Madrid invertirá 18 millones de euros para sumar otra pista cubierta en La Caja Mágica

Madrid sigue invirtiendo en tenis. La empresa municipal Madrid Destino formalizó el pasado viernes la firma del contrato para ampliar el recinto de La Caja Mágica, que contará con una nueva pista cubierta con capacidad para 10.000 personas.

La inversión prevista para la ejecución de la obra es de 18 millones de euros, que será cofinanciada al 50 % entre el Ayuntamiento y Madrid Trophy Promotion (MTP), empresa encargada de la organización del Mutua Madrid Open, según ha informado el consistorio en un comunicado.

La Caja Mágica alberga anualmente el Mutua Madrid Open, un tornero de categoría Masters 1000 de la Asociación de Tenistas Profesionales (ATP) como la Women’s Tennis Association (WTA). Para llevar a cabo el evento, el recinto madrileño dispone de tres pistas con capacidad para 12.500 personas, 2.900 asientos y 1.900 espectadores, respectivamente.

Según el propio consistorio, “la diferencia de aforos entre las pistas conlleva dificultades para programar partidos de gran importancia en el mismo torneo”, tal y como insisten la ATP como la WTA.

Mutua Madrid Open cuenta actualmente con tres pistas en La Caja Mágica

Una vez la nueva pista esté terminada, se convertirá en la segunda más relevante del recinto, sólo por detrás de la pista central Manolo Santana. El propio torneo prevé posicionarse en el top 3 de torneos Masters 1000, en un evento que tiene garantizada su continuidad hasta 2030 en Madrid en virtud de un convenio firmado en septiembre de 2021 entre el Ayuntamiento, Madrid Destino y MTP.

En condiciones habituales, el torneo de la capital española factura algo más de cuarenta millones de euros y cuenta con un impacto económico de más de cien millones de euros, según datos de la organización del último Mutua Madrid Open sin restricciones por Covid-19.

El evento tenístico, cuya primera edición fue en 2002, fue durante siete ediciones un torneo de pista rápida hasta que, en 2009, con el cambio de pista a la Caja Mágica, también cambió la superficie, esta vez a tierra batida. En la edición de 2012, la superficie fue sustituida por arcilla de color azul, que causó polémica por la nula visibilidad de la pelota y los resbalones de los tenistas. Al año siguiente, la pista volvió a la arcilla corriente, superficie en la que se sigue disputando actualmente.