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Especial 2022: El año en el que el deporte femenino se sentó a la mesa

2022, el año en el que Pekín marcó la agenda olímpica, pero por televisión

Para diferenciarse de su predecesor y ampliar la imagen de los deportes de invierno en el mundo, Pekín llevó a cabo una inversión de prácticamente 615.000 millones de yuanes para preparar la ciudad ante el gran evento.  

2022, el año en el que Pekín marcó la agenda olímpica, pero por televisión
2022, el año en el que Pekín marcó la agenda olímpica, pero por televisión
En agosto el COI se abrió a incluir nuevos deportes para Los Ángeles 2028.

Miquel López-Egea

27 dic 2022 - 05:00

Acaba otro año olímpico. Este último año ha estado marcado por los Juegos Olímpicos de Invierno de Pekín 2022, que se celebraron del 4 de febrero al 20 de febrero de 2022 bajo un estricto protocolo antipandemia, aunque menos restrictivo que su predecesor, el de los Juegos de Tokio 2020.

 

El evento, más allá de demostrar el poderío en las disciplinas olímpicas de invierno de Noruega, Alemania y China, sirvió para que este último marcara un punto de inflexión en sus relaciones internacionales.

 

El país llegó a la cita con varias tensiones políticas por su historial de derechos humanos, tras las acusaciones de abuso de musulmanes uigures en la región de Xinjiang y por la supresión de las protestas a favor de la democracia en Hong Kong, que provocó que muchas voces clamaran a favor del boicot del evento. Pero el país hizo caso omiso en un entorno marcado por la política de Covid Cero y se propuso mostrar su mejor imagen al mundo, intentado organizar un evento verde y seguro, en un entorno de plena normalidad, que además sirvió para exhibir las bondades de su sistema político.

 

 

Para diferenciarse de su predecesor y ampliar la imagen de los deportes de invierno en el mundo, Pekín llevó a cabo una inversión de prácticamente 615.000 millones de yuanes (80.000 millones de euros) para preparar la ciudad ante el gran evento deportivo tras Pekín 2008.

 

En este sentido, el Gobierno chino construyó casi medio centenar de infraestructuras relacionadas con los deportes de invierno, entre las que se encuentran pistas de hielo para practicar curling, hockey sobre hielo o luge.

 

Aun así, desde la organización se decidió apostar por algunas de las infraestructuras que en su día se utilizaron para los Juegos Olímpicos de Pekín 2008, el último gran evento deportivo de la ciudad. Hasta seis sedes se renovaron y adaptaron para albergar competiciones del evento invernal.

 

 

 

 

Sin embargo, la mejor China se mostró al mundo, pero por televisión. A pesar de los avances con la vacunación del Covid-19 y el descenso de casos positivos, el comité organizador de los Juegos Olímpicos y el Gobierno liderado por Xi Jinping decidió que, para el correcto funcionamiento de la competición, los participantes deberían estar aislados y llevar a cabo el evento en formato burbuja, tal y como sucedió en los Juegos Olímpicos de Tokio. No obstante, en este caso, el evento contó con público de China continental.

 

Además, con el objetivo de evitar brotes de Covid-19 durante el transcurso del evento, los participantes, que debían tener la pauta de vacunación completa, se sometieron a tests diarios y se les prohibió mantener relaciones físicas, minimizando en todo los posible la interacción con el público.

 

De hecho, la premisa fue que sólo se podía abandonar la burbuja para entrenarse y competir. Además, para evitar cualquier tipo de interacción con el público o cualquier otra persona de fuera de la burbuja, Pekín puso a disposición de los prácticamente 3.000 atletas una red de transporte de uso exclusivo.

 

 

 

 

Finalmente, los Juegos Olímpicos de Invierno de Pekín 2022 alcanzaron una audiencia mundial de más de 2.000 millones de personas, según dio a conocer el Comité Olímpico Internacional (COI).

 

De acuerdo con sus datos, el evento registró una audiencia global de 2.010 millones de espectadores, es decir un 5% más que los Juegos Olímpicos de Pieonchang 2018 a través de televisión analógica y de plataformas digitales.

