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Lakers-LeBron, una alianza de 154 millones de dólares que va más allá de la cancha

La estrella de la NBA llega al segundo mercado de Estados Unidos con importantes lazos en la industria audiovisual, que espera impulsar desde su nueva y puede que última etapa en la pista.

Lakers-LeBron, una alianza de 154 millones de dólares que va más allá de la cancha
Lakers-LeBron, una alianza de 154 millones de dólares que va más allá de la cancha

Guillermo G. Recio

3 jul 2018 - 04:57

LeBron James y Nike cuentan con una de las relaciones jugador-marca más sólidas de la industria deportiva

 

 

El traspaso de Neymar al Paris Saint-Germain (PSG), el fichaje de Kevin Durant por los Golden State Warriors y, ahora, la firma de LeBron James por Los Angeles Lakers. Tres casos diferentes, con objetivos distintos y grandes repercusiones, que afectan a la industria deportiva más allá de la cancha. Ahora con la llegada de la estrella de la NBA al segundo mercado de Estados Unidos, tanto sus negocios personales como los de la ciudad esperan impulsarse mutuamente en los próximos cuatro años, en los que James cobrará 154 millones de dólares (131 millones de euros).

 

Aunque la principal razón de la marcha de su Ohio natal pase por “el bienestar de la familia”, los intereses de James en la industria audiovisual de Hollywood no pasan desapercibidos. El deportista, junto con su amigo de la infancia y compañero de negocios Maverick Carter, cuentan con una compañía llamada SpringHill Entertainment, que ya ha realizado varias series de animación y documentales. Además, esta sociedad tiene una alianza con Warner Bros para realizar nuevas producciones.

 

A ello se suma el propio medio de comunicación Uninterrupted, una plataforma que da voz directamente a los atletas y que compite con The Player’s Tribune. Pero el aterrizaje de James en la capital del american show business también podría trasladarse al propio plató de rodaje incluso para el deportista, que tiene pendiente recuperar su papel en Trainwreck, una comedia producida por Universal.

 

Pero más allá de la industria audiovisual, Lebron James ha creado un imperio basado en las colaboraciones y el hecho de tomar partido en cada uno de los contratos de patrocinio que ha firmado hasta el momento. El mayor ejemplo es Nike, marca con la que disfruta de un contrato vitalicio y gracias a la que ha desarrollado una línea de ropa y zapatillas con sus siglas, algo que le ha permitido ser uno de las principales referentes en el fenómeno de las sneakers.

 

 

 

 

Esta filosofía también ha sido replicada en otros negocios como con Blaze Pizza, una cadena de restauración de la que es embajador y con la que ha abierto 17 locales como franquiciado. También es imagen de multinacionales con las que ha recorrido gran parte de su carrera, como Beats by Dre, Kia, Intel y Sprite, entre otras.

 

Esta implicación también es un valor añadido para el Los Angeles Lakers, que se encuentra en plena reconstrucción tras cinco temporadas sin pisar los playoffs. Se trata de la segunda franquicia de la NBA en cuanto a valoración sólo por detrás de los New York Knicks, quiere recuperar el éxito de Kobe Bryant y dejar de ser el peor conjunto de la liga.

 

Con una estimación económica de 3.300 millones de dólares (2.824 millones de euros), quieren seguir siendo los reyes del Oeste ante el ascenso deportivo y económico de los Golden State Warriors. Para la familia Buss, representa una de sus mayores oportunidades para volver a ver el Staples Center lleno de público y de figuras relevantes en la industria de la música y el cine, como Snoop Dogg o Jack Nicholson.

 

Un estudio de la Harvard Kennedy School demuestra cómo han influido en los negocios de restauración de los alrededores del pabellón en las idas y venidas de LeBron James a Miami y Cleveland en 2010 y 2014, respectivamente. Según el informe, durante los años que el jugador estuvo en la franquicia sureña, los bares y restaurantes de Cleveland sufrieron una caída en picado de consumo.

 

 

 

 

Almismo tiempo, cuando James volvió a los Cavs, el número de restaurantes en un radio de una milla del Quicken Loans Arena se dispararon. Por tanto, “hay una correlación positiva entre el número de victorias en temporada regular por los Cavaliers y los Heat y el número de restaurantes y bares ubicados cerca del pabellón”, concluye este documento. Además, se da la circunstancia de que estos negocios suelen ser locales y no de grandes compañías, por lo que el impacto en la ciudad es aún mayor.

 

Esta repercusión económica en la región donde juega James no será igual en el caso de Los Ángeles por un motivo: la fundación. La entidad sin ánimo de lucro del jugador ha invertido en los últimos tres años un total de 41 millones de dólares en colegios de Ohio y, por el momento, sus planes son mantener esta ayuda a los alrededores de Akron, su ciudad natal.

 

Según explican multitud de medios estadounidenses, la figura clave para convencer a Lebron James de incorporarse a la franquicia angelina ha sido Magic Johnson, una estrella dentro de la pista y ahora también fuera de ella. El ahora directivo de los Lakers, es uno de los socios fundadores de Los Angeles FC, y teniendo en cuenta la afición de James por el fútbol y su pequeña inversión en el Liverpool FC, el tiempo dirá si él se convertirá también en uno de los inversores de la nueva franquicia de la MLS.