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Especial 2020: El negocio del deporte en el año del Covid-19

El Real Madrid deja la portería a cero y un Bernabéu a estrenar antes de lo previsto

El club blanco logró cerrar el ejercicio con un resultado neutro, pero en positivo, en un año marcado por el golpe del coronavirus en los ingresos de todos los clubes de LaLiga. La entidad que preside Florentino Pérez, que también debió llegar a un acuerdo para recortar su masa salarial, encontró en 2020 una oportunidad en plena pandemia.

C. De Angelis

28 dic 2020 - 04:58

El Real Madrid deja la portería a cero y un Bernabéu a estrenar antes de lo previsto

 

 

Como cada año, Palco23 realiza en las últimas semanas de diciembre un repaso a los últimos doce meses en el negocio del deporte, marcados por el impacto de la pandemia del Covid-19. Análisis macroeconómico de España y el mundo, recorrido por los fenómenos sociales que ha provocado el coronavirus y reportajes sobre el impacto en los principales clubes, competiciones y federaciones del sector forman el Especial 2020: el negocio del deporte en el año del Covid-19.

 

 

Portería a cero. El Real Madrid saldó el año del Covid-19 evitando las pérdidas y avanzando pantallas en uno de los proyectos más importantes para el futuro económico de la entidad, la reforma del estadio Santiago Bernabéu. Ahora bien, encara una nueva temporada con perspectivas negativas a causa de la pandemia, con un ajuste de los ingresos de 172 millones de euros que pone en crisis la sostenibilidad económica de un club que, periódicamente, renueva su plantilla con el fichaje de jugadores estrella.

 

 

El club blanco comenzó el año con un nuevo proyecto con nombre de promesa, Real Madrid Next, una marca con la que englobar sus proyectos de innovación, salud y deporte. El objetivo del proyecto, agrupar todas las actividades del club para mejorar el rendimiento de sus jugadores y la fortaleza deportiva y económica de la organización. Rendimiento deportivo, e-health, fan engagement, generación de contenido audiovisual, ciberseguridad e infraestructuras tecnológicas y sociales son las seis áreas de trabajo del nuevo proyecto con el que el Real Madrid emulaba el Barça Innovation Hub (BiHub) para dar un paso adelante en innovación y desarrollo del negocio. 

 

El equipo de Florentino Pérez también activó la maquinaria comercial con la vista puesta en aumentar sus ingresos internacionales. Para hacerlo, suscribió una alianza con IMG, a quien encargó la venta de la U televisiva virtual con la idea de aprovechar que las nuevas tecnologías permiten personalizar en función de cada mercado los anuncios que se ven durante las retransmisiones de los partidos en el Santiago Bernabéu.

 

 

 

 

Dos meses después, el club hizo otro movimiento para ampliar su público y anunció la puesta en marcha de una cuenta en la plataforma de streaming Twitch. Ya en pleno confinamiento, el club se estrenó con un canal en Twitch apoyando a su jugador Marco Asensio, que se proclamó campeón de un torneo de eSports de LaLiga.

 

No obstante, la llegada de la pandemia trastocó todos los planes del club, que se apresuró a renegociar con su plantilla después de que se detuviera indefinidamente LaLiga. En abril, el club anunció el acuerdo de una rebaja salarial de hasta el 20% con los integrantes del primer equipo de fútbol y baloncesto, así como los respectivos cuerpos técnicos. En concreto, el club acordó que el recorte inicial sería del 10%, pero que hubiese podido alcanzar el 20% “en función de las circunstancias”. En síntesis, el club se garantizaba un ahorro de 39 millones de euros.

