Clubes
Un empresario local se impone al dueño de la escudería Lotus en la puja por el 49% del CD Lugo
20 abr 2015 - 04:56
Gerard López no ha podido cumplir su deseo de hacerse con el control del club de fútbol de la localidad de la que es originaria su familia. Este ejecutivo luxemburgués, dueño de la escudería de Fórmula 1 Lotus, ha visto como un empresario local le ha ganado en la subasta por el 49% del CD Lugo, que hasta ahora estaba en manos de la Diputación y el Ayuntamiento de Lugo.
Se trata de Tino Saqués, con intereses en el sector del frío industrial, que se ha comprometido a abonar 1,6 millones de euros por ese paquete accionarial que se le ha adjudicado de forma provisional. El empresario se ha impuesto a López pese a que su propuesta deportiva era peor, y es que lo que ha primado sobre todo la Administración era la oferta económica y que se pagara al contado.
Tino Saqués, que ya tenía una participación minoritaria en el conjunto lucense, tiene un mes para escriturar las acciones y pagar por ellas. En cualquier caso, la operación debe recibir el visto bueno del Consejo Superior de Deportes (CSD), cuyo silencio administrativo en un plazo de tres meses también supondría luz verde al cambio en la propiedad del club.
Está por ver cómo afectará la llegada de Saqués a la actividad deportiva, con el CD Lugo en media tabla y la permanencia en Segunda División prácticamente asegurada. El empresario advirtió de su intención de realizar varios cambios en el consejo de administración que podrían afectar a la parcela ejecutiva, y el entrenador, Quique Setién, dio a entender que dejaría el cargo si los relevos eran excesivos.
El club gallego cerró la última temporada con unos ingresos de 4,19 millones de euros y un beneficio neto de 255.504 euros. Para este año, la previsión pasa por una rebaja de los ingresos a 3,9 millones y un superávit de apenas 78.000 euros, tras las inversiones realizadas para disponer de una plantilla más competitiva.
La entrada del Ayuntamiento y la Diputación de Lugo en la entidad se produjo en 2013, durante el proceso de conversión de la misma en sociedad anónima deportiva (SAD) para poder permanecer en las competiciones organizadas por la Liga de Fútbol Profesional (LFP). Es lo mismo que sucedió con la SD Eibar el año pasado y pasa ahora con la UE Llagostera. Ambas instituciones aportaron un total de 1,5 millones de euros, con el compromiso de que se acabaría encontrando un inversor privado que les sustituyera en el tiempo.