Competiciones
De Amazon al refuerzo del ‘Big Six’: ¿qué Premier League deja Scudamore?
11 jun 2018 - 04:58
Richard Scudamore no se prodiga en exceso ante los medios de comunicación, pero sus reflexiones siempre pesan. Este ejecutivo británico ha sido el presidente de la Premier League durante veinte años, una etapa a la que pondrá fin este añoy en la que el negocio audiovisual de la competición se ha multiplicado por seis. Su reinado toca ahora a su fin, una vez que se han roto algunos tabús, como el hecho de que se emitan todos los partidos por televisión, se abra paso a nuevos playerscomo Amazon e incluso aumentar los periodos de descanso. Se va, pero deja el futuro amarrado a medio plazo.
Nacido en 1959 en Bristol, su carrera parecía enfocada al mundo de la abogacía, pero nunca finalizó sus estudios en la Universidad de Nottingham y finalmente inició su carrera en la empresa editora de Yellow Pages, el equivalente a Páginas Amarillas. En la empresa de directorios, que entonces estaba controlada por British Telecom, trabajó durante nueve años en los departamentos de márketing y ventas. De ahí salto al grupo de medios Thomson, donde pasó otros diez años antes detocarbalón.
Como el canterano que primero pasa por el filial antes de ascender al primer equipo, Scudamore estuvo dos años como primer ejecutivo de la Football League antes de subir a la Premier. Veinticuatro meses en los que ya empezó a conocer el funcionamiento del negocio del fútbol con la dirección de la gestora de las tres categorías previas a la élite del fútbol británico.
Scudamore entró en la Premier en 1999, después de dos años en la Football League y una década en el sector de la comunicación
Desde su acceso al cargo, una de las principales mejoras que ha experimentado la competición es su internacionalización y el crecimiento de su negocio audiovisual. Son dos líneas de negocio que han ido a la par, y que han situado a la Premier como la liga de fútbol que más factura en todo el mundo. De hecho, prácticamente factura lo mismo que las primeras divisiones de LaLiga y la Bundesliga conjuntamente: 5.297 millones de euros en 2016-2017.
En su primer ciclo al frente, los derechos de televisión se vendieron por 1.200 millones de libras (2001-2004), mientras que en 2016-2019 alcanzaron los 5.136 millones de libras sólo en Reino Unido. A nivel internacional, la factura ha pasado de 60 millones a 1.100 millones de libras al año. El principal motor y que parece haber gripado en su despedida, en plena transformación del modelo de negocio audiovisual. “El anterior ciclo fue una barbaridad, y eso que el mercado británico va atrás desde hace meses o años”, señala una fuente autorizada.
Scudamore diseñó una licitación que buscaba mitigar ese riesgo de frenazo, y todo apunta a que lo máximo que conseguirán es no perder ingresos a costa de emitir aún más partidos por temporada, de 168 a 200 por temporada. La duda es: por más encuentros que pongan a la venta, ¿pagarán más los operadores?
Sky ha dejado clara su posición, pues consiguió retener los principales lotes un 16% más barato, hasta 1.193 millones de libras por año. Ello, pese a que eleva de 126 a 128 el número de partidos por curso: 32 choques del sábado a las 17:30 horas; 32 del domingo a las 16:30 horas; 24 del domingo a las 14:00 horas y 24 del lunes o el viernes por la noche, y ocho del sábado a las 19:45 horas y el domingo a las 14:00 horas, respectivamente.
British Telecom decidió apostar inicialmente por un solo lote de 32 partidos durante la temporada, a disputar el domingo a las 12:30 horas, pero, en una segunda fase, ha adquirido un lote adicional con 20 encuentros anuales, siempre entre semana. La inversión del grupo de telecomunicaciones será superior en el próximo trienio, con 975 millones de libras en total, pero el precio medio por partido habrá bajado un 18%.
En resumidas cuentas, sus dos principales socios audiovisuales pagarán un 11% menos en el próximo ciclo pese a que se emitirán doce partidos más de forma conjunta. Y lo que aún no ha trascendido es qué pagará Amazon, que ha sido la gran novedad del procesoal confirmar su apuesta por contenidos Premiumy hacerse con el lote para retransmitir una jornada entre semana en diciembre y otra en festivo, prevista para el Boxing Day (26 de diciembre).
