Fitness
Los gimnasios vuelven a subir cuotas tras el desplome de precios por el fenómeno 'low cost'
8 jun 2016 - 05:00
La industria del fitness sigue cambiando a medida que lo hacen sus usuarios. La recuperación del consumo ha hecho que los gimnasios low cost abandonen los precios más bajos y los más exclusivos suban sus cuotas y miren hacia de las boutiques como una tendencia a adoptar para aumentar la experiencia del cliente.
Aunque seis de cada diez centros mantienen sus cuotas entre 20 euros y 40 euros mensuales, en 2015 aumentaron las cuotas de más de 100 euros y disminuyeron notablemente las de menos de 20 euros, según el estudio Zoom Mercado realizado por Life Fitness en base a entrevistas a 250 gestores en España.
Entre los cambios en el precio de asistencia a las instalaciones deportivas destacan dos tendencias: que los gimnasios municipales bajan sus cuotas y que los low cost salen de los precios más bajos para instalarse en la zona media gracias a nuevos servicios como las clases dirigidas.
La causa de todo ello reside en el objetivo de los gestores de bajar la rotación de sus usuarios y fidelizar a sus clientes. Y es que la permanencia más habitual de los socios en los centros españoles es de entre 6 y 12 meses, con los estudios de entrenamiento personal siendo los que mejor índice de permanencia tienen y los gimnasios low cost los que más problemas de retención de socios presentan.
Y no es sólo una cuestión de retención, sino que el entrenamiento personal también representa la principal fuentes de ingresos tras las cuotas, mientras otros servicios como la fisioterapia y rehabilitación, la nutrición y el alquiler de espacios quedan por detrás.
En el marco del Life Fitness Day Barcelona, el director general de Gym Community, Fernando Porta, ha explicado que el principal factor para fidelizar a los clientes no es tener las mejores instalaciones, ni contar con los mejores profesionales, sino que el equipo técnico sea friendly y cree un sentimiento de pertinencia.
Según el investigador Paul Bedford, uno de los factores que más afectan a este fenómeno es que los socios que no entablan diálogo con el personal del gimnasio tienen más del doble de probabilidades de cancelar su cuota de socio que aquellos que sí lo hacen.
Porta asegura que para este reto la tecnología puede ser de gran utilidad, pero no reemplazando al equipo humano sino dando protagonismo al staff. Esta demanda se muestra también en el informe Zoom Mercado, donde los gestores han puesto como principal reclamo de sus clientes en los servicios tecnológicos a la personalización y superando así a la conexión a Internet.
El responsable tecnológico de Life Fitness Iberia, Juan Cuesta, ha comentado en la jornada que actualmente la tendencia del sector es creer que comprar la mejor tecnología es sinónimo de tener una buena estrategia digital, lo que representa un error al no hacer primero "un plan estratégico para incorporar lo digital al core business".
Precisamente, la inversión en nuevos sistemas de conectividad representa algo más del 20% entre las principales prioridades para ampliar el negocio. Ello va relacionado también con la posibilidad de implementar estas nuevas tecnologías a la compra de nueva maquinaria para la sala de fitness, una faceta donde los gimnasios privados de la zona media han aumentado su apuesta.
En este contexto, también hay una brecha muy importante en la utilización de las apps enfocadas al deporte. Y es que seis de cada diez centros admite que sus socios las utilizan, aunque sólo tres de cada diez están preparados para integrarlas con sus sistemas.