El Atleti eleva a 300 millones el coste del Wanda Metropolitano

Las mudanzas no son sencillas, y tampoco lo será la del Atlético de Madrid al Wanda Metropolitano. El club, que ya tuvo que endeudarse más de lo previsto para financiar la construcción del nuevo estadio, ahora también adelantará los recursos necesarios para financiar las obras de los accesos, después de que en las últimas semanas se haya puesto en duda que la inauguración pueda realizarse en la fecha prevista. En total, serán 44 millones de euros, de los que podrá recuperar 20 millones en la operación de compraventa de la parcela donde se levanta el equipamiento.

Del importe total, 30 millones servirán para la construcción de viales, otros 8 millones se destinarán a las conexiones con el tronco de la M-40 y 6 millones para los aparcamientos. Estas sumas elevan el coste total del proyecto a 300 millones, entre los 240 millones que se contabilizan en la propia obra y los 60 millones de euros por la compra de los terrenos donde se ubica el complejo deportivo, a las afueras de Madrid.

Miguel Ángel Gil Marín, consejero delegado del Atleti, explicó en un encuentro con medios de comunicación este viernes que "el objetivo es triple: mejor estadio, mejores comunicaciones y acabar más rápido", según declaraciones recogidas por Marca. En cuanto a la rentabilidad del estadio, el primer ejecutivo y máximo accionista habría señalado que "el objetivo es amortizarlo en seis o siete años. La inversión no es gratis, pero nuestro modelo de gestión pasa por el riesgo asumido".

Este se basa en un alto endeudamiento, como admitió el propio dirigente, que indicó que "el ratio ideal es uno a uno entre deuda financiera neta e ingresos anuales. Ahora estamos lejos de él, pero nuestro objetivo es acercarnos", aventuró. Una de las claves, como ya publicó este diario, será la cancelación del préstamo que firmaron con Inbursa para financiar las obras, y que se realizará con la venta de los terrenos donde hoy se erige el Vicente Calderón.

Otra de las claves para apuntalar la viabilidad y rentabilidad de la entidad deportiva será el aumento de los ingresos. Gil Marín ya avanzó hace unos meses que su reto es alcanzar los 400 millones de euros de facturación en 2020, de los que 100 millones deberían proceder del área de marketing. Por el momento, el Atleti tiene un contrato a largo plazo con Nike que asegura un mínimo de casi 8 millones al año y ha renovado un año más con Plus500 para la publicidad en la camiseta. Además, ha sumado nuevos socios como Philips y Bwin.

También ayuda el hecho de que, por primera vez, se han rebasado los 100.000 socios, lo que ayuda a pensar en un récord de abonados en el Wanda Metropolitano. Para lograrlo, como recordó Gil Marín, se instaurarán nuevas propuestas como una grada familiar para 2.000 personas "con servicios especiales para niños", una grada de animación para casi 5.000 personas "con precios muy reducidos para los jóvenes" y "una oferta que multiplica por cinco la existente en el Calderón para los discapacitados en sillas de rueda".

El grupo chino, que ayudó al club con una inyección de 60 millones de euros en 2015 a cambio del 20% del capital, sigue siendo un importante aliado en la proyección de la marca en Asia y el desarrollo de academias en China. Además, es un "socio estratégico" con vocación de permanencia, aunque Gil Marín aseguró que ni ellos tienen voluntad de elevar su paquete accionarial en el club, ni él de desprenderse de títulos o perder la mayoría de control que hoy tiene.