Clubes
El Delteco GBC vuelve a beneficios y prevé ingresar 2,6 millones
19 dic 2018 - 09:36
El Delteco GBC sabe que deberá luchar por la permanencia en ACB con uno de los presupuestos más bajos de la categoría. El club aprobó ayer un presupuesto de 2,6 millones de euros para 2018-2019, una mejora de 300.000 euros respecto al año anterior que no evita que sea el equipo con menos dinero para competir. Eso sí, la dirección ha conseguido regresar a beneficios, con un resultado neto de 306.613 euros durante el último ejercicio.
La principal fuente de ingresos continuará siendo la Diputación Foral de Gipuzkoa, con una subvención de 700.000 euros que complementa los 1,1 millones de euros que generará el área de patrocinios, con el grupo industrial Delteco como socio principal. A ello se le suma otra aportación de 300.000 euros del Ayuntamiento de San Sebastián y 180.000 euros por cuotas de abonados, que este año son 1.840.
“El año fue tan bueno que resultó imposible mantener a algunos jugadores en el club porque no tenemos capacidad económica para hacerlo”, admitió ayer la presidenta, Nekane Arzallus, que cifró en 1,08 millones de euros que se destina al pago de nóminas. Y la situación no tiene visos de cambiar, ya que “mientras no consigamos más ingresos, no podremos consolidarnos en una liga tan importante”, advirtió. Y el pago de la deuda continúa siendo una prioridad.
El Deltecto GCB destinará 1,1 millones de euros al pago de nóminas, casi el 50% del presupuesto
El vicepresidente del club de baloncesto, Nacho Núñez, avanzó que los préstamos participativos por 288.490 euros se han logrado refinanciar, ampliando su vencimiento de cuatro a siete años. “Da más solvencia al club”, destacó. En los últimos meses también se han devuelto 325.847 euros a la Hacienda Foral y se está al corriente de pago con todos los empleados. En total, la deuda ya se sitúa por debajo de los tres millones, con Kutxabank como uno de los principales financiadores.
El regreso a beneficios también ha permitido apuntalar el patrimonio neto del GCB, que destinó parte de las ganancias a compensar pérdidas de años anteriores y que cuenta con el canon que paga a la ACB como un activo más. El pago anual de 404.021 euros ha permitido aumentar el patrimonio en más de 800.000 euros (dos años seguidos en Liga Endesa), que después podría recuperar en caso de descenso.