 

Y sólo un mes después recibió una de las pocas buenas noticias del ejercicio (dejando de lado la victoria en el Campeonato de Liga): el Tribunal General de la Unión Europea determinó en mayo que la Comisión Europea no había probado que se hubiese conferido una ventaja al Real Madrid en el convenio de 1996 por el que el equipo de fútbol cedió al Ayuntamiento de Madrid los terrenos de su ciudad deportiva en el tramo final del Paseo de la Castellana, a cambio de otras parcelas a determinar en un futuro. Finalmente, en 1998 se acordó ceder al club unos terrenos en Las Tablas que se valoraron en 595.194 euros, pero aquella operación no llegó a ejecutarse y en 2011 se indemnizó al club con 22,6 millones, tras una nueva tasación de aquel activo inmobiliario que elevó su valor a ese importe. Después de que Bruselas determinara en 2016 que el club se había beneficiado de ayudas ilegales del Estado en la operación, el tribunal europeo dio la razón al club merengue, permitiéndole recuperar los 20,4 millones de euros que devolvió al Ayuntamiento cuando la Comisión Europea (CE) así le obligó.

 

Nuevo Bernabéu, a toda mecha

Por otro lado, la pandemia puso sobre la mesa una oportunidad para el Real Madrid que el club se apresuró en aprovechar. El club tenía programado empezar las obras dentro de su estadio el 1 de junio y, una vez decidido por parte del Consejo Superior de Deportes (CSD) que los partidos se reanudarían a puerta cerrada, el club señaló que los partidos se celebrarían en la ciudad deportiva de Valdebebas.

 

Con una inversión de 525 millones de euros, la paralización de la competición permitió que las obras hayan avanzado sin interrupciones y más rápido de lo previsto. Cada partido en el Bernabéu suponía una interrupción de tres días y un esfuerzo extra en el montaje y desmontaje de la maquinaria que, ahora, el club se ha ahorrado. Aunque el club no ha revelado cuánto tiempo se ha ahorrado, fuentes consultadas por el El País señalaron en noviembre que el club podría concluir la reforma, en manos de la constructora FCC, bastante antes de la fecha de fin programada en un principio, que era agosto de 2022.

 

 

 

 

Un estadio renovado permitirá, a medio plazo, ampliar los ingresos del club madrileño alternativos a la comercialización de derechos audiovisuales.

 

Notas al curso

Las notas al curso económico del Madrid empezaron a conocerse en septiembre, cuando trascendió que, a pesar del impacto del Covid-19, el club cerraría el ejercicio 2019-2020 con un beneficio de 320.000 euros, frente a los 41,4 millones de beneficio antes de impuestos que había presupuestado para la campaña.

 

En la misma semana en que el Barça anunciaba una caída del 30% de los ingresos (que provocaron unas pérdidas de 97 millones de euros), su rival decía que había dejado la portería a cero.

 

Ahora bien, las previsiones para la temporada 2020-2021 no dejan el mismo lugar para el optimismo. El club blanco prevé reducir sus ingresos un 14%, hasta 616,8 millones de euros, frente a los 714,9 millones de euros con los que cerró 2019-2020.

 

En relación al presupuesto 2019-2020 anterior a la pandemia, el descenso es del 25%. La entidad reconoce que el resultado después de impuestos va a verse afectado “sensiblemente” por esta “significativa” caída de los ingresos, si bien recalca que “el club intentará materializar oportunidades de mejora para tratar de equilibrar el resultado como se logró en el ejercicio anterior”. Además, a diferencia del FC Barcelona, que trabajaba con un escenario más optimista, el Real Madrid anticipa en su presupuesto que el impacto de la pandemia se extienda durante todo el ejercicio 2020-2021.

 

 

 

 

Igual que en el Barça y buena parte de la élite europea del fútbol, la cuadratura del círculo de las cuentas del Real Madrid en la presente temporada deberá pasar por un esfuerzo de la plantilla. El club propuso en noviembre una rebaja salarial a los jugadores del primer equipo de entre el 10% y el 15%, para hacer frente a la caída de ingresos generada por el coronavirus, con un ahorro potencial de hasta 58 millones de euros.