Al Thani 'perdona' 137 millones a un Málaga CF que esta temporada facturará 48 millones de euros

El Málaga CF ha logrado dejar prácticamente su deuda a cero, ya que en cinco años ha pasado de mantener unos compromisos de 103 millones a sólo 13,6 millones de euros. Eso sí, esta drástica reducción, de casi un 90% respecto a junio de 2011, se debe principalmente al hecho de que el jeque catarí Abdullah bin Nasser Al-Thani ha aceptado no recuperar su inversión en el club a través de diversos préstamos y que ayer se cifró oficialmente en 137 millones de euros.

La entidad ha organizado hoy un encuentro informativo con la prensa local, en el que presentó un balance económico de los últimos cinco años elaborado por EY. En él se refleja que los gastos acumulados entre las temporadas 2010-2011 y 2014-2015 alcanza los 267 millones, de los que 105 millones de euros corresponden a la inversión en fichajes de futbolistas como Isco, Cazorla o Monreal, que en su momento ayudaron a colocar al equipo en Champions League pero que dejaron al borde de la quiebra a la entidad.

El informe, que el Málaga CF no ha querido valorar con Palco23, permite a los máximos accionistas confiar en que el actual pasivo de 13,6 millones es manejable para un club que, gracias al nuevo contrato televisivo, podrá elevar su cifra de negocio ordinaria (sin incluir plusvalías por traspasos) hasta los 48 millones de euros.

"El Málaga ha estado nadando con olas de siete metros tragando agua y sin salvavidas; ahora le llega el agua al pecho", ha indicado Javier Gómez, director general corporativo de La Liga y que acudió al citado encuentro para corroborar que el club andaluz se encuentra hoy en una mejor situación que hace unos años.

Para ello ha sido necesario que Al-Thani, titular del 96,89% de las acciones, haya asumido la compensación de sus aportaciones ante la necesidad de reequilibrar los fondos propios del club, situados en 23,24 millones de euros negativos al cierre de la campaña 2013-2014 por las pérdidas de 32,47 millones acumuladas en los ejercicios precedentes, según consta en la memoria de dicho ejercicio y a la que ha tenido acceso este diario.

Esta situación debería llevar al club a la disolución, pero los auditores de Gap señalan en su informe que el hecho de estar en situación concursal (aún está pagando deudas incluidas en el convenio de acreedores de 2009) hace que no proceda la solicitud de extinción.

Los datos presentados ayer por el club, según la información recopilada por la prensa local, no deja de evidenciar que el club tiene un nivel de endeudamiento ligeramente inferior al que tenía antes de que el club fuera vendido por Fernando Sanz al jeque catarí. Es decir, que la reducción del pasivo, en prácticamente su totalidad, corresponde a la capitalización de las aportaciones que ha estado haciendo Al-Thani en los últimos años tras comprobar la insostenibilidad de un plan de inversiones que no fue acompañado de un ritmo de crecimiento similar de los ingresos.

Muestra de ello es que en la temporada 2012-2013, en la que por primera vez se clasificaron para la Champions League, los ingresos por abonados sólo subieron en unos tres millones, mientras que los ingresos comerciales incluso se quedaron estancados en torno a los 2,7 millones. Tan sólo obtuvieron una inyección adicional por los 36 millones que percibió de la Uefa, que puede calificarse de extraordinaria porque no han vuelto a clasificarse para competiciones continentales.

Presupuesto para el ejercicio finalizado en junio de 2015

Se desconoce cómo ha cerrado la temporada 2014-2015 el club, que había presupuestado un beneficio neto de 120.000 euros. La cifra de negocio recurrente (taquilla, publicidad, televisión y patrocinios) debía alcanzar los 36,39 millones, importe al que hay que añadir los 5,79  millones previstos por el saldo neto en el traspaso de jugadores. Por el lado del gasto, la plantilla deportiva debía absorber 25,4 millones, a lo que hay que añadir 3,3 millones del personal no deportivo, 8,4 millones de gastos de explotación y 4 millones de amortizaciones, entre otros.