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El Atleti logra 40 millones más de fondos de inversión tras alcanzar un beneficio récord
9 dic 2019 - 05:00
“La deuda neta del club debería seguir disminuyendo, siempre que el equilibrio en inversiones y desinversiones se mantenga”. Ese es el compromiso que el Atlético de Madrid asume en sus cuentas anuales de 2018-2019, un ejercicio clave en el ámbito económico para el club, que obtuvo su beneficio neto más alto de la historia (13,96 millones de euros) y logró el respaldo de los fondos de inversión, que le ampliaron su capacidad de endeudamiento en un momento crucial de su historia, según las cuentas anuales a las que ha accedido Palco23. Ello, a las puertas de un año en el que presumiblemente aumentará aún más sus ganancias, en concreto el doble, con 29,13 millones.
El Atleti elevó de 99,73 millones a 131,22 millones de euros el volumen de los pasivos financieros, una refinanciación que fuentes de la industria señalan que se ha sellado con Rights & Media Funding, una de las principales firmas especializadas en prestar dinero a los clubes de fútbol con los derechos de televisión y patrocinio como garantía. De este importe, unos 26 millones se cancelarán este año y el total deberá cancelarse antes de 2023 de no mediar una nueva refinanciación.
El otro gran prestamista del club rojiblanco es Inbursa, con la que a finales de 2018 acordó refinanciar 200 millones de euros con el Wanda Metropolitano de garantía, como ya adelantó Palco23. De ese crédito con el banco mexicano de Carlos Slim, a 30 de junio de 2019 restaban por pagar 182 millones de millones de euros, con amortizaciones anuales de aproximadamente 25 millones.
El Atleti aumentó su deuda financiera neta, de 506,1 millones a 522 millones tras lograr su mayor beneficio neto en la historia
La dirección sostiene que estas dos operaciones han permitido rebajar el tipo de interés medio en cinco décimas, pasando del 4,24% al 3,76%. Aun así, en la memoria anual se admite la necesidad de proceder paulatinamente a rebajar un endeudamiento financiero neto que en 2018-2019 se aumentó, de 506,1 millones a 522,24 millones de euros. Eso sí, el desapalancamiento siempre estará condicionado a que “el equilibrio en inversiones y desinversiones se mantenga”.
Pese a la construcción de un nuevo estadio y los costes adicionales que ha supuesto, el club dirigido por Miguel Ángel Gil Marín no ha dejado de invertir en plantilla. El valor de los derechos sobre jugadores ha pasado de 59,4 millones en 2014-2015 a 214 millones en 2018-2019. Eso también se ha traducido en un mayor endeudamiento con clubes, que en el último año se disparó un 84,8%, hasta 111,4 millones de euros.
“La clasificación para competir en Champions League es un objetivo estratégico”, defienden en los despachos del Metropolitano, sobre el riesgo de deuda asumido en estos últimos años. A ello se le ha añadido la necesidad de recurrir constantemente al mercado, ante las dificultades que aún tiene para retener a algunas de sus principales estrellas. Unas salidas como las de Lucas Hernández, Antoine Griezmann o Rodri que, si bien no deseadas, explican el récord de ingresos de los últimos dos ejercicios.
El club rojiblanco obtuvo unos ingresos ordinarios de 357,65 millones de euros en 2018-2019, un 22,4% más interanual, mientras que para 2019-2020 espera una mejora menor, del 1,9%, hasta 364,51 millones. Los otros ingresos de explotación bajarán a 12 millones, ya que se eliminan algunos efectos contables de las obras de urbanización de los alrededores del estadio, mientras que las plusvalías por traspasos sí que alcanzarán un nuevo nivel récord por las salidas antes mencionadas: de los 20,56 millones de 2017-2018 se pasará a 138,79 millones en 2019-2020, un 47,3% más interanual.
La facturación total de este año, incluidos traspasos, alcanzará los 515,59 millones de euros, un 14,7% más que en 2018-2019, cuando generó 483,1 millones. Es decir, que en cinco años habrá doblado sus ingresos generales, un hito al que han ayudado las operaciones ordinarias, las ventas puntuales de jugadores y subvenciones como las de Wanda Group, que en dos ejercicios salvó al club de los números rojos vía subvenciones.
El nuevo ciclo de la Champions League y su triunfo en la Supercopa de Europa explican el alza del 56% en ingresos por competiciones en 2018-2019, hasta 106,99 millones de euros. De este importe, el torneo internacional de clubes representó 88,82 millones, mientras que la final ganada al Real Madrid supuso otros 4,5 millones. La recaudación por taquilla en LaLiga Santander rozó los 10 millones, mientras que los amistosos generaron un millón menos, hasta 3,36 millones.
El traslado al Wanda Metropolitano y el crecimiento de la masa social, que ya asciende a 129.000 personas, explican que la recaudación por socios y abonados subiera otro 9,2%, hasta 45,11 millones de euros. Esta expansión también ayuda en el reparto de los derechos audiovisuales de LaLiga, por los que percibió un 8,4% más en 2018-2019, hasta 119,39 millones.
Ahora bien, si hay un departamento que crece a velocidad de crucero es el comercial, que en el último ejercicio generó 86,17 millones de euros, un 19,5% más interanual y cuatro veces el importe registrado cuatro años atrás. El Atleti ha ido sumando marcas, como Hyundai en la manga de la camiseta, así como socios estratégicos como Telefónica; este año ha debutado Ria Money Transfer bajo los dorsales. Estas alianzas, además, sirvieron para compensar la caída de ventas por merchandising, que fueron inferiores en un millón de euros y se situaron en 8,3 millones.
El club prevé mantener estable el gasto en nóminas en torno a 244 millones de euros, después de aumentarlo un 14% en 2018-2019
El crecimiento de los ingresos se ha trasladado automáticamente a los gastos, aunque con menor intensidad para apuntalar una rentabilidad necesaria de cara a generar caja con la que reducir su deuda. Aun así, el club rojiblanco aumentó su masa salarial a un ritmo prácticamente idéntico y destinó a la plantilla 311,6 millones de euros en 2018-2019, equivalente al 87% de la cifra de negocio.
La dirección destinó un 16,5% más al pago de nóminas deportivas, doblando el importe que destinaba hace cinco años en un periodo en el que también se ha profesionalizado el fútbol femenino. Además, se redoblaron esfuerzos en mejorar el primer equipo y dar aún más, como revelan los 92,29 millones en amortizaciones, un 58,4% más; de este importe, 81,9 millones fueron por fichajes y 10,3 millones por el estadio. Los gastos de explotación bajaron un 10,4%, ya que un año antes se contabilizó la urbanización del recinto.
De cara a 2019-2020, la entidad rojiblanca ha previsto mantener su nivel de gasto en nóminas, pues las salidas de verano también han supuesto amortizar algunos de los salarios más elevados. Sin embargo, las amortizaciones por fichajes se dispararán otro 35,7% y por primera vez superarán los 100 millones de euros. Por el contrario, los gastos de explotación continuarán bajando, clave para garantizar la rentabilidad y no depender, como antaño, de operaciones alejadas de la recurrencia. Sólo el tiempo dirá si es la fórmula válida para alcanzar sus objetivos deportivos.