Los deportes de invierno en Europa prevén una caída de ingresos del 30% este año

Los deportes de invierno claman por su rescate. Las estaciones de esquí se han resentido por las restricciones sanitarias en este puente de diciembre y dependen de las decisiones de los gobiernos para poder salvar parte de la temporada. En un manifiesto elaborado por la Federación Europea de la Industria del Equipamiento Deportivo (Fesi) se ha estimado una caída del 30% de los ingresos en el sector si los complejos turísticos cierran durante las vacaciones de fin de año.

Dicho manifiesto, que está firmado por diferentes federaciones como la Asociación Española de Fabricantes y Distribuidores de Artículos Deportivos (Afydad), y compañías como Head, Intersport o Salomon asegura que alrededor de 60 millones de europeos son esquiadores habituales. Además, menciona que la industria de los deportes de invierno genera alrededor de 10.000 millones de euros en Europa al año y da empleo a cerca de 1,5 millones de personas.

Además de la caída de ingresos, pérdida de puestos de trabajo y la interrupción del negocio, a largo plazo, “las consecuencias serán devastadoras para las propias regiones y destinos turísticos”, asegura. El tejido local de pequeños comercios familiares y proveedores de servicios “se dañará irrevocablemente”.

“La fuente de infección no está en las montañas ni en las pistas de esquí”

El sector asegura que “no está nada claro qué criterios se utilizan en el discurso político para abordar las ayudas económicas” y preocupa que “las decisiones actuales sólo puedan aplazar el problema y generar competencias malsanas entre países sin proporcionar soluciones concretas”. En la declaración se deja claro que “la fuente de infección no está en las montañas, en las pistas de esquí, sino en lugares donde la gente se reúne para actividades sociales”.

Por último, la industria de los deportes de invierno ha lanzado algunas propuestas para los estados miembros de la Unión Europea, como un mayor apoyo y reconocimiento, un enfoque concreto para las reaperturas de los complejos turísticos en enero, una mayor previsibilidad en la toma de decisiones y un debate exhaustivo para una mayor coordinación de las vacaciones relacionadas con los deportes de invierno con una perspectiva a largo plazo.