Entorno
La ONU cifra en el 40% la población vulnerable al cambio climático
El grupo de científicos ha señalado que hasta 3.600 millones de personas son altamente vulnerables al calentamiento global en un nuevo informe catalogado como “atlas del sufrimiento humano” por el secretario de Naciones Unidas.
1 mar 2022 - 05:00
“La advertencia más sombría hasta el momento”. Mientras Europa vuelve a ser el escenario de una guerra, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) ha puesto el foco en la amenaza del cambio climático. El organismo ha señalado que el impacto del calentamiento global es ya simplemente “irreversible” y que la humanidad debe invertir con más fuerza en la adaptación al nuevo escenario que ya está experimentando, más allá de la mitigación, una estrategia que ya llega tarde para evitar la crisis.
El Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (Ipcc, por sus siglas en inglés) ha hecho públicas las conclusiones de su último informe sobre el impacto la adaptación y la vulnerabilidad al cambio climático tras siete años de trabajo. Tras el informe publicado el pasado verano centrado en el carácter científico de la crisis, esta publicación estudia los impactos del cambio climático tanto en las personas como en la naturaleza y se ofrecen opciones para fortalecer la resiliencia de la naturaleza y la sociedad al cambio climático en curso. La publicación forma parte de una serie de tres informes sobre el clima encargados a un grupo de expertos que entregará sus últimas conclusiones en octubre, antes de la celebración de la COP27.
Según el informe, un 40% de la población de la tierra es “altamente vulnerable” al cambio climático. El Ipcc estima que entre 3.300 millones de personas y 3.600 millones de personas habitan regiones altamente vulnerables al calentamiento global. Sólo con la subida de 1,5 grados centígrados se perderán especies y ecosistemas.
“Nuestro informe indica claramente que los lugares donde la gente vive y trabaja pueden dejar de existir, que los ecosistemas y las especies con las que todos hemos crecido y que son fundamentales para nuestras culturas pueden desaparecer”, dijo la profesora Debra Roberts, copresidenta del Ipcc, durante la presentación del informe.
“Los lugares donde la gente vive y trabaja pueden dejar de existir”, explica Roberts
El informe, descrito por el secretario general de Naciones Unidas, Antonio Guterres, como un “atlas del sufrimiento humano”, expresó que si la temperatura de la tierra sube entre un 1,7 grados centígrados y 1,8 grados centígrados la mitad de la población humana podría estar expuesta a periodos de condiciones climáticas que pongan en peligro su vida a causa del calor y la humedad.
“Esta abdicación de liderazgo es criminal, los mayores contaminadores del mundo son culpables de incendiar nuestro único hogar”, añadió Guterres. Aun así, también se abre a que aún puede evitarse lo peor si se invierte en procesos de adaptación. Uno de los riesgos que se acrecentará con el aumento de las temperaturas será el del contagio de enfermedades.
Además, por primera vez, el informe coloca el cambio climático como una de las causas del deterioro de la salud mental debido al trauma y el estrés derivado de la experiencia de vivir fenómenos climáticos extremos y la pérdida de la vivienda o la cultura.
El informe pone la vista en las ciudades, donde se concentrará dos tercios de la población en 2030. “La creciente urbanización y el cambio climático, en conjunto, crean riesgos complejos, especialmente en aquellas ciudades que ya tienen un crecimiento urbano mal planificado, altos niveles de pobreza y desempleo, y una falta de servicios básicos”, explicó Roberts. Desde la ONU recomiendan la construcción de edificios verdes, el suministro fiable de agua limpia y energía renovable, así como los sistemas de transporte sostenibles que conectan las zonas urbanas y las rurales.
La creciente urbanización y el cambio climático, en conjunto, crean riesgos complejos
En Europa, la temperatura ya ha aumentado 1,1 grados centígrados respecto al periodo preindustrial, lo que está afectando el ecosistema. Uno de los principales riesgos que afronta la población en el continente es el aumento de la mortalidad debido al aumento de las temperaturas. El calor también llevará a unas pérdidas importantes de la producción agrícola en la mayor parte del continente, la práctica también se hará más complicada por la falta de agua. Otro de los grandes riesgos de la zona es el aumento del riesgo de inundaciones que amenaza las ciudades costeras.
Guterres hizo un llamamiento a gobiernos y bancos de desarrollo, señalando que “ellos ya saben lo que hay que hacer, tiene en que crear planes de transición y buscar financiación tanto pública como privada”. Para el sistema financiero, el cambio climático también es una amenaza. El informe apunta que el capital destinado a la causa es insuficiente y que el impacto climático ralentizará el crecimiento económico. En concreto, el cambio climático puede suponer un duro golpe para la industria del turismo, además de la alimentaria. “Ya hemos perdido la batalla y tenemos que estar más atentos sobre como mitigar los riesgos”, sostuvo Roberts.