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BeOne relanza un club de Madrid que llevaba once años cerrado

Palco23

25 nov 2016 - 11:05

Serviocio refuerza su presencia en la Comunidad de Madrid. El grupo gallego ha alcanzado un acuerdo con el Ayuntamiento de Boadilla del Monte para asumir la explotación de un centro deportivo en desuso desde hace doce años. La apertura se realizará el próximo verano, una vez se adecuen las instalaciones a las nuevas tendencias.

 

El club, que funcionará bajo la marca BeOne, exigirá una "fuerte inversión" por parte de la compañía, según explica el consistorio, con la intención de "reparar todos los desperfectos estructurales del centro producidos por vandalismo, arreglar la maquinaria y elementos de climatización, electricidad y depuración, subsanar los desperfectos en espacios deportivos, especialmente las pistas de pádel, y equipar las distintas áreas deportivas previstas".

 

BeOne Boadilla del Monte 650
El BeOne de Boadilla del Monte aprovechará un centro en desuso desde hace once años.

 

La instalación tendrá una sala de entrenamiento de 900 metros cuadrados, que se complementará con cuatro salas de actividades dirigidas y una de cycling, así como espacio para entrenamiento funcional, dos piscinas, campo de fútbol y cuatro pistas de pádel. También habrá un aparcamiento y un espacio para destinarlo a actividad comercial, ya sea un punto de restauración o una tienda de deportes.

 

La previsión del consistorio es que la nueva instalación de servicio a unos 7.000 vecinos del municipio, donde a nivel de competencia sólo cabe destacar un Fitness19, que compite en el segmento de los precios bajos, y Republic Space, otro club deportivo de grandes dimensiones y también con una oferta similar, incluido tenis.

 

Serviocio, que ha llegado a un acuerdo de exclusividad con Precor para los próximos dos años, se ha hecho con la concesión administrativa después de varios problemas del gobierno municipal. En 2005, la empresa Trapsa se adjudicó la construcción y explotación del centro. Según el Ayuntamiento, la empresa incumplió los plazos marcados y en 2010 se le impuso una sanción de casi 400.000 euros. En 2011 se produjo la segregación de la actividad de la empresa Trapsa a la mercantil Fitness Boadilla que incumplió también las obligaciones contractuales a las que se había subrogado. En julio de 2014, la empresa se declara en concurso de acreedores.

 

En la actualidad, son más de 120.00 usuarios los que acumula la empresa entre sus treinta centros, con una facturación superior a los 22,5 millones de euros. En Galicia tiene 12 instalaciones, por las cinco de Cantabria y tres en País Vasco. Además, dispone de seis gimnasios en la Comunidad de Madrid, dos en Andalucía, otro en Castilla y León y uno más en Comunidad Valenciana.