Equipamiento
Nike y el calzado deportivo se llevan el peor golpe en el mercado de las falsificaciones
El fabricante norteamericano es la marca con mayor número de imitaciones en el mundo, mientras que las zapatillas de deporte son los artículos más demandados por los consumidores que buscan productos sin licencias.
20 mar 2019 - 04:58
Unas zapatillas Nike por veinte euros y una camiseta del FC Barcelona por quince euros. En total, unos 35 euros gastados en productos falsificados cuando su precio medio en tienda superaría los 200 euros fácilmente. Esta combinación no es casual, pues la marca estadounidense es la que se falsifica con más frecuencia en todo el mundo, mientras que el calzado deportivo es el sector con mayor número de copias incautadas en las aduanas de los diferentes países, con 27.000 imitaciones interceptadas en 2013, según los últimos datos disponibles y hechos públicos esta semana.
El mercado secundario de las falsificaciones ha encontrado en la Red el territorio perfecto para extender sus tentáculos sobre los consumidores de todo el mundo, incrementando su cuota de negocio debido a la mejora en la calidad de sus imitaciones y al envío de cantidades cada vez más pequeñas para evitar ser detectados. Pero, además, ha permitido conocer con mayor exactitud qué impacto real tiene en el negocio.
Unas zapatillas de Nike falsificadas pueden tener un precio que oscila entre 5 dólares y 200 dólares (4,4 y 176,3 euros), mientras que su valor de mercado original está en torno a los 40 euros para los deportivos más asequibles y los 800 euros en sus modelos más exclusivos. Esta diferencia de precios atrae a los consumidores que no pueden permitirse pagar los últimos lanzamientos de la marca, encontrando en las imitaciones una vía para poder lucirlos.
El valor de las falsificaciones de las zapatillas de Nike oscila entre los 4 y los 176 euros, mientras que la imitación cada vez es más fidedigna
De hecho, existe una correlación directa entre la valoración de las marcas por los usuarios con la cantidad de copias que se producen, que se asocian a unos valores de calidad, como sucede con Nike, Rolex, Ray Ban y Louis Vuitton, según se desprende del informe Comercio de productos falsificados y pirateados: análisis del Impacto económico, elaborado por el Instituto de Propiedad Intelectual de la Unión Europea (Euipo).
En 2017 Nike obtuvo unas ventas de 21.100 millones de dólares (18,6 millones de euros) en el segmento del calzado deportivo, según sus últimos resultados disponibles. La facturación de la compañía norteamericana era equivalente a la que conjuntamente obtuvieron Adidas, Asics, Puma y Under Armour, sus cuatro principales competidores en este sector.
Todo ello sin contar con la cuota que les roban las falsificaciones. Este mercado secundario ha retomado su impulso en los últimos años, afinando sus métodos de producción y distribución. Por un lado, la mejora en el diseño de los productos los acerca visualmente a los originales, aunque la calidad de los materiales y la confección sean distintas, según el estudio.
Sin embargo, la tendencia entre los usuarios de moda y el calzado deportivo se orienta hacia la experiencia construida en torno al producto, a veces por encima incluso de la funcionalidad, dos cualidades que se explotan en el sector de las imitaciones para alcanzar a un público potencial que valora más poder llevar una zapatilla falsificada con un menor desembolso que la calidad de la misma.
Nike tuvo unas ventas de calzado deportivo equilaventes a las de Adidas, Puma, Asics y Under Armour juntos
El segundo factor que ha incrementado el volumen de ventas de la industria de las falsificaciones deportivas ha sido la red de distribución. El 62% llega mediante paquetes cada vez más pequeños, que no superan los tres artículos y dirigidos a las direcciones postales de los clientes, lo que dificulta su incautación. La propia industria de la fabricación de imitaciones ha evolucionado hasta incorporar una suerte de estrategia de personalización, al estilo de los grandes fabricantes de artículos deportivos.
Se calcula que el consumo de artículos deportivos en la Unión Europea (UE) movió 7.500 millones de euros entre los países miembros en 2017. Según las últimas estimaciones realizadas por la UE, cada año se producen unas pérdidas por valor de 492 millones de euros como consecuencia de la piratería de material de deporte, según el informe La protección de datos y la piratería, elaborado por el despacho especializado en protección industrial Elzamburu.
En el mundo se comercializaron productos falsificados por valor de 461.000 millones de dólares (338.000 millones de euros), el equivalente a un 2,5%del comercio mundial en 2013. En la Unión Europea los productos falsificados suponen un 5% de las importaciones, alcanzando los 85.000 millones de euros, según los últimos datos del informe El informe se ha basado en los datos recabados del medio millón de incautaciones aduaneras realizadas en el mundo, a través del cual se calcula el impacto económico de la falsificación en el comercio internacional.