Miguel Francés: “Un 80% de los españoles desconoce la existencia del tiro olímpico”

Miguel Francés es presidente de la Federación Española de Tiro Olímpico (Rfedeto) desde hace cuatro años. Durante su legislatura, el máximo responsable de este deporte en España ha trabajado para liquidar una deuda de dos millones de euros heredado del anterior equipo gestor. Antes de las próximas elecciones de la entidad, previstas para después de verano, el máximo mandatario pretende salir reelegido para sanear completamente la federación y poner el deporte al nivel de otras disciplinas olímpicas como la gimnasia o la natación.

Pregunta: Tras el Covid-19, ¿cómo se encuentra el tiro olímpico?

R.: El estado de salud de nuestro deporte es fantástico. Durante la pandemia, al igual que a la mayoría de los deportes, nos frenaron el calendario establecido porque no se podían hacer desplazamientos por el país para disputar las distintas competiciones. Pese a ello, impulsamos nuestro deporte con la creación de la Copa Rfedeto, una competición que se celebraba de manera simultánea en distintos puntos de España para que nuestros tiradores no se movieran de sus comunidades autónomas. La participación, ligeramente superior a la de otras competiciones antes de la pandemia, superó todas nuestras expectativas, y estamos orgullosos de la acogida que ha tenido.

P.: ¿Se ha visto afectado el apartado económico?

R.: Al contrario, hemos podido salvar el año con la creación de esta nueva competición, las medidas de contingencia y el ahorro que ha supuesto no tener que viajar por todo el mundo para competir. Actualmente arrastramos una deuda del mandato anterior de dos millones de euros, que hemos ido amortizando progresivamente; un tercio de la deuda ya lo hemos saldado. En el caso que salga reelegido en las próximas elecciones, mi objetivo es dejar la federación con deuda cero dentro de tres años.

P.: ¿Cómo ha afectado la pandemia al número de federados?

R.: No ha habido una gran variación del número de federados en el tiro olímpico. Actualmente contamos con más de 44.000 atletas federados, con 2.000 personas que se dedican al tiro al plato y el resto al tiro de precisión. El tiro olímpico no es un deporte como el fútbol o el baloncesto en el que la gente entre y salga como si nada, si no que se practica por afición. Hay bastante gente que se da de baja, normalmente por motivos de jubilación, pero también tenemos un número similar de altas, a raíz de la incorporación de nuevas generaciones.

P.: ¿Existe dependencia de los apoyos públicos en el tiro olímpico?

R.: Bastante. El Consejo Superior de Deportes (CSD) aporta un 80% del total de nuestro presupuesto anual. Tenemos muchos equipos y muchas personas que compiten bajo nuestra federación y, sin la ayuda del CSD, no podríamos subsistir.

P.: ¿Como puede captar la atención de las nuevas generaciones?

R.: Con un cambio de imagen hacia nuestro deporte. El problema reside, básicamente, en el desconocimiento que tiene la opinión pública del tiro olímpico. Un 80% de los españoles desconoce la existencia del tiro olímpico. Mucha gente asocia nuestra actividad con las armas y la violencia, y no es así. Hacemos actividades en colegios para llamar la atención de los más jóvenes con pistolas de perdigones y la gran mayoría de niños salen contentos de estas. El problema reside en que, por la fama que nuestro deporte tiene, muchos padres no nos aceptan porque lo ven como un deporte peligroso, y es todo lo contrario. Es un deporte seguro en el que no hay accidentes. Es más, las compañías de seguros comparan nuestro deporte con la peligrosidad que existe en el ajedrez, teniendo que pagar apenas un euro al año por el seguro de nuestros federados.

P.: En el caso que un atleta volviera con una medalla de Tokio, ¿cómo afectaría eso a la federación?

R.: Nos daría buena prensa y reconocimiento, que es lo que actualmente más nos hace falta. Actualmente contamos ya con dos tiradores clasificados para los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, Alberto Fernández y Fátima Gálvez. Sé que son tiradores que tienen las condiciones y el nivel necesario para ganar una medalla olímpica, pero también hace falta esa pizca de suerte cuando entra en juego la presión de un gran evento, y más uno como los juegos, que suceden una vez cada cuatro años.

P.: ¿Qué papel debe tener la administración en esta nueva etapa tras el Covid-19?

R.: Nos gustaría contar con un poco más de manga ancha. En un deporte como el tiro olímpico, están todos los atletas separados entre sí, a diferencia de deportes como el fútbol o el baloncesto, donde los jugadores se dan abrazos y existe todo tipo de contacto físico. Nos gustaría que la administración creara una normativa conjunta para que los deportes en que no existe un contacto y se respeta la distancia de seguridad como el nuestro, el golf o el tenis, podamos llevar a cabo todas nuestras competiciones y dejar de tener prohibiciones para poder organizarlas.