MT Helmets: de las embarcaciones del puerto de Cartagena al Mundial de MotoGP

MT Helmets, mapa de un viaje hacia la élite. La compañía española ha pasado en menos de cincuenta años de producir cascos de forma manual a convertirse en uno de los principales distribuidores a escala mundial, con gran presencia en el segmento de la competición.

Sus orígenes están en Cartagena (Murcia) y se remontan a 1968. Ese año, Antonio Tomás, propietario de un taller de la ciudad que, además se dedicaba a la fabricación de fundas de asientos de motocicletas, puños y protectores de manillar, se unió con otro de la zona. Diez años después, en 1978, las partes formalizaron su acuerdo, dando lugar a lo que sería la primera semilla del gigante actual.

En 1978, la nueva MT Helmets se lanzó a la fabricación de cascos, con un primer modelo hecho de piel, como los que usan los jinetes. Con la entrada de la década de 1980, y con el expiloto Ángel Nieto venciendo en los circuitos de todo el mundo, la compañía subió su apuesta por el helmet, fabricando su primer casco integral en fibra de vidrio.

Para ello, acudió a un trabajador del puerto de Cartagena, que era uno de los pocos de la ciudad que dominaba la fibra de vidrio. Este accedió y la unión entre las partes dio como resultado la primera versión del MT Helmets Jamara, inspirado en el casco que utilizaba Ángel Nieto, también conocido como el12+1. 

Evolución del MT Helmets Jarama entre la primera y la tercera generación.

La producción de este primer modelo integral era íntegramente manual y, tras una gran aceptación del mercado, “con ventas altas gracias a su precio atractivo”, admiten fuentes de la compañía, esta dio un paso más en su plan para convertirse en uno de los principales players del sector.  

A mediados de la década de 1980, se hizo con una máquina de inyección de plástico, lo que permitió fabrican de forma más ágil y evolucionar a la segunda versión del MT Helmets Jarama. “La inversión ascendió a cuarenta millones de pesetas”, explican las fuentes y añaden que “a partir de ese momento, el ritmo de fabricación aumentó de forma considerable”. Gracias a la máquina de inyección, la compañía elevó su producción hasta los 3.000 casos diarios.

La década de 1990 comenzó con la aprobación del proyecto de ley sobre la obligatoriedad del uso del casco en España. A partir de entonces, la compañía abrió fronteras y comenzó a exportar a Alemania y Países Bajos. Desde entonces y hasta entrado el siglo XXI, MT Helmets trazó un plan de expansión más ambicioso, que se inició con el traslado de la fábrica a China a principios de los 2000.

“Eso disparó la capacidad de producción”, admiten las fuentes. Pese a su marcha del país, la compañía mantuvo en España el departamento de ingeniería y el de control de calidad.

Actualmente, la compañía está presente en 125 países, con Latinoamérica y Asia en el foco

Desde el traslado de la producción a China, MT Helmets ha aumentado su presencia internacional hasta distribuir, actualmente, en 125 países. España se mantiene como uno de los principales mercados, aunque Colombia, Argentina, India, Filipinas y Turquía, entre otros, también registran altos volúmenes de ventas.

Los planes para el corto plazo pasan por Latinoamérica y la zona del sudeste asiático. “Nuestro objetivo es fortalecer nuestra posicion en los países en los que ya estamos”, admite Abad.

Actualmente, la compañía tiene en el mercado cuarenta modelos de cascos, aunque ofrece a sus distribuidores la posibilidad de customizar los diseños, por lo que el catálogo se multiplica sustancialmente. “Es algo que nos permite adaptarnos a los diferentes mercados”, admite su consejero delegado.

Además de cascos, MT Helmets cuenta con su propia línea de equipamiento motociclista, llamada Seventy Degrees. Su catálogo incluye chaquetas, guantes, botas y pantalones, entre otros accesorios.

Desde el nombramiento, este mayo, de Iván Abad como consejero delegado, este explica que “la estrategia puede y debe cambiar, debemos aptarnos, aunque el objetivo pasa por ofrecer a nuestros clientes un producto con la mejor relación seguridad-calidad-precio”.

El camino de MT Helments en los circuitos

Los inicios de MT Helmets se escriben en los circuitos. A finales de la década de 1980, se proclamaron Campeones de España con Manuel Hernández, un piloto de la región de Murcia al que patrocinaron años antes, siendo el primero de la marca.

Sin embargo, el gran boom en el sponsoring llegó con Juanfran Guevara, otro piloto murciano que ya en 2013 competía de la mano de MT Helmets. “Guevara comenzó a usar un casco deportivo y, poco después, desarrollamos nuestro primer modelo enfocado en la competición”, explican las fuentes.

Con Guevara sin moto en el Mundial, el actual presidente de la compañía, Javier Tomás, decidió subir la apuesta de MT Helmets por el patrocinio deportivo, iniciando un proyecto junto a Teo Martín, propietario de la escuela de motorsport MSI. “Ahí se inició el equipo de motos del Campeonato de España de Velocidad (CEV), con MT Helmets como main sponsor”, revelan las fuentes de la compañía.

Tras varios años potenciando el proyecto, en 2018, un joven piloto murciano llegó a los oídos de Javier Tomás: un chico de Mazarrón llamado Pedro Acosta. Ante las dificultades de Acosta para hacer frente a los elevados costes de competir, el propio Tomás le pagó una motocicleta y le abasteció de todo el material necesario para mantenerse en el campeonato.

Sergio García Dols, piloto del MT Helmets-MSI de Moto2.

Desde entonces, el camino de MT Helmets y Acosta fue el mismo, hasta que este 2024, el piloto murciano ha debutado en MotoGP, pasando a Alpinestars como helmet provider. “Las cantidades de los patrocinios en la categoría son muy altas y debimos apostar por seguir con Acosta o ir por otro camino”, admiten las fuentes.

Sin embargo, Pedro Acosta no fue la única apuesta de MT Helmets la pasada temporada, ya que la compañía patrocinaba a unos treinta pilotos. Tras la marcha del murciano, la compañía, junto con MSI, han entrado en el Mundial de Moto2 (MT Helmets como patrocinador principal) y en MotoE, además de mantener su estructura en Moto3.

En cuanto a nuevas disciplinas o competiciones, Iván Abad admite que “este año nos centraremos en lo que ya tenemos, que está funcionando muy bien, aunque debemos plantear nuestra estrategia para la temporada que vienen y estamos abiertos a nuevos retos siempre que vayan en línea con nuestra filosofía y valores”.