Nike pagará 30 millones de dólares para retener a su CEO hasta 2020

Phil Knight abandonará la primera línea de Nike a principios del próximo año, pero la sucesión ya está más que atada y la multinacional estadounidense de equipamiento deportivo ha puesto una oferta irrechazable encima de la mesa de Mark Parker. El consejero delegado de la compañía será propuesto por Knight como nuevo presidente del consejo de administración, y para asegurarse que al menos seguirá otros cinco años al frente le ha ofrecido 30 millones de dólares (27,6 millones de euros).

No se trata de un pago en metálico, sino de un plan de incentivos por el que recibiría un total de 277.727 acciones de clase B. El 60% de estos títulos los recibirá en función del cumplimiento de objetivos, como mantener un crecimiento anual de los ingresos del 9% y del 13% para el beneficio por acción; el 40% restante de las acciones las percibiría sólo con mantenerse en el cargo hasta 2020. En cualquier caso, este bonus casi multiplica por diez al recibido en el último trienio, que ascendía a 3,5 millones de euros.

Según la información facilitada por Nike a sus inversores, sólo el 10% del sueldo de Parker es fijo, situándose en 1,55 millones de dólares. El 90% está sujeto a la evolución de la compañía, y se satisface o bien con pagos anuales al final de cada ejercicio, o con planes de incentivos basados en la entrega de acciones, como se ha propuesto para el periodo 2016-2020. En el ejercicio 2015, el primer ejecutivo de la multinacional percibió un total de 16,8 millones de dólares: 1,55 millones de salario fijo, 8,25 millones de un plan de incentivos, 725.965 dólares por otros conceptos y 6,2 millones en acciones u opciones sobre las mismas.

El grupo estadounidense de equipamiento deportivo cerró el 31 de mayo su ejercicio fiscal con un alza del 10%, hasta los 30.600 millones de dólares (28.154 millones de euros). El margen de explotación subió un 13%, hasta los 14.067 millones de dólares (12.942 millones de euros), mientras que el beneficio neto se disparó un 22% y se situó en 3.273 millones de dólares (3.011 millones de euros). Las ganancias por acción se situaron en 3,70 dólares, frente a los 2,97 dólares del ejercicio fiscal anterior, que va de junio a mayo.