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El Olympique de Lyon da un paso más en los eSports y se fusiona con el club francés Ldlc
La entidad de deportes electrónicos se ha mudado a Lyon y, a partir de 2020-2021, se instalará en el nuevo centro de entrenamiento del club de fútbol, integrada en el plan de construir un anexo al Groupama Stadium.
8 ene 2020 - 09:42
El Olympique de Lyon competirá por los principales títulos de eSports. El club de la Ligue-1 se ha unido al equipo francés Ldlc para competir bajo una misma marca en las ligas nacionales e internacionales. Los términos económicos de esta alianza no se han desvelado, aunque en virtud de la misma, la entidad de deportes electrónicos se trasladará su sede para operar junto al estadio del club de fútbol.
Por ahora, competirá en una sede provisional, a expensas de culminar la construcción de un nuevo centro de entrenamiento especializado en eSports. Este proyecto finalizará en 2020-2021, y estará integrado dentro del plan de ampliación del Groupama Stadium, en cuyos terrenos adyacentes se construirá un auditorio que amplíe su capacidad de captar eventos y espectáculos.
El estadio del Olympique, de hecho, ya es uno de los mayores complejos de entretenimiento de Francia. Para 2024 el objetivo es facturar 400 millones de euros a través de esta área, para lo que incluso han creado una productora propia junto a Olympia Production.
El Olympique de Lyon ya tenía presencia en los eSports, aunque sólo competía en torneos especializados en Fifa, donde contaba con dos jugadores en Francia y un equipo en China. Ahora también tendrá plaza en otros títulos como League of Legends, CS:GO, Fortnite y WRC. Ldlc es uno de los principales equipos de Francia y la temporada pasada se hicieron con el título de LoL de la LFL (el equivalente a la LVP).
El equipo galo cerró 2018-2019 con una facturación de 309 millones de euros, un 7% más que en el ejercicio anterior y que es totalmente atribuible a su regreso a la Champions League. Las ganancias cayeron un 16%, hasta 6,2 millones de euros, aunque se trata de un resultado neto positivo si se tiene en cuenta la fuerte caída de las plusvalías por traspasos, que cayeron un 30%, hasta 88,2 millones de euros.