Equipamiento
2022, el año en que Fluidra continuó con su crecimiento, pero deshinchó su acelerón
Después de un 2020 y un 2021 hinchados por los efectos de la pandemia y del confinamiento, el sector de la piscina ha vuelto a la normalidad. Fluidra anticipó unas ventas de 2.400 millones, por debajo de lo previsto.
28 dic 2022 - 05:00
Fin del boom de las piscinas. El sector de la piscina ha vuelto a su caudal habitual, después de un 2020 y un 2021 hinchados. Fluidra, compañía española de piscinas y wellness, prevé cerrar 2022 con un crecimiento cercano al 10% en términos interanuales, lo que representará haber terminado 2022 con unas ventas de 2.400 millones de euros. El resultado bruto de explotación (ebitda) será de más de 500 millones de euros.
El entorno macroeconómico, sumado a una demanda normalizada del sector de las piscinas, implicó que en octubre la compañía tuviera que reducir sus previsiones, pasando de un aumento de las ventas previstas de entre un 12% y un 15% a un 10%.
Fluidra asegura que los resultados se habían visto afectados en el corto plazo por una corrección de inventario en el canal superior a lo esperado, provocado por el entorno de mayor incertidumbre económica. Además, las alteraciones en la cadena de suministro, unidas a la aceleración de la demanda en 2020 y 2021, generaron elevados niveles de existencias.
La cotizada catalana argumentó que la inflación aceleró aún más la acumulación de existencias, de forma que los distribuidores se hicieron con un exceso de productos para adelantarse a las subidas de precios. Fluidra aseguró que está viendo ahora una normalización de los niveles de inventarios en la cadena de suministro.
Fluidra aseguró que está viendo ahora una normalización de los niveles de inventarios en la cadena de suministro
Según los últimos datos disponibles, a cierre del tercer trimestre, finalizado en septiembre, la compañía española de piscinas y wellness cerró con unas ventas de 1.967 millones de euros, lo que representó un 15,4% más que en el mismo periodo de 2021. Las ventas crecieron gracias al incremento de precios, el tipo de cambio y las adquisiciones, que compensaron la ralentización del volumen. Por áreas geográficas, el crecimiento fue liderado por Norteamérica, que logró un aumento del 30% entre enero y septiembre, impulsado por la actividad inorgánica.
Pese a este aumento de la facturación, el beneficio neto cayó un 19% en el periodo, hasta 179,4 millones de euros, lo que implicó que Fluidra se resintiera en bolsa. En los nueve primeros meses del año, el ebitda aumentó un 1,2%, hasta 456 millones de euros, afectado por un mix de ventas poco favorable y un volumen más bajo.
La compañía achacó el resultado a “una aceleración de la captura de precios en Norteamérica y con el coste de algunas materias primas empezando a descender”. Por otro lado, la deuda neta se situó en 1.325,1 millones de euros, un 42% más que el mismo periodo de 2021.
Además, Fluidra revisó al alza los objetivos de su programa de simplificación, que está implementado, por el que espera lograr ahorros de cien millones de euros durante los próximos tres años.