Las empresas de servicios deportivos denuncian la “injusticia” por no ajustar precios al SMI

La Asociación Española de Empresarios de Servicios Deportivos a las Administraciones Públicas (Aeesdap), en guerra. La patronal ha denunciado lo “injusto” derivado de la situación en la que se encuentran las empresas de servicios deportivos tras “el tan necesario nuevo incremento del salario mínimo interprofesional (SMI)”.

La patronal ha lamentado que el aumento “una vez más no viene acompañado de una modificación de la Ley de Desindexación de la Economía y de la Ley de Contratos del Sector Público que permita repercutir los incrementos en los costes de los contratos públicos derivados del incremento del SMI”.

Según ha denunciado, por cuarto año consecutivo las empresas de servicios deportivos a las administraciones asumirán el incremento anunciado del SMI, mientras que la administración “seguirá adquiriendo estos servicios en contratos públicos firmados con antelación a estos incrementos”, a precios calculados con salarios de 2022, 2021, 2020, hasta un 40% inferiores al actual.

Aeesdap solicita a las administraciones que paralicen todas las licitaciones donde los cálculos de costes laborales no contemplen el nuevo incremento

“Es ridículo que hoy mismo se estén adjudicando licitaciones para 2023, 2024, 2025 e incluso 2026 tomando como base para el cálculo del precio un salario que ha cambiado, además con carácter retroactivo”, ha criticado Yago Monteoliva, gerente de la patronal. “Y más ridículo todavía que la propia administración no pueda calcular con un mínimo de certeza el precio de un contrato que vaya más allá de 2023: todo esto se solucionaría volviendo a indexar el precio del contrato a un indicador válido”, ha añadido.

“Lo más triste es que a lo largo de estos años en los que venimos viviendo esta situación, hemos comprobado que al Ministerio de Trabajo y al Ministerio de Hacienda y Función Pública parece que les importa bien poco esta situación”, ha destacado por su parte Javier Blanco, presidente de Aeesdap. “Si una empresa no puede soportar las consecuencias económicas de esta situación y quiebra, la administración licita de nuevo el servicio, esta vez con nuevos precios, para que venga otra empresa que continúe el servicio”, ha asegurado, recordando que “las únicas afectadas son las empresas, en concreto las más pequeñas, que tienen menos capacidad para aguantar tan importantes desviaciones en el resultado”.

De esta manera, Aeesdap solicita a las administraciones que paralicen todas las licitaciones en marcha donde los cálculos de costes laborales no contemplen el nuevo incremento de SMI, no ejecuten las prórrogas establecidas en los contratos si los cálculos en los que se basaron al hacer los presupuestos han quedado totalmente obsoletos y fuera de mercado y tengan en cuenta futuros incrementos de SMI a la hora de calcular los precios de licitación en futuros procesos licitatorios.