Scudamore ve positiva la entrada de Amazon, pero no cree que “vaya a ser algo tan sísmico como algunas personas dicen”
Los términos económicos del acuerdo con el gigante del comercio electrónico no se han hecho públicos, aunque en la industria dan por hecho que apenas servirá para cubrir la diferencia de 600 millones de libras que ha supuesto la puja a la baja de Sky y BT. Ahora bien, Scudamore ha querido calmar la euforia, recordando que “no voy a exagerar su significado porque es uno de nuestros paquetes más pequeños; no creo que vaya a ser algo tan sísmico como algunas personas dicen”.
El modelo de negocio planteado por Amazon empuja hacia una mayor imbricación entre consumo de contenidos audiovisuales y venta de productos, una cuestión que podría dar alas a nuevos patrocinios. En este sentido, una de las decisiones de Scudamore y que secundaron los clubes fue renunciar a la venta de los title rightscuando venció el contrato con Barclaysy lanzar una renovación de su imagen.
La facturación comercial directa de la Premier ya alcanza los 96,77 millones a repartir entre los clubes, ya que, a Barclays, que aceptó seguir como banco oficial, le acompañan EA Sports, Cadbury, Carling, Nike, TAG Heuer, SportingiD y Topps.
“No podríamos haber logrado tanto sin el enorme compromiso de los socios audiovisuales y comerciales en todo el mundo. Esa cifra llegará a cientos”, señaló en su carta de despedida Scudamore, que siempre rechazo que la liga tuviera un socio de apuestas pese a la gran entrada de dinero que ha supuesto para sus clubes. Una decisión que, con el tiempo, también ha seguido la Football Association (FA).
La lista de tareas pendientes para su sucesor
Antes de marcharse, Scudamore también ha querido zanjar algunos de los debates espinosos con los que habría tenido que lidiar su sucesor de buenas a primeras. Uno ha sido el reparto de los derechos de televisión internacionales, que los Big Six reclamaban que dejara de ser a partes iguales. Finalmente, se ha llegado a un acuerdo y la distribución será según el rendimiento deportivo, pero siempre con un tope para que la diferencia entre el que más ingresa y el que menos no supere las 1,8 veces.
Los otros dos grandes acuerdos firmados en los últimos meses es que el mercado de fichajes se cierre un día antes de que empiece la competición, de manera que en 2018-2019 un equipo sufra la pérdida de uno de sus jugadores sin margen para suplirlo. A ello se le añade que, siguiendo la petición de técnicos como Pep Guardiola, se aumenten los festivos. De esta manera, se preserva el Boxing Dayen Navidad a cambio de liberar dos fines de semana de febrero, en los que sólo se jugarán cinco partidos en cada uno de ellos. Y el descanso será obligatorio, porque no se podrá aprovechar para jugar amistosos internacionales.
El carácter de Scudamore ha salido a relucir en más de una ocasión, como cuando no le tembló el pulso para investigar al Chelsea FC y multarle por negociar el fichaje de Ashley Cole a espaldas del Arsenal, o hace un par de años al contraprogramar un partido de Champions League y demostrar a la Uefa la fortaleza de su producto en Reino Unido. Y este fin de semana lo dejaba claro en la BBC por si había dudas sobre en qué bando estarán si la Uefa busca expandirse: “No vamos a renunciar a los fines de semana. No hay forma de que abandonemos eso. Somos la liga más exitosa del mundo y nadie puede venir y decirnos qué tenemos que hacer”.
Pero si hay un borrón en el historial del ejecutivo es su mayor laxitud en el control económico de los clubes, clave para la llegada de los inversores extranjeros, pero que refleja la existencia de aún varios equipos en números rojos. “La Premier League está en excelente forma y el futuro es brillante, por supuesto, todavía hay muchas cosas por mejorar y desafíos constantes, pero eso es lo que lo hace tan emocionante”, confirmó el propio Scudamore en su despedida.
¿Algún consejo para su sucesor? Uno, que en el fondo sirve para cualquier otra competición: “Es un trabajo en el que debes tratar de mantener a todos insatisfechos un poco todo el tiempo.No se puede mantener a todos contentos. Eso es imposible porque todos tienen diferentes desafíos”.