 

Los espectadores observaron un total de 713.000 millones de minutos de cobertura de los Juegos a través de las emisoras titulares de derechos de los Juegos Olímpicos, mientras que las redes sociales olímpicas registraron 3.200 millones de interacciones y atrajeron más de once millones de nuevos seguidores a través de diversas plataformas.

 

 

 

 

De hecho, hubo un récord de usuarios usando la web olímpica o la aplicación de la edición invernal con más de 64 millones de personas alcanzadas. La aplicación olímpica fue la número 1 de deportes en descargas en más de 20 países. También se registró un 58% de aumento en los usuarios únicos del canal de YouTube de los Juegos Olímpicos.

 

Según el COI, casi la mitad de los espectadores encuestados aseguraron que quieren ver más cobertura de Juegos Olímpicos en el futuro, y 57% de los adolescentes de entre 13 años y 19 años destacó que quiere ver una mayor cobertura de Juegos Olímpicos en los próximos años.

 

El evento se clausuró tras repartir con la participación más balanceada, con un 45% de mujeres y un total de 46 eventos femeninos, el más alto hasta la fecha, tras haber aumentado en dos el número de eventos femeninos. Además, el 53% de los eventos contaron con presencia femenina y se igualó la visibilidad, según los datos ofrecidos por el organismo. En este sentido, hasta siete disciplinas femeninas tomaron parte en el evento: skeleton, luge, patinaje de velocidad, esquí de fondo, esquí alpino, esquí acrobático y snowboard.

 

Por otro lado, Pekín también se convirtió en la primera ciudad en albergar unos Juegos Olímpicos de Verano y de Invierno, con un total de tres zonas de competición (Pekín, Yanqing y Zhangjiakou) y doce recintos.

 

En total, hubo 24 emisoras oficiales con derechos audiovisuales, incluido Olympic Channel, más de 300 sublicencias de transmisión, más de 600 horas producidas por los Servicios de Transmisiones Olímpicas (OBS, por sus siglas en inglés), 10.000 miembros del personal de transmisiones, más de 660 cámaras del OBS y 1.952 miembros de prensa acreditados, 461 de China y 1.491 internacionales.

 

Ingresos récord del COI

Por otro lado, 2022 también fue un año de éxito para el COI, tras haber logrado cerrar el último ciclo olímpico de récord. El COI ingresó 7.600 millones de dólares en el último ciclo olímpico, importe que supone un 33,3% más que el anterior cuatrimestre.

Por otro lado, el organismo registró un beneficio de 843,8 millones de dólares en el último ejercicio, cerrado en 2021, frente a las pérdidas de 55 millones de dólares del año del Covid-19.

 

La venta de derechos audiovisuales representó unos ingresos de 3.100 millones de dólares en 2021. De ellos, 1.600 millones de dólares provinieron de América, mientras que 842,5 millones de dólares lo hicieron de Asia, 606 millones de dólares de Europa, 77,6 millones de Oceanía y otros 17,4 millones de África.

 

Los gastos del COI también aumentaron en el último ejercicio. Se distribuyeron un total de 2.100 millones de dólares entre el movimiento olímpico en general: 906,3 millones se destinaron al coste de los Juegos, mientras que se gastaron 194,6 millones de dólares en promoción. Además, se distribuyeron otros 540 millones de dólares entre las federaciones internacionales y 367,9 millones a los comités olímpicos nacionales.

 

Por otro lado, en agosto el COI se abrió a incluir nuevos deportes para Los Ángeles 2028. El órgano rector de las olimpiadas mandó propuestas a nueve federaciones, entre las que se encuentra la Federación Internacional de Automovilismo (FIA) para estudiar la posibilidad de que sus deportes se incluyan en el programa olímpico de Los Ángeles 2028.

 

Además del automovilismo, el organismo estudia la posible vuelta del kárate, tras estar presente en Tokio 2020 y quedar fuera de París 2024. También podrían entrar el break dance, el béisbol o sóftbol, el cricket, el lacrosse, el squash, el kickboxing y el flag football, una modalidad de fútbol americano que se juega sin placajes.

