Fitness
El fitness se concentra: el Covid anticipa otra oleada de compras en 2021
Los principales operadores del sector de los gimnasios invierten en digitalización y siguen con sus planes de expansión, si bien los ralentizan por la prudencia obligada a causa del coronavirus.
16 nov 2020 - 05:00
El sector del fitness, forzado a una nueva concentración. La situación derivada de la crisis sanitaria provocará una oleada de operaciones corporativas en 2021, ya que el Covid-19 implicará una serie de oportunidades cuando a los operadores de pequeñas cadenas o independientes no les quede pulmón para aguantar el golpe de la pandemia. Así opinan los principales operadores del sector, que mantienen el pie en el acelerador pese al cierre obligado en algunas regiones españolas centrando sus inversiones en el canal digital.
“El mercado está predestinado a consolidarse, por lo que no descarto fusiones o adquisiciones”, señala Juan del Río, consejero delegado de VivaGym. “Siempre hay opciones en un mercado como este, las ha habido en el pasado y se producirán en los próximos meses”, coinciden fuentes de la compañía Supera.
La concentración es un fenómeno que en España se inició en 2017 y que en 2018 y 2019 se aceleró. Ahora, tras el golpe del Covid-19 en el sector, irá a más. En los últimos años se han producido operaciones corporativas como las de Viva Gym Group y Duet Fit y entre Forus y Santagadea Sport por más de treinta millones de euros cada una de ellas. Altafit, por su parte, también adquirió clubes independientes en 2019, FitUp hizo lo propio en Madrid y la cadena low cost SmartFit entró en Cataluña con la compra de otros tres centros.
El fitness en España es un sector altamente fragmentado, con pequeños operadores independientes y un gran número de cadenas con fuerte presencia en el mercado, tanto locales como internacionales, e incluso nuevos operadores que se preparan para entrar, como es el caso de Énergie Fitness. Como en tantos otros sectores, los grupos de mayor tamaño podrán aguantar el golpe con mayor estabilidad, mientras los más pequeños se verán abocados, con frecuencia, al cierre o a la venta.
“En 2021 habrá absorciones de pequeñas cadenas y de gimnasios individuales, que no tienen los mismos números que los grandes grupos; de hecho, ya se está viendo que hay oportunidades porque no pueden aguantar más de dos o tres meses este golpe”, señala por su parte Rafael Cecilio, presidente de DreamFit. “Habrá muchas oportunidades: una gran crisis genera grandes oportunidades y si los grandes grupos ven la posibilidad de comprar en muy buenas condiciones, lo van a hacer”, augura.
“Durante el segundo semestre de 2021 y 2022 se cerrarán nuevos proyectos por parte de las cadenas, y no sólo concesionales: en el mercado low cost y en el premium habrá bastante movimiento”, sostiene Roberto Ramos, fundador y consejero delegado de BeOne. “Habrá un poco de todo; hay gente de instalaciones unitarias que ya se nos han acercado, por lo que habrá bastante crecimiento inorgánico”, sentencia.
También hay algunos operadores que prefieren manifestarse con más prudencia ante el momento actual de incertidumbre. Gabriel Sáez, presidente de Ingesport, asegura que, por esta situación, “no vemos posibilidad de operaciones corporativas por nuestros requerimientos de inversión; no cuadra ninguna operación corporativa porque no cumplen nuestros requerimientos”. “No es fácil que haya operaciones corporativas o fusiones en 2021, será un año de recuperación y no de crecimiento”, señala Ignacio Triana, fundador y director general de Forus.
Asimismo, José Antonio Sevilla, fundador y director general de Altafit, opina que “es posible que haya operaciones corporativas”, pero recuerda que “es un momento de enorme incertidumbre, por lo que no me quiero aventurar a pronosticar el futuro”.
El futuro pasa por la digitalización y la seguridad
Donde sí hay unanimidad es en que el futuro del sector del fitness pasa por la digitalización y por más seguridad. En este sentido, Cecilio considera que “vamos a seguir con la digitalización, no habrá grandes inversiones, pero todos apostamos por tener unos servicios digitales acordes con nuestro sector”. “También hacemos inversiones para adaptar ciertos equipamientos a la situación actual, así como más limpieza e higiene; lo que hay que hacer es sobrevivir a la pandemia y llegar en buenas condiciones al final”, añade el ejecutivo.
