La inflación de la eurozona vuelve a marcar récord en mayo tras alcanzar un 8,1%

La inflación vuelve a marcar récord en Europa. La tasa de inflación interanual de la zona euro se ha situado en el 8,1% en mayo, frente al 7,4% registrado en marzo y abril, lo que supone el mayor encarecimiento de los precios en la región de toda la serie histórica, según el avance del dato publicado por la oficina comunitaria de estadística, Eurostat.

La escalada de precios de la zona euro en el quinto mes de 2022 responde a la subida interanual del 39,2% del precio de la energía, que se aceleró desde el 37,5% de abril, mientras que el incremento del precio de los alimentos frescos en mayo fue del 9,1% interanual, una décima menos que el anterior.

Por su parte, los servicios se encarecieron un 3,5% interanual, frene 3,3% del mes anterior, mientras que los precios de los bienes industriales no energéticos subieron un 4,2%, cuatro décimas más que en abril.

La energía subió su precio un 39,2% interanual en la zona euro

Entre los países de la eurozona, las mayores subidas de los precios se registraron en Estonia (20,1%), Lituania (18,5%) y Letonia (16,4%), mientras que las subidas menos fuertes correspondieron a Malta (5,6%), Francia (5,8%) y Finlandia (7,1%). Por su parte, Alemania registró una tasa de inflación del 8,7%, mientras que en Italia los precios se incrementaron un 7,3%.

En el caso de España, el IPC escaló hasta el 8,7% en mayo, según datos adelantados publicados ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE). El encarecimiento se produjo también por la subida de precios de la energía y los alimentos.

El Consejo de Gobierno del Banco Central Europeo (BCE) tiene previsto reunirse el próximo 9 de junio en Países Bajos para debatir las nuevas medidas de política monetaria y anunciar sus proyecciones macroeconómicas.

La presidenta de la entidad, Christine Lagarde, se ha mostrado partidaria a una normalización gradual de la política monetaria europea, incluyendo subidas de 25 puntos básicos en las reuniones de julio y septiembre para dejar atrás los tipos negativos de interés al final del verano.