El Celta crea un departamento de marketing tras ganar 3,8 millones en el primer semestre

El Celta de Vigo quiere dar un nuevo salto cualitativo a nivel económico. El club ha anunciado la creación de un departamento de marketing, al frente del cual se situará Maruxa Magdalena Seoane, con la misión de potenciar la imagen de marca y de buscar, "de manera conjunta con área comercial, nuevas fuentes de ingresos". En la temporada 2014-2015, los ingresos comerciales y de publicidad se situaron en 3,86 millones, mientras que las ventas de la tienda alcanzaron el millón de euros.

La nueva ejecutiva, que se incorporará a finales de mes o principios de marzo, procede del grupo Plásticos Ferro, empresa coruñesa en la que ejerció como responsable de marketing entre septiembre de 2008 y enero de 2015. Anteriormente, ocupó distintas posiciones en el fabricante de bebidas alcohólicas Diageo y los grupos de medios Walt Disney Television International y Canal Satélite Digital.

"Posee una sólida experiencia en los sectores de servicios y distribución, investigación, desarrollo y ejecución de planes de marketing operativo y planes estratégicos", ha defendido el Celta, donde trabajará codo con codo junto a Camilo Lobato, director comercial de la entidad desde 2010.

Esta reorganización de la estructura ejecutiva irá acompañada de una societaria. El club ha decidido segregar todo su negocio comercial a una nueva sociedad, denominada Afouteza e Corazón, que se constituyó el pasado 26 de enero con un capital social de 100.000 euros. "Nace con la idea de explotar nuestros espacios comerciales como una empresa independiente, comprobar su rentabilidad y no mezclar las cuentas con las del club", según expuso ayer el presidente, Carlos Mouriño.

Este proyecto discurre en paralelo a la construcción de la nueva sede, que en principio estará lista en enero de 2017 y donde se instalarán distintos servicios al aficionado que se explotarán a través de la citada mercantil. "Gestionará la tienda, cafetería, policlínica, posiblemente un restaurante... el Celta recibirá beneficios y esa empresa tendrá que ser rentable por sí misma", añadió el también máximo accionistas.

Mouriño volvió a sacar pecho del saneamiento de la entidad, que en el primer semestre obtuvo un beneficio neto de 3,82  millones de euros, según expuso. En este buen resultado, que probablemente esté influenciado por los aproximadamente 2,4 millones que se recibió por el 50% del pase de Augusto Fernández al Atlético de Madrid, ha ido acompañado de una paulatina reducción del pasivo. "La deuda cero ya es real, no sólo desde el punto de vista económico sino también contablemente; de la etapa de la Ley Concursal sólo quedan 700.000 euros a pagar en 4 años", avanzó. "El Celta discurre con unas finanzas sanas y muy equilibradas", sentenció.

Una de las claves se produjo la pasada temporada, en la que se obtuvieron unas ganancias récord de 15 millones de euros esencialmente por la venta de Santi Mina al Valencia CF. Esta operación permitió prácticamente amortizar toda la deuda y apuntalar el patrimonio con la compra del citado edificio corporativo.

La facturación del Celta de Vigo en la última temporada finalmente se situó en 48,71 millones de euros, frente a los 34 millones que se presupuestaron. Desde el departamento financiero del club matizan que “el fuerte incremento del resultado neto, sobre la cifra prevista, no solamente se debe a la venta de Santiago Mina; en general hay una mejora de casi todos los epígrafes de ingresos”.

La principal fuente de ingresos fue la televisión, con 22 millones, muy por encima de los acuerdos de publicidad (3,86 millones), las cuotas de abonados y socios (3,79 millones) y los cobros por participación en competiciones y quinielas (1,17 millones). A esta cifra hay que añadir el millón de euros de las tiendas, los 136.000 euros de las cantinas del estadio de Balaídos y otros ingresos por 1,35 millones. “La mejora es generalizada” respecto a estas cifras, según enfatizan desde el equipo ejecutivo que lidera el director general, Antonio Chaves.