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El Nàstic prevé una caída del 60% en el presupuesto de 2020-2021 tras el Covid-19

Durante la próxima temporada, el club de Segunda B no contará con la ayuda al descenso que recibió la pasada campaña. Ello, unido a que no espera facturar por la venta de jugadores, supone un desplome del presupuesto que ha intentado mitigar fidelizando a abonados y patrocinadores.

P. López

15 jun 2020 - 04:59

Lluís Fàbregas: “La situación del Nàstic es mejor que la de hace siete años; hemos liquidado una deuda de más de ocho millones y estamos en números positivos”

 

 

Si el Covid-19 ha afectado al fútbol profesional, el impacto de la pandemia en los clubes que compiten en las ligas amateurs es aún mayor. Sin ingresos por derechos audiovisuales, su negocio depende de la venta de entradas y abonos y del patrocinio de empresas locales, muchas de ellas mermadas por el coronavirus. En ese clima de incertidumbre se mueve ahora el Gimnàstic de Tarragona (más conocido como Nàstic), un club con estructura profesional que la pasada temporada descendió a Segunda B, por lo que contaba con la ayuda del descenso que le ha permitido amortiguar el impacto del Covid-19.

 

“Esa ayuda ha sido fundamental, pero el año que viene no la tendremos; tampoco facturaremos por la venta de jugadores y es posible que algunos patrocinadores ajusten el contrato o no puedan seguir”, explica a Palco23 el director general del club catalán, Lluís Fàbregas. El directivo prevé que el presupuesto en 2020-2021 caiga en torno a un 60% y un 70%. “El Covid-19 afecta a nuestras finanzas, pero la situación del club no es la que había hace siete años cuando estábamos en Segunda B, con una deuda superior a ocho millones de euros, y ahora estamos en números positivos”, afirma.

 

Para minimizar los efectos económicos de la suspensión de la actividad y garantizar su viabilidad, el club solicitó un expediente de regulación temporal de empleo (Erte) que afectó a prácticamente toda la plantilla, a la que espera recuperar parcialmente en los próximos meses con el foco en los cincuenta trabajadores que trabajan en el fútbol de formación.

 

 

 

 

El directivo da por hecho que durante el mercado de traspasos de verano la entidad no facturará por la venta de jugadores ni recibirá los recursos de la ayuda al descenso con los que contó la pasada campaña, motivo por el que se ha volcado en definir una estrategia de fidelización de patrocinadores, que suponen la mayoría del presupuesto, y abonados y venta de entradas, que copan un 15% del presupuesto. “Este año, con la temporada finalizada, esta partida caerá un 15%; sabemos que tenemos una deuda con nuestros 6.000 abonados y tenemos que compensarles”, ha explicado.

 

Otra vía que se está trabajando es en dar con “fórmulas imaginativas para que contraten el carnet de socio, aunque sabemos que es complicado porque trabajamos con un escenario en el que no retomaremos la temporada con público en las gradas”. Ante esta situación, la posibilidad de seguir los partidos por televisión gana enteros. “Se está trabajando para que los socios puedan seguir los partidos por otras vías”, afirma Fàbregas. La plataforma Footters está trabajando en esta posibilidad para incluir las emisiones en la oferta de 2020-2021, ante el interrogante de cuándo podrán abrir los estadios.

 

En cuanto a los espónsors, el club está definiendo una estrategia a largo plazo. “Los patrocinadores que nos apoyen ahora y en 2020-2021 tendrán mejores condiciones para seguir en el futuro, con la vista puesta en Segunda División; tenemos claro que si nos centramos en el corto plazo no podremos gestionar esta situación”, detalla.

 

 

 

 

El club está trabajando en base a un escenario en el que no podrán jugarse partidos con público en las gradas hasta 2021, si bien en las últimas semanas las previsiones de los clubes profesionales han mejorado e incluso se ha estudiado la posibilidad de finalizar esta campaña con público.

 

“Al principio creíamos que la temporada podría retomarse, pero competimos en una liga que no mueve tanto negocio como Primera o Segunda División”, explica, sobre la suspensión de la campaña y la organización de un play-off exprés de ascenso a LaLiga SmartBank. La Real Federación Española de Fútbol (Rfef) decidió que, si bien habría ascensos, no habría descensos, lo que provocará que durante la próxima temporada la Segunda B esté formada por un centenar de equipos, veinte más.

 

“Será más complicado volver a Segunda, con el añadido de que en 2021-2022 empezará la Segunda B Pro”, comenta el director general del Nàstic respecto a la nueva competición creada por la Rfef para facilitar la transición de LaLiga. Los clubes que logren el ascenso en 2020-2021 no pasarán por Segunda B Pro, sino que ascenderán directamente a LaLiga SmartBank. De ahí que sea tan importante para el club subir de categoría durante la próxima campaña.