraviesa la compañía. La gestora de instalaciones deportivas asegura haber dejado atrás los efectos de la crisis económica y estar en el mejor momento de sus 25 años de historia. Según  explica el ejecutivo a Palco23, la compañía duplicó su resultado bruto de explotación (ebitda) en 2018 hasta 5,1 millones de euros y facturó 28,5 millones de euros, un 7,1% más que el año anterior.

La cadena está inmersa en varias negociaciones para firmar compraventas durante los próximos meses, una situación que, según afirma, no es excepcional en el segmento. “Este año el sector va a seguir concentrándose”, considera. Durante los últimos doce meses se han completado numerosas operaciones corporativas en el sector, como la integración de Ifitness en Altafit, o la adquisición de la lusa Fitness Hut por parte de Viva Gym.

Para Ramos, la industria de los gimnasios tiene potencial para crecer, pero no se libra de las amenazas que podría padecer. “El apoyo financiero de los fondos y de la banca indica que fitness es un mercado por descubrir, pero la amenaza está en que la oferta que creemos supere la demanda que somos capaces de generar”, advierte, sobre el desafío de mantener un crecimiento constante en el tiempo.

BeOne-Servicio ha invertido dos millones de euros en mejorar sus instalaciones en 2018, un año en que ha logrado adjudicarse la gestión de un club en Colmenar

Para mantener su posicionamiento en el sector, la compañía ha invertido dos millones de euros en 2018 en mejorar sus centros. La mayor parte de la inversión se destinó al club de Colmenar Viejo (Comunidad de Madrid) que se adjudicó el año pasado, en el que se comprometió a invertir 1,1 millones de euros. El resto de intervenciones se realizaron en aquellos centros en los que consiguió prorrogar el contrato de concesión, como A Telleira (A Coruña) y Val Miñor (Pontevedra). Al primero ha destinado 315.000 euros, mientras que el segundo exigió mejoras por 260.000 euros.

En 2019, la empresa destinará otros cuatro millones de euros a renovaciones tras haber ampliado el contrato de gestión de Campolongo (Pontevedra), en el que invertirá un millón de euros en actualizaciones del espacio. Además, espera abrir nuevos clubes durante los próximos meses, como el que se ha adjudicado en Logroño y que supondrá una inversión de cinco millones de euros.

Estas aperturas las realizará con el apoyo financiero de Formentor Capital, el fondo de inversión que en 2018 adquirió el 84% de la cadena en 2018. Su llegada supuso la salida de la gestora de fondos Atlas Capital, que en 2009 adquirió la mayoría accionarial. Junto a Formentor, en el capital seguirán los dos socios fundadores, Roberto Ramos y José Amado, que controlan un 7,95% cada uno.

La firma de inversión se ha comprometido a invertir más de ocho millones de euros para impulsar la expansión de BeOne, que en el corto plazo seguirá centrando sus esfuerzos en crecer en España. La cadena, que opera 35 clubes, da trabajo a 1.215 personas y tiene 170.462 abonados. “En nuestra hoja de ruta para los próximos años está hacer que la gente sea más activa y tenemos claro que debemos ser más proactivos, sobre todo con el público de la tercera edad”, afirma Ramos, sobre un sector de la población que representará el 39% del gasto en 2030, según un estudio de Kantar.