J. Freire (Ambe): “Es necesario un plan de país para la industria de la bicicleta”

Muchos kilómetros por delante para el sector de la bici en España. El secretario general de la Asociación de Marcas y Bicicletas de España, Jesús Freire, cree que España debe tener “un plan de país para apostar por la industria de la bicicleta”, del mismo modo que ha hecho Francia, que desarrolló “una estrategia estatal por la bicicleta, empezando por incentivos, ayudas a la compra de bicis, apuesta por el cicloturismo y su industria nacional”. El directivo también lamenta que la aplicación del IVA reducido al sector en Portugal y Luxemburgo no haya creado un efecto dominó en España.

Pregunta: ¿Cómo le está afectando al sector de la bici el conflicto en el mar Rojo?

Respuesta: Podemos garantizar que no se va a producir un desabastecimiento de bicicletas en Europa ni en España. Por ahora, el impacto del conflicto en el mar Rojo no afecta directamente, sino de forma indirecta. No tenemos ni siquiera suficientes datos que nos permitan calcular el efecto económico. Creemos que hay opciones de que se resuelva sin afectar al sector de lleno. Estamos monitorizando la situación, pero, actualmente, no está entre nuestras mayores preocupaciones.

P.: ¿Puede afectar a los precios de las bicicletas?

R.: Durante la pandemia provocada por el Covid-19 vimos que subieron los precios de forma significativa, reduciéndose a la mitad los años siguientes, tras el boom. Por aquel entonces, la cadena de suministros fue un elemento crucial, aunque es algo que ahora no está a ese nivel, está bajo control.

P.: ¿Qué ha sido lo mejor y lo peor para el sector de la bici este 2023?

R.: Lo positivo del pasado ejercicio es que se ha mantenido el auge del uso de la bicicleta como medio de transporte, ocio y deporte. Además, se siguen vendiendo bicicletas. Es un sector que avanza y crece y la masa social que demanda bici continúa en aumento. Sin embargo, uno de los principales retos ha sido la corrección de los stocks tras un periodo de bonanza tras la pandemia.

P.: ¿Cómo definirías el año pasado?

R.: Ha sido un año de ajuste a una nueva realidad. La demanda sigue ahí, se venden bicis, pero hemos dejado atrás el boom vivido durante el desconfinamiento. La realidad es mejor que en 2019, pero no tan buena como en 2021.

“El año 2023 ha sido un ejercicio de ajuste a una nueva realidad”

P.: ¿Por dónde pasan las proyecciones de Ambe para el presente ejercicio?

R.: La percepción pasa por la continuidad del ajuste, aunque podría llegar su fin. La tendencia es de crecimiento, siempre que miremos la foto de 2024 hasta 2030. Eso se apoya en el hecho que sigue la demanda sostenida y el aumento de la masa social. El auge de la bicicleta eléctrica, que en 2014 se vendían poco más de 10.000 unidades al año y ha pasado a 235.000 bicicletas en 2022, algo que va a ser determinante en 2024.

P.: ¿Qué planes de acción tiene Ambe de cara al presente curso? 

R.: Apostaremos por la formación; hemos presentado al Ministerio una propuesta de Grado de Mecánica de Bicicletas, así como una especialización de Formación Profesional. Seguimos trabajando en los incentivos fiscales y ayudas a la compra de bicicletas. Con varias Comunidades Automónomas ya hemos tenido éxito con estas iniciativas. También pondremos el foco en las infraestructuras, con la creación de normativas que permitan el crecimiento del sector en España.

P.: ¿Cree que se va a reducir el Impuesto del Valor Añadido de las bicicletas este año?

R.: Hay una decisión europea que permite a España la opción de reducir el Impuesto del Valor Añadido (IVA). Países como Portugal y Luxemburgo ya lo han hecho y esperábamos que ello conllevara un efecto dominó, aunque no ha sucedido. No podemos hablar de fecha en España, pero seguimos trabajando con el Ministerio de Hacienda en este punto.

“España continúa en la cúspida de la producción de bicicletas”

P.: Entre enero y noviembre de 2023, la fabricación de bicicletas en España cayó un 13,4%, hasta 233,8 millones, ¿a qué se debe el desplome?

R.: Encontrar un motivo concreto de la caída de la fabricación de bicicletas es difícil. Hay una coyuntura de descenso, de la demanda de producción de bicicletas, no de la compra. Comparando la producción sólo de enero a noviembre, la de 2023 duplica a 2019. El año 2022 fue el mejor de la serie histórica, por lo que la disminución de un 13,4% comparado con cifras récord, dice que seguimos en la cúspide de la producción de bicicletas.

P.: Camboya, China, Bangladesh o Taiwan ¿Puede España luchar contra el sudeste asiático en lo que se refiere a producción de bicis?

R.: Podemos hablar de España o de Europa de forma conjunta. Ocho de cada diez bicicletas eléctricas que se venden en el Viejo Continente se producen dentro de sus fronteras. En España, el balance comercial de exportación es positivo. Hay un proceso claro de reindustrialización en Europa, atrayendo la producción al consumidor final. Vivimos en un mundo global en el que el abastecimiento de materiales y componentes está distribuido entre diferentes países. España y Europa tienen un papel importante tanto en la producción y ensamblaje como en Investigación y Desarrollo (I+D). España tiene los principales operadores y marcas nacionales que, muchas de ellas, son también globales.

P.: ¿España está aún lejos de países como Francia y Países Bajos? 

R.: Francia es un país que se lo ha creído y ha actuado de manera acorde, con una estrategia estatal por la bicicleta, empezando por incentivos, ayudas a la compra de bicis, apuesta por el cicloturismo y su industria nacional. Es un ejemplo a seguir. Culturalmente son cercanos a España y debemos mirar al país galo como un buen ejemplo. París es una capital verde en la que se priman los desplazamientos en bici, transporte publico y a pie. Algo que se reproduce en varias ciudades de España. Hace falta un plan de país para apostar por la industria de la bicicleta. Nos queda mucho para parecernos a nuestros vecinos franceses.