Entorno
El Gobierno recorta la previsión de crecimiento del 7% al 4,3% para 2022
El Ejecutivo estima que el PIB español seguirá creciendo un 3,5% en 2023, un 2,4% en 2024 y un 1,8% en 2025. Además, asegura que la tasa de paro se situará por debajo del 10% al final de ese periodo.
29 abr 2022 - 12:15
El Gobierno recorta sus previsiones. El Ejecutivo ha rebajado al 4,3% la previsión de crecimiento de España para 2022 y al 3,5% para 2023, según han indicado en la presentación del nuevo escenario macroeconómico 2022-2025 la vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño, y la ministra de Hacienda y Función Pública, María Jesús Montero. Hoy mismo, el ejecutivo enviará las previsiones a la Comisión Europea.
Para los próximos años, el Gobierno estima que el Producto Interior Bruto (PIB) moderará su crecimiento, expandiéndose un 2,4% en 2024 y un 1,8% en 2023. En cuanto la inflación, el Ejecutivo apunta que irá decayendo durante la segunda mitad del año hasta situarse en el 2% al cierre del ejercicio. Por su parte, Calviño ha asegurado que el paro se situará por debajo del 10% al final de 2025.
En cuanto al déficit público, el Gobierno espera que se sitúe en el 5% del PIB debido al buen comportamiento de los ingresos. Montero ha subrayado que la mayor recaudación se deba, sobre todo, a la recuperación económica y del empleo, y no tanto la inflación.
Las últimas previsiones del Gobierno, en la que se sustentan los Presupuestos Generales del Estado, databan de septiembre del pasado año y apuntaban a una expansión de la economía española del 7% en 2022. Ante el nuevo escenario macroeconómico, el Gobierno ha recortado previsiones “que se alinean con las más prudentes de los organismos nacionales e internacionales”, según ha asegurado Calviño durante su intervención.
El Gobierno calcula que la inflación se situará en el 2% a final de año
Antes del anuncio del Ejecutivo, el Fondo Monetario Internacional (FMI) había reducido la previsión de crecimiento para España hasta el 4,8%, mientras que el Banco de España estima un incremento del PIB del 4,5%. Por su parte, la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef) se alinea con el Gobierno y sitúa el crecimiento en el 4,3%.
A pesar de la caída en las proyecciones de la economía española, los distintos organismos apuntan a una tasa de crecimiento aún robusta dada la recuperación de turismo y el final de las restricciones por la pandemia. Aun así, los resultados se verán altamente afectados por la guerra en Ucrania, la inflación y la pérdida de poder adquisitivo de los hogares y las disrupciones en la cadena de suministro.
Calviño ha defendido que, a pesar de la incertidumbre general, los ciudadanos cuentan con una bolsa de ahorro tras la pandemia que puede ayudar a amortiguar el golpe. El Ejecutivo ha señalado que espera que el problema de los precios se vaya diluyendo a lo largo del año.
Durante la rueda de prensa, Calviño ha asegurado que el Gobierno prevé movilizar 31.000 millones de euros de los fondos europeos durante la primera mitad de año. “El ritmo de ejecución se ha acelerado y está respondiendo a las previsiones del plan de recuperación”, añade la ministra.