¿Quién gana la liga de la asistencia en Primera División en 2017-2018?

Veinte equipos, nueve meses de competición y sólo ocho equipos de Primera División que en 2017-2018 han conseguido mejorar sus registros de asistencia en los estadios. En total, han sido 10.237.148 de espectadores acumulados que han pasado por las gradas a lo largo de una temporada en la que los resultados deportivos han sido determinantes para entender los altibajos en términos de afición. El retroceso del 2,3% interanual se explica, en parte, por esta cuestión, pero también por la menor implantación social de los recién ascendidos, según los datos recopilados por Palco23 para esta serie de reportajes patrocinados por CaixaBank.

La previsión es que LaLiga en su conjunto, incluida Primera y Segunda División, vuelva a cerrar al alza este ejercicio, por encima de los 14 millones de espectadores. Porque la fluctuación entre ascendidos y descendidos está permitiendo que la categoría de plata crezca por encima del 15%. Para hacerse una idea de la influencia de estos cambios, mientras que los tres ascendidos (Levante UD, Girona FC y Getafe CF) han promediado 12.682 personas por encuentro, los tres que bajaron (Real Sporting, CA Osasuna y Granada CF) se situaban en 17.457.

Y eso pese a que los tres debutantes se han anotado los mayores ritmos de crecimiento en Primera. La agresiva política comercial del Levante les ha permitido crecer un 45,5%, hasta 17.621 seguidores, mucho de los cuales obtuvieron el abono gratuito por su fidelidad en Segunda. El club sacrificó en torno a dos millones de euros en ingresos con esta medida, que se versionó para el actual curso y permitirá que algo más de 9.000 granotas reciban otra vez gratis su pase para 2018-2019 al haber acudido a todos los partidos.

Un total de 10.237.148 de espectadores han acudido a los estadios de Primera División durante la temporada 2017-2018

Menos agresivo fue el Girona FC, que elevó el aforo de Montilivi a 13.500 asientos y ha crecido un 86,4%, hasta 10.214 espectadores. Estos números sitúan al club participado por City Football Group (CFG) por encima del Getafe CF, que mejoró un 57,4% y alcanzó los 10.211 seguidores de media en el Colisem Alfonso Pérez, superando los registros de sus últimas dos temporadas en Primera División.

Son números muy alejados de la parte alta de la clasificación, donde continúa mandando el FC Barcelona pese a haber sufrido una caída del 10,5%, hasta 69.331 seguidores. Los registros del Camp Nou se han visto afectados por la caída del turismo que se produjo en la ciudad a raíz de los atentados de agosto, además del impacto del proceso soberanista, que le llevó a jugar a puerta cerrada contra la UD Las Palmas. Además, en la visita intersemanal de la SD Eibar en septiembre se produjo la primera vez en mucho tiempo que la entrada fue inferior a 50.000 personas, y en otros cuatro duelos no superó el umbral de los 60.000, pese a una temporada en la que se ha impuesto con 14 puntos de diferencia.

El Real Madrid, que a comienzos de 2018 ya tenía muy complicada la opción de ganar el campeonato, ha retrocedido un 3,7%, hasta 64.847 espectadores. De hecho, el Santiago Bernabéu no llenó más de 60.000 butacas en cada encuentro desde el mes de marzo, a excepción del derbi contra el Atlético de Madrid, su segunda mejor entrada (78.536 pases) junto a la del FC Barcelona en la víspera de Nochebuena (80.737).

El conjunto rojiblanco ha recortado distancias de forma considerable con sus dos rivales, debido a que el estreno del Wanda Metropolitano se ha traducido en un crecimiento del 24,2% y una asistencia media de 55.498 colchoneros. La entidad tiene 68.000 asientos disponibles, de los cuales 56.000 están reservados a los abonados, una modalidad que ya está cubierta en su totalidad y para la que ya existe lista de espera. Muestra de este efecto ilusión que supone inaugurar hogar es que en los primeros cinco partidos se superó el 90% de ocupación, ratio que sólo se repitió en el último encuentro contra la SD Eibar que sirvió como homenaje a Fernando Torres.

El Real Betis no estrenaba hogar, pero si una nueva grada totalmente remodelada y una oferta de servicios mejorada. El Benito Villamarín amplió su capacidad por encima de los 60.000 espectadores y la afición respondió con un récord de abonados (casi 52.000), que se tradujo en un crecimiento del 47,9% en asistencia. La media se ha situado en 46.404 gargantas por partido, en una campaña que ha concluido con la clasificación para la próxima edición de la Europa League. Su vecino, el Sevilla FC, mejoró un 2,7%, hasta 33.071 seguidores, debido a su clasificación de última hora para la segunda máxima competición continental, si bien está lejos de su récord en 2015-2016.

Otro ejemplo de la incidencia que tienen los resultados deportivos en la toma de decisiones del consumidor es el Valencia CF, que volverá a jugar la Champions League y cuya evolución en el césped se ha traducido en un 14,1% más de asientos ocupados en Mestalla, con una media de 38.699 personas. Se trata de su mejor registro de los tres últimos años, aunque aún lejos de los 43.280 que promedió en 2014-2015, cuando Peter Lim se hizo con la propiedad del club una vez iniciado el curso.

A la inversa, la trayectoria del Athletic Club revela igualmente la poca incidencia que aún hoy tiene la experiencia en el estadio, o la ausencia de estrategias para comercializarlas. El conjunto vizcaíno ha sufrido un retroceso interanual del 9% y por primera vez ha caído por debajo de los 40.000 espectadores desde la inauguración del nuevo San Mamés. El equipo ha sufrido una de sus peores campañas y ha acabado en decimosexta posición, con una clara caída de la ocupación en el segundo tramo de 2017-2018.

El coste social de la falta de resultados sobre el césped también se ha hecho notar en los tres equipos que han perdido la categoría: Málaga CF (-7,9%), UD Las Palmas (-21%) y RC Deportivo (-7,7%). La crisis del conjunto grancanario se evidenció sobre todo en las últimas dos jornadas en casa, en las que la ocupación fue inferior al 20%, y el consejo de administración intentará no perder masa social en Segunda regalando el abono a los que pagaron el de este año. Está por ver qué hará el RCD Espanyol, cuya irregularidad se ha traducido en un retroceso del 12,2% que les sitúa nuevamente en niveles de ocupación inferiores a la mitad del RCDE Stadium.

Por último, los clubes que se encuentran en plena remodelación de sus estadios han sufrido los problemas habituales de ocupación. La Real Sociedad, que durante la próxima temporada proseguirá con las obras en Anoeta, ha caído un 8,1%, mientras que el RC Celta ha perdido un 3,1%. El Deportivo Alavés, por su parte, ha corregido su situación tras el revulsivo que supuso volver a Primera División y cae un 4%, mientras que la caída fue del 4,3% y la SD Eibar se mantuvo estable.