2023, el pinchazo de los ‘hits’ del Covid

Con la pandemia llegó el boom del home fitness y con el desconfinamiento la explosión de la venta de bicicletas. Dos años después, el primero de ha deshinchado y el segundo está cogiendo polvo al final del trastero.

En 2021, el home fitness se convirtió en la gran tendencia tras el confinamiento, con el teletrabajo y los cierres de gimnasios, disparando la demanda de artículos y material para entrenar en casa, registrando un crecimiento sin precedentes de demanda

de artículos de este tipo en un momento en el que los gimnasios congelaron sus planes de

expansión.

Especial 2023: el año en que

las mujeres alzaron la voz

Un año después, el panorama cambió. Las cadenas de fitness confiaron en recuperar el negocio, los socios y los accesos de antes de la pandemia, por lo que reactivaron sus planes de expansión, coincidiendo con un retorno paulatino de los clientes a los gimnasios.

Compañías especializadas en el deporte en casa, como Peloton y Volava, han pasado de registrar cifras sin precedentes a abonarse a los números rojos, incluso a entrar en concurso de acreedores. En 2020, la empresa estadounidense especializada en fabricación y venta de bicicletas estáticas para uso doméstico se disparó y su valor bursátil se quintuplicó hasta 42.000 millones de dólares, alcanzando máximos históricos tras la compra de Precor.

Ese mismo año, la compañía registró un resultado neto positivo de 69,3 millones de dólares y un resultado bruto de explotación (ebitda) de 118,9 millones de dólares. El total de miembros en su plataforma aumentó en más de 3,6 millones, igual que los entrenamientos por suscripción, que crecieron un 306%, hasta 77,8 millones, con un promedio de 20,7 entrenamientos mensuales por suscripción a la plataforma.

Tres años más tarde, los estados financieros de Peloton corroboran el cambio de tendencia de la práctica deportiva de la sociedad. La compañía registró ingresos por 2.800 millones de euros, un 21,8% menos que en el ejercicio anterior, perdió hasta 241,8 millones de dólares, un 80,7% por debajo del resultado negativo del año anterior, cuando las pérdidas se situaron en 1.255 millones de dólares.

En 2021, el home fitness se convirtió en la gran tendencia tras el confinamiento, con el teletrabajo y los cierres de gimnasios, disparando la demanda de artículos y material para entrenar en casa

En España, Volava, fundada en 2017, también hizo su particular agosto con la pandemia. La empresa finalizó 2020 con una facturación de dos millones de euros. En enero de 2021, cerró una ronda de financiación de dos millones de euros que disparó su valoración hasta quince millones. Incluso alcanzó un acuerdo con Amazon para vender sus productos a través de la plataforma de ecommerce.

El pasado agosto, Volava presentó concurso de acreedores tras registrar una caída del 60% en sus ventas. La empresa tuvo que hacer frente a la refinanciación de una deuda bancaria de casi dos millones de euros. Dos meses después de entrar en concurso, Mad Dogg Athletics se hizo con Volava para “dar continuidad al servicio para los clientes actuales de la compañía”, tal y como confirmó su consejero delegado, Joel Balagué, en redes sociales.

Fuera de casa, el sector de la bici vivió su particular explosión durante 2021. El levantamiento de las restricciones fue una realidad y se vendieron más de 22 millones de bicicletas, según el estu dio La Industria de la Bicicleta Europea y el Perfil del Mercado, realizado por la Confederación de la Industria de la Bicicleta Europea (Conebi). Estas cifras se tradujeron en un récord de negocio de 19.700 millones de euros.

En 2022 se produjo una ralentización de ventas de bicicletas a escala europea, cayendo hasta 14,7 millones de unidades vendidas. “En 2022, la industria europea de la bicicleta ha demostrado una notable capacidad de recuperación, a pesar de la importante ralentización de las ventas de bicicletas convencionales y de las conocidas interrupciones de la cadena de suministro que aún persisten como consecuencia de la pandemia”, manifestó Erhard Buchel, presidente de Conebi.

Según los datos publicados por el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo de España, a cierre del primer semestre de 2023, la producción de bicicletas descendió un 1,9%, alcanzando 178.200 unidades, frente a las 181.800 unidades producidas durante el mismo periodo del año anterior. La caída de la producción de bicicletas se debe al retroceso en la venta de estos productos deportivos.

El valor de la producción de los primeros seis meses de 2023 aumentó un 16,1% respecto al mismo periodo de 2022, con una cifra de 152,3 millones de euros, frente a los 131,2 millones de euros del primer semestre de 2022. El precio medio de la bicicleta se situó durante el primer semestre del año en 854,7 euros, que alzaron en más de 130 euros el precio que se registró durante todo 2022 (724,6 euros).

Antes de la pandemia, en 2019, el precio por unidad se situaba en 548 euros. En concreto, el segundo trimestre de 2023 se inició con un aumento del 37,8% en el valor de la producción en abril, pero el crecimiento se suavizó en mayo y junio, con un alza del 14,3% y el 4,3%, respectivamente. Estos datos desglosados se traducen en un alza del valor de la producción durante el segundo trimestre del curso de un 16,4% respecto al mismo periodo de 2022, materializado en 78 millones de euros.

El sector del fitness saca rédito

Alrededor del 75% de los operadores del sector del fitness ha registrado en el tercer trimestre del año 2023 ingresos superiores a los del mismo periodo de los ejercicios prepandemia, según se desprende del Termómetro del Fitness de Palco23, elaborado a partir de la opinión de un panel de empresas del sector en España.

Pese a que no todos los operadores encuestados han registrado niveles de ingresos prepandémicos en el tercer trimestre del año, el 100% sí ha mantenido o mejorado la facturación respecto al tercer trimestre de 2022. De hecho, más del 80% ha experimentado un incremento interanual “sustancial”, tal y como apuntaron fuentes del sector a Palco23.

Uno de los factores determinantes para el aumento de los ingresos ha sido la recuperación de

abonados. Mientras el 90% consideró que el nivel de socios en sus centros subió moderada o sustancialmente durante el tercer trimestre del año, sólo el 10% apuntó que se mantuvo igual o menor respecto al mismo periodo de 2022.