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El Barça busca llenar el Camp Nou en 2017 con un nuevo abono para la Liga Santander

Jabier Izquierdo

3 ene 2017 - 05:00

La fidelidad tendrá su premio para los socios del FC Barcelona que llevan años en lista de espera para poder tener su asiento en el Camp Nou. El club ha puesto en marcha, de cara a la segunda vuelta de esta temporada, un nuevo abono para que mil de los aficionados puedan acceder a determinados partidos en el estadio, una media que aspira a potenciar la asistencia en la fase decisiva de la Liga Santander. En lo que va de 2016-2017, el equipo ha contado con 80.938 voces en las gradas lo que representa una ocupación del 81,5%.

 

El pase, que será personal e intransferible, se llamará Abono Lista de Espera y será repartido entre los socios que lo soliciten atendiendo a la antigüedad del registro. Los partidos que entran dentro de este abono son los del Athletic Club, el CD Leganés, el Real Sporting de Gijón, el RC Celta de Vigo, la Real Sociedad, el CA Osasuna y el Villarreal CF. El pase, cuyo precio oscilará entre los 118 y los 174 euros, se podrá adquirir hasta el 20 de enero, siempre y cuando no se termine antes con el millar de carnés disponibles. El reparto de los mismos por el campo será el siguiente: 800 para la zona de Gol y 200 para el Lateral.

 

Barça Camp Nou Mosaico Clásico 650
El Barça-Madrid rozó el 100% de ocupación, aunque la media del año se sitúa en 80.938 personas por partido.

 

Esta es la última iniciativa diseñada por la junta directiva presidida por Josep Maria Bartomeu para que el estadio muestre una buena imagen en todos los partidos, además de pretender fidelizar a los socios que más tiempo llevan pagando año tras año para optar en un futuro a un asiento fijo en el Camp Nou. Y visto el estancamiento en la lista de bajas en los últimos años, probablemente ya al nuevo Camp Nou.

 

Desde la creación en 2003 de la Lista de Espera, han sido decenas de miles los aficionados que se han apuntado a ella, aunque los 200 primeros socios inscritos no pudieron acceder a las localidades liberadas hasta 2011. Tras la salida de Joan Laporta de la presidencia blaugrana, la directiva entrante de Sandro Rosell decidió hacer un proceso de depuración de duplicidades y el registro sufrió un gran recorte de más de 2.000 unidades.

 

Sin embargo, la cola no ha dejado de crecer, y a 31 de mayo de 2016 eran 9.499 los socios que figuraban en ella. Con un coste de 177 euros para los adultos, mismo importe que el que paga el socio con abono, sus miembros aseguran el futuro de la masa social del club, que en verano contaba con 143.459 socios. En la última junta directiva se aprobó el reparto de los 212 abonos dados de baja por impagos este curso sean asignados a socios de la Lista de Espera. Con esta nueva tanda, la cifra de miembros que han logrado un asiento fijo en el Estadi ha aumentado a 1.926 personas.

 

Esta cifra sitúa a la entidad azulgrana como una de las más numerosas en cuanto a fidelidad de sus aficionados, pese a que desde 2011, y para evitar un aumento sin control de la masa social, las personas interesadas en ser socios deben darse de alta previamente con el carné de compromiso. Durante tres años, el aficionado cuenta con la mayoría de las ventajas del socio ordinario, aunque se excluye, por ejemplo, la opción de entrar en los sorteos de entradas para las finales de la Champions League, y paga 137 euros al año.

 

 

 

El Camp Nou, una fuente de ingresos cada vez mayor

 

El Barcelona tiene aproximadamente 85.000 aficionados con derecho a un asiento fijo en el Camp Nou, lo que le sitúa en lo más alto de la tabla de clubes de La Liga, por encima del Real Madrid (61.287 abonados) y del Atlético de Madrid (48.000 abonados).  En la temporada 2015-2016, la última con datos disponibles, los ingresos por socios y abonados ascendieron a 45,5 millones, de los que 18 millones de euros corresponden únicamente a la cuota anual de los miembros.

 

En total, el negocio vinculado al Camp Nou se complementa con los más de 100 millones de euros que genera su explotación anual, incluido la visita guiada del museo. El grueso de estos recursos los generó la venta de entradas en taquilla, impulsada también por el cada vez mayor uso que los socios realizan del Seient Lliure, el sistema de liberación de asientos y que, por primera vez en la historia, superó las 800.000 operaciones en un solo curso; de media, se pusieron a la venta 27.534 butacas por partido, un 10,5% más. En total, la temporada pasada acudieron al estadio 4.000 personas más de media en comparación con la 2014-2015.