En esta línea, el primer ejecutivo de VivaGym considera que “la inversión en tecnología es lo que se lleva el interés de las cadenas”, pero asegura que las compañías “están muy focalizadas en recuperar la caja e invertir lo menos posible durante 2021 hasta que venga la recuperación”. “La inversión está destinada a la vuelta de los abonados y a mejorar su experiencia”, opina por su parte el fundador de Forus.
“Las áreas prioritarias de inversión tienen que pasar por la mejora de instalaciones, focalizando el gasto en aquellas áreas que inciden más directamente en la experiencia del usuario; en Altafit cada año hemos ido dotando una parte importante del presupuesto a inversión de mantenimiento y haremos lo mismo en 2021”, explica Sevilla.
“En BeOne la inversión pasa por la digitalización, pero tenemos previstas dos instalaciones en crecimiento orgánico”, comenta Ramos. Por su parte, Sáez indica que el futuro pasa por “la seguridad de las personas tanto empleados como clientes, en avanzar la transformación del producto y en continuar con nuestra revolución digital, incluyendo un modelo hibrido potente”.
Las cadenas mantienen los planes de apertura, pero con prudencia
Por otro lado, las cadenas seguirán con sus planes de apertura pese a la pandemia, aunque los procesos de expansión se han ralentizado. Casi todos los grandes operadores coinciden en que hay que hacer un esfuerzo y seguir con lo planeado para cuando vengan tiempos mejores.
VivaGym prevé llegar a los cien centros en España antes de que finalice 2020 con tres o cuatro aperturas y prevé seguir creciendo en 2021; DiR programó cuatro aperturas para finales de año; Metropolitan tiene cuatro contratos firmados para abrir entre este año y el siguiente y en Supera “tenemos previsto abrir en 2021 Setúbal, si no llegamos a finales de 2020, Barreiro, también en Portugal, y El Vasco, en Oviedo”, revela la compañía.
Además, McFit busca entre cinco y seis aperturas en 2021 en España e Inacua trabaja en adjudicaciones y concesiones después de haber mantenido sus planes de apertura para este curso. BeOne, por su parte, prevé entre dos y tres aperturas en el próximo año.
“Los contratos firmados en DreamFit los vamos a desarrollar, pero los retrasamos: lógicamente no haremos obras hasta el próximo verano, aunque hemos abierto dos gimnasios porque las obras estaban a medias”, señala el primer ejecutivo de la cadena. “Todas las cadenas son sensatas y tienen los planes de expansión en el congelador, pero si las obras ya estaban en marcha, lo más sensato es terminarlas como sea”, añade, algo en lo que coincide Triana.
“Muchos teníamos muy avanzados planes de expansión ambiciosos y contratos firmados; el estado de alarma obligó a parar y algunos, como es nuestro caso en Altafit, retomamos las obras cuando pudimos abrir los gimnasios en el último cuatrimestre del año”, explica Sevilla. “Para el resto de proyectos de futuro iremos tomando las decisiones de inicio de las obras de proyectos firmados según vaya evolucionando la situación de la pandemia y la economía”, subraya el directivo, al tiempo que recuerda que “cada compañía ha hecho sus propias proyecciones financieras y ha tomado decisiones de acelerar o ralentizar sus planes en función de cada caso”.
Ramos explica que “la mayoría ha congelado o ralentizado sus planes, pero algunos los han mantenido porque les cogió a punto de abrir o a medio hacer; todos asumimos la prudencia, aunque muchos se están posicionado a la espera de que esto pase y surjan oportunidades orgánicas e inorgánicas”.
“Cada uno tiene su balance, su caja y su forma de gestionar el riesgo; nosotros entendemos que el nivel de incertidumbre con la crisis sanitaria y económica invita a ser muy prudentes hasta que pase, por lo que hay que preservar el balance y la caja”, dice Sáez.
“El crecimiento se produce porque somos un operador de salud preventivo y porque en España hay oportunidad para crecer, no es un mercado saturado, sino que es competitivo, tiene sentido, por lo que las cadenas no renuncian a sus planes”, sintetiza Del Río.