 

Actualmente, el programa del COI permite la participación de un máximo de 10.500 deportistas, divididos entre las 28 disciplinas que abarca el evento.

 

 

 

 

El presupuesto del comité organizador de los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de París 2024 acordó en noviembre aumentarlo un 10%, es decir, hasta 4.400 millones de euros. Además, a finales de noviembre, puso a la venta diez millones de entradas. La primera fase del proceso de venta de entradas será por sorteo. Los aficionados que quieran comprar las entradas para asistir a los Juegos Olímpicos o Paralímpicos debieron hacerlo mediante sorteo desde el 1 de diciembre de 2022 y hasta el 31 de enero de 2023.

España mira a París 2024

 

Por su parte, en España, el Comité Olímpico Español registró unos números rojos de 2,3 millones de euros en 2021 y aprobó un presupuesto de 9,5 millones de euros para 2022,

 

Los gastos ordinarios fueron de 1,2 millones de euros, a lo que se le suman los gastos derivados de los premios por medallas en los últimos Juegos Olímpicos de Tokio, que supusieron un desembolso de 1,1 millones de euros para la entidad.

 

Además, en febrero, José Manuel Franco, presidente del Consejo Superior de Deportes anunció la creación del programa Team España Élite para financiar la preparación de los atletas españoles de cara a los Juegos Olímpicos de París 2024. El programa está dotado de una inversión de 48 millones de euros destinada a aquellos deportistas que tengan mayor probabilidad de optar a medalla.

 

 

Cataluña y Aragón hacen el ridículo y la candidatura de 2030 se desploma

En junio, el Comité Olímpico Español (COE) puso fin a un sueño olímpico español y a la posibilidad de presentar una candidatura a los Juegos de Invierno de 2030 después de las múltiples desavenencias  políticas entre Cataluña y Aragón.  Ahora, el organismo prevé presentar una nueva candidatura para los Juegos de 2034, que podría organizar Cataluña en solitario.

 

La candidatura no pudo progresar debido a las reiteradas negativas del presidente de Aragón, Javier Lambán, a aceptar el reparto de pruebas que había propuesto una comisión técnica designada por las comunidades y el COE.

 

Las conversaciones acabaron en marzo de 2022 y se emplazó a los responsables políticos a seguir negociando. Desde entonces, Aragón mostró su desacuerdo con lo acordado.

 

Finalmente, Cataluña optó por romper con Aragón y anunció que iba a presentar una candidatura en solitario a los Juegos Olímpicos, después del naufragio en las negociaciones con la comunidad aragonesa.

 

 

 

 

Sin embargo, el COE no contempló en ningún momento esa posibilidad y anunció que el proyecto de candidatura queda desestimado, pese a que había un acuerdo que contaba con el apoyo del Gobierno de España.

 

El comité había anunciado en mayo que si Cataluña y Aragón no llegaban a un acuerdo de candidatura conjunta serían ellos quienes escogerían el proyecto de una de las dos partes. Sin embargo, el COE optó finalmente por rendirse ante los empeños políticos de las partes y busca  alternativas para los Juegos de invierno de 2034.

 

Un mes antes, el presidente de Aragón había acusado al COE de apoyar únicamente la propuesta catalana y pidió la dimisión de Alejandro Blanco, presidente del COE, mientras que el comité remarcó que Lambán estaba torpedeando la candidatura por cuestiones políticas. “Es imposible entender lo que está pasando desde la racionalidad”, aseguró Blanco en una comparecencia que lapidó el sueño olímpico.

 

En julio, el Gobierno catalán aseguró que estaba preparado para que los Juegos se celebren “cuando sea”, aunque no determinó el año para “no generar expectativas que causen frustración”.

 

Los Juegos Olímpicos de Invierno de 2030 iban a tener un presupuesto de 1.800 millones de euros, de los que el Comité Olímpico Internacional (COI) iba a aportar más de 1.000 millones de euros, mientras que el resto provendría de entradas y espónsores.