Entorno

Barcelona abre el Anillo Olímpico a la ciudadanía tras el fracaso de Open Camp

El Ayuntamiento crea nuevos programas para que los ciudadanos de la capital catalana aprovechen al máximo las instalaciones levantadas en 1992 y no sólo estén utilizadas por grandes eventos.

G.G.Recio

2 ago 2018 - 12:09

Tras la quiebra de Open Camp, el Ayuntamiento quiere abrir el Anillo Olímpico a los barceloneses con varias iniciativas

 

 

“Pasar página al proyecto de Open Camp”. Ese es el objetivo que el regidor de presidencia, agua y energía, y presidente de B:SM, Eloi Badia, se ha marcado para el nuevo plan de usos del Anillo Olímpico. Tras la quiebra del parque temático, el Ayuntamiento de Barcelona ahora quiere democratizar el deporte entre la ciudadanía.

 

La idea es abrir las instalaciones a los barceloneses, más allá de albergar grandes eventos musicales y deportivos. “Celebramos más de 160 actos, que ocupan 325 días al año, de los cuales el 47% corresponden a citas culturales y el 53% son deportivos, escolares y familiares”, ha añadido Badia.

 

Marta Carranza, comisionada de deportes del consistorio, ha explicado que este planteamiento se transformará en varias iniciativas, como la apertura de la pista de atletismo del Estadio Olímpico cada último domingo de mes para todos los públicos. “También realizaremos los entrenamientos previos a la Cursa de la Mercè, la Cusa dels Nassos, el Maratón y la Media Maratón de Barcelona en estas instalaciones”, ha detallado.

 

Entre sus proyectos más destacables está empezar a ofrecer actividades de fitness al aire libre en el Anillo Olímpica, “con clases de yoga y zumba, por ejemplo”. Es algo que durante los últimos años ha ido cogiendo peso en las cadenas de gimnasios como DiR e incluso Duet Fit, que celebran algunas citas en el Paseo Marítimo de la Barceloneta a partir de primavera.

 

 

 

 

Además, se intensificarán las actividades dentro de los Campus Olímpia, que son los esplais que ofrecen los CEM (Centres Esportius Municipals, en catalán) todos los veranos. En este segmento, el de los niños, habrá cada vez más circuitos deportivos escolares a partir de abril.

 

Badia ha explicado que con este planteamiento se pretende “pasar página al proyecto de Open Camp, que ha sido un lastre y no nos ha dejado otra cosa que deuda”, tras haber operado durante un año y haber entrado en proceso de liquidación. Concretamente, las obligaciones del parque temático del deporte con el Ayuntamiento se cifraron en casi tres millones de euros.

 

De este importe, el consistorio sólo ha podido recuperar 941.257,71 euros al quedarse con los altavoces del sistema de megafonía y las cámaras de Open Camp como compensación por el canon acordado y convertido en deuda. Como ya adelantó Palco23, el resto del proceso sigue su curso para poder recuperar alguna cantidad económica más con la venta de los activos restantes, aunque desde la Administración no mantienen muchas esperanzas.