BPXport amplía fronteras y logra en Alicante su primer club lejos del norte de España

BPXport sale de su zona de confort. La gestora vasca, que desde su fundación en 2006 se ha centrado en explotar instalaciones deportivas en el Norte de España, se ha adjudicado un centro municipal en Monóvar (Alicante). Este contrato supone la irrupción de la compañía en el Levante y su primer proyecto fuera del País Vasco, Navarra o Cantabria.

Se trata de una instalación de 3.500 metros cuadrados que se inaugurará próximamente y que cuenta con zona de fitness, piscina, pistas de pádel y parking, según ha podido saber Palco23. La cadena ha invertido 250.000 euros en renovar el equipamiento y realizar el cambio de imagen con vistas a inaugurar durante los próximos meses. La campaña de captación de socios empezará durante las próximas semanas.

“Es nuestra primera gestión integral en esta región, lo que nos abre expectativas para seguir buscando nuevas localizaciones en la zona”, asegura a este diario Beñat Barrio, propietario y director general de la empresa.

BPXport superó los ocho millones de facturación en 2018 y está en la carrera por adjudicarse la gestión de centros deportivos

A este proyecto se suma la adjudicación de otro complejo en Oiartzun (Gipuzkoa), donde la compañía prevé facturar más de 5 millones de euros durante el periodo que dura la concesión. La instalación, de 7.200 metros cuadrados, ya cuenta con 5.500 abonados. La cadena se ha comprometido a invertir más de 210.000 euros en mejorar los sistemas de gestión y ampliar los espacios deportivos con nuevas clases dirigidas.

“Este club incrementa nuestro posicionamiento en el País Vasco, donde ya gestionamos siete instalaciones de manera integral”, aclara. A estas se suman dos instalaciones en Navarra y una en Cantabria que BPXport se adjudicó en 2017, y en el que ha invertido 600.000 euros en mejoras, como ya adelantó Palco23. Junto a las dos nuevas adjudicaciones, la compañía ya gestiona de manera integral once complejos, que se suman a los 24 centros a los que presta servicios.

Como resultado, la compañía ha cerrado el año con una facturación que supera los ocho millones de euros, una cartera de abonados de 21.150 socios y una plantilla de aproximadamente 600 empleados, sin contar la división de gestión de servicio.

De cara a 2018 el directivo no se ha fijado un número determinado de aperturas, pero admite que la idea es “buscar nuevos objetivos en distintas zonas geográficas para abrir siempre que el plan de negocio favorezca el crecimiento progresivo y sin riesgos”. La empresa está participando en varios concursos, pero no ha trascendido la ubicación de esos proyectos.