El FC Barcelona pierde a Danone como patrocinador en EEUU por el caso del ‘Barçagate’

El FC Barcelona pierde un patrocinador. La filial estadounidense de Danone, que forma parte de la multinacional agroalimentaria Danone, con sede en Paris, ha rescindido el contrato de patrocinio regional con el club, valorado en cerca de 300.000 euros anuales como consecuencia de la detención del expresidente del club por el caso Barçagate, según ha avanzado EFE.

Dos semanas después de la detención del expresidente Josep Maria Bartomeu y el director general de la entidad Óscar Grau, la multinacional envió un correo al club con la intención de terminar la vinculación existente entre ambas empresas.

Los principales motivos expuestos por la compañía fueron que la marca “no podía permitir que su marca estuviese vinculada a los hechos porque podía dañar su reputación”. Con la posibilidad de que el asunto afectara a su mercado, la compañía rompió su relación con el FC Barcelona.

El contrato entre ambas compañías fue firmado el pasado noviembre e iba a tener una duración de tres años. Gestionado por la oficina de la entidad azulgrana en Nueva York, el acuerdo fue el primer patrocinio regional del club para Estados Unidos.

El FC Barcelona encargó una auditoría a PwC para descartar la creación de las redes sociales por parte del club

A través de sus oficinas en Nueva York, el club azulgrana ha gestionado otras acciones de patrocinio como la extensión de su acuerdo con Stanley Black&Decker, con el que el logo de la compañía pasaba a ocupar el frontal del equipo femenino.

El Barçagate es el caso que envolvía la posible monitorización de las redes sociales, así como atacar a los opositores de la junta y a varios jugadores y personas de referencia del mundo culé por parte de la empresa I3 Ventures, contratada supuestamente por el director del área de presidencia, Jaume Masferrer.

Además, el escándalo provocó una crisis institucional en el Camp Nou y obligó a la junta de Bartomeu a abrir una auditoría interna realizada por PwC, que descartó que el club hubiera ordenado la creación de las cuentas en redes sociales para desprestigiar a adversarios políticos o a jugadores como Lionel Messi y Gerard Piqué. Todo terminó con la dimisión del ahora expresidente del club, Josep Maria Bartomeu, y su posterior detención por su inmersión en el asunto.