Málaga CF: el sueldo de la plantilla y el ERE llevan al club a perder tres millones en 22-23

Málaga CF se abona al rojo. El conjunto andaluz, que perdió la categoría la pasada temporada y está fuera del fútbol profesional tras 25 años, cerró 2022-2023 con pérdidas de tres millones de euros, casi seis veces más que en 2021-2022, según las cuentas anuales publicadas por Málaga CF.

Pese a que el conjunto de La Rosaleda facturó un 11,9% más que el año anterior, hasta 17,9 millones de euros, el club no pudo hacer frente al incremento del gasto de la plantilla y a las indemnizaciones derivadas del Expediente de Regulación de Empleo (ERE).

Málaga CF destinó 9,8 millones de euros a gastos derivados de la plantilla deportiva, frente a los 7,7 millones de euros de 2021-2022. El club explica en sus estados financieros que el incremento se debe a “al refuerzo en la plantilla deportiva al utilizarse parte de los fondos recibidos del préstamo participativo formalizado con LaLiga”.

Durante el mercado estival, el conjunto malagueño dio la bienvenida a dieciséis jugadores, entre los que se encontraban Fran Villalba, Alfred N'Diaye, Esteban Burgos o Lago Júnior, entre otros.

A estos se suman los 4,3 millones de euros imputados al epígrafe Gastos de personal no deportivo, un 43,3% más que en la temporada anterior. En este se incluyen las indemnizaciones por el ERE llevado a cabo por el club debido a la pérdida de categoría, que ascendieron a 695.000 euros.

Málaga CF ha pagado casi 700.000 euros en indemnizaciones por el ERE llevado a cabo

“Con fecha anterior a cierre del ejercicio, y como consecuencia del descenso del primer equipo masculino a la Primera División de la Real Federación Española de Fútbol (1ª Rfef), el club ha puesto en marcha un paquete de medidas que aseguren la continuidad de este en este nuevo escenario deportivo”, explica Málaga CF.

El club añade que “comunicó a los trabajadores la intención de iniciar un proceso de despido colectivo motivado por el descenso de categoría y la necesidad de librar coste de personal, que finalmente ha quedado ejecutado con efectos el día 17 de julio de 2023”.

En paralelo, Málaga CF ingresó 17,9 millones de euros en 2022-2023, de los cuales 7,2 millones de euros correspondieron a ingresos por comercialización; 6,6 millones de euros a ingresos por retransmisión; 2,6 millones por la venta de abonos y ticketing, y 1,4 por su participación en competiciones.

Como aspecto relevante, el club casi duplicó sus ingresos por patrocinio, al pasar de 2,9 millones de euros en 2021-2022 a los 5,4 millones de euros de la temporada posterior gracias a gracias a los acuerdos de patrocinio formalizados con el Ayuntamiento de la ciudad, la Diputación y Benahavís.

El club ha recortado un 59% su presupuesto para la temporada 2023-2024

El club, además, registró subvenciones por 114.294 euros otorgadas por la Real Federación Española de Fútbol (Rfef) para el desarrollo de la cantera y por la Sociedad Española del Fútbol Profesional (Sefpsau) para el mantenimiento de los tornos.

El informe de auditoría enfatiza en la situación de administración judicial en la que se encuentra inmersa el club, así como el estado actual de los litigios por la titularidad de las acciones. Respecto al segundo punto, el pasado 16 de enero, el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) reconoció a Satli Iglesias, propietario de la cadena hotelera BlueBay Hotels, como poseedor del 49% de Málaga CF.

El club fue intervenido judicialmente el 20 de febrero de 2020 tras admitir la jueza la demanda interpuesta por la Asociación de Pequeños Accionistas del Málaga contra Al Thani y tres de sus hijos, Nasser, Nayet y Rakan, miembros del consejo de administración del club, por blanqueo de capitales, apropiación indebida, imposición de acuerdos abusivos y administración desleal. Desde entonces, José María Muñoz ejerce como administrador judicial.

Primera Rfef, recorte al presupuesto

Málaga CF perdió la categoría al finalizar en vigésima posición en LaLiga Hypermotion 2022-2023, lo que le llevó a salir del fútbol profesional tras 25 años. Ello pegó un zarpazo en su presupuesto para el curso actual, cayendo un 59%, pasando de los diecisiete millones de euros de la pasada campaña a los actuales siete millones de euros.

La caída del presupuesto se adapta a la categoría en la que competirá el club. Una de las partidas que mayor impacto ha tenido en la disminución del capital disponible para la próxima campaña es la correspondiente a los derechos audiovisuales, que pasarán de reportar siete millones de euros a 200.000 euros.