Entorno
2023, Arabia Saudí y el ‘sportwashing’ como estrategia
El país de Oriente Próximo ha albergado el Mundial de Clubes 2023, la Fifa lo ha designado sede del Mundial de fútbol masculino 2034 y presentará candidatura para el femenino de 2035.
27 dic 2023 - 05:00
El año 2023 ha sido el del salto adelante en la estrategia de Arabia Saudí por convertirse en una potencia deportiva, con una estrategia clara en sportwashing. Esta apuesta pasa por acontecimientos deportivos de primer nivel y presencia en disciplinas deportivas relevantes, como fútbol, pádel y golf. Entre el 12 y el 22 de diciembre de 2023 se celebró el Mundial de Clubes, tomando el relevo de Marruecos, donde se jugó el torneo en 2022 y en el que Real Madrid CF se alzó con el título.
Esta ha sido la primera vez en que el país bajo el poder de Mohamed bin Salmán ha albergado este torneo, aunque ya se ha celebrado anteriormente en tierras de Oriente Próximo: Emiratos Árabes Unidos (UAE, por sus siglas en inglés) albergó la cita intercontinental de clubes en 2009, 2010, 2017, 2018 y 2022, mientras que en 2019 y 2021 se jugó en Qatar.
Especial 2023: el año en que
las mujeres alzaron la voz
Pero el año que Arabia Saudí tiene marcado en el calendario es 2034: el pasado 2 de noviembre, el presidente de la Fifa, Gianni Infantino, confirmó que el Mundial 2034 se celebrará en Arabia Saudí, después de que en octubre Australia retirase su candidatura
para albergar el torneo. Los datos de asistencia registrados en el pasado Mundial incentivan aún más a los saudíes para albergar el torneo: la asistencia acumulada en la Copa Mundial de la Fifa 2022 alcanzó 3,4 millones de espectadores, lo que supuso que, de media, en cada encuentro hubo 53.000 aficionados en las gradas.
La apuesta saudí por el Mundial no se queda ahí, ya que, pese a que falta oficializar el trámite, el país de Oriente Próximo está estudiando presentar formalmente ante la Fifa su candidatura para albergar el Mundial femenino de fútbol de 2035. Hasta ahora, es el
único país que ha expresado públicamente su interés por hacerse con el torneo de selecciones, cuyo vigente campeón es la Selección española.
El Mundial 2034 se celebrará en Arabia Saudí
La llegada de Cristiano Ronaldo a Arabia Saudí, y los más de 190 jugadores de primer nivel que siguieron al astro luso poniendo rumbo a tierras saudíes en el último mercado estival de fichajes, ha aumentado el atractivo de la Saudi Pro League. De
hecho, la competición irrumpió con fuerza en el mercado, invirtiendo 873,5 millones de euros en casi 200 fichajes, entre los que se encuentran Neymar, Sadio Mané, Karim Benzema, Riyad Mahrez y Roberto Firmino.
Tal es la apuesta del torneo por el fútbol que la inversión del último mercado de fichajes fue veinte veces menos en 2022, cuando se realizó un desembolso de poco más de cuarenta millones de euros, el equivalente al importe desembolsado por Ittihad por Fabinho.
Ya en junio, el Fondo de Inversión Pública (PIF, por sus siglas en inglés) saudí se hizo con el 75% de los cuatro principales clubes del país de Oriente Próximo: Al Ittihad, Al Hilal, Al Ahli y Al Nassr, equipo en el que juega actualmente Cristiano Ronaldo. Además
de los equipos locales, en el pool de equipos de fútbol del fondo soberano se encuentra Newcastle United FC.
Aunque el fútbol no es la única apuesta del PIF. En enero, el fondo, dotado con 620.000 millones de dólares, se puso en contacto con la compañía propietaria de la Fórmula 1, Liberty Media, para tantear la posibilidad de un cambio de manos de la competición automovilística, que, hasta el momento, ha sido una de las pocas operaciones en las que el fondo soberano no ha salido victorioso.
El tenis también está en la mira del PIF: en junio se dio a conocer que estaba estudiando invertir en este deporte y el presidente de uno de los principales circuitos, ATP Tour, se dejó querer. Andrea Gaudenzi admitió que había mantenido “conversaciones positivas” con el PIF al respecto, con la vista puesta en que las inversiones sirvan para mejorar los medios de comunicación, datos y tecnología del conjunto de torneos de tenis, aunque, a día de hoy no ha trascendido el estado de las negociaciones entre las partes.
Aún dentro de las pistas, el fondo catarí Qatar Sports Investments (QSI) ha alcanzado en 2023 un principio de acuerdo con Grupo Damm para hacerse con más del 50% del World Padel Tour e incluirlo en el circuito Premier Padel. Tras el acuerdo, los dos circuitos se fusionarán, creando un único a partir de 2024.
En junio, el Fondo de Inversión Pública saudí se hizo con el 75% de los cuatro principales clubes del país de Oriente Próximo
España ha perdido de esta forma posiciones en el tablero global de las competiciones deportivas. El pádel, en el que el país era líder mundial desde el desarrollo de la competición en 2013, ha pasado a manos qatarís.
En la cartera deportiva del PIF destaca Liv Golf. La competición, también conocida como Super Golf League, es un circuito de golf profesional. Fue fundado en 2022 y, tras importantes desavenencias con sus homólogos PGA Tour (Estados Unidos) y DP World
Tour (Europa), los tres circuitos acordaron en junio fusionarse para crear una nueva competición.
“Esta asociación transformadora reconoce la fuerza inconmensurable de la historia, el legado y el modelo competitivo del PGA Tour y combina con él, DP World Tour y el Liv Golf, incluyendo el concepto de golf por equipos, para crear una organización que
beneficiará a los jugadores de golf, a los socios comerciales y a los aficionados”, manifestó el circuito estadounidense en un comunicado.
La última inversión millonaria del PIF fue el pasado 30 de agosto, cuando destinó cien millones de dólares a hacerse con una participación minoritaria en la Professional Fighters League (PFL). La inversión del fondo soberano se dedicará a la creación de
una nueva liga de artes marciales mixtas en Oriente Próximo y África y al desarrollo de la división de pay-per-view (PPV) de la liga de Mixed Martial Arts